Matinée

Lo de este chico sí que es la “vida en movimiento de dibujos animados”. Con apenas veintitrés primaveras, ha conseguido darle una de las pátinas de frescura más oxigenantes que se le recuerdan al Top Ten de álbumes más vendidos en la vieja Albión. Un poco de clásico rock’n’roll cimbreante, otro poco de trote pop al estilo Housemartins/Barenaked Ladies, algo de vivaracho espíritu soulful de la estirpe de The Style Council y una pizca de rítmica ska y hete aquí lo que desde las islas ya se saluda como la respuesta masculina a Lilly Allen (¿no habíamos quedado en que ella era la respuesta femenina a Mike Skinner?). Eso sí, con unos visos de consistencia que, a falta de la prueba del algodón del directo -no debería tardar en dejarse caer por aquí-, ya quisiera para sí la lolita del pop suburbial. Este contagioso “Matinée”, más inglés en su concepto que el fish’n’chips, no es más que un debut hecho con los retazos de algunos de los singles que Peñate ha ido editando en los últimos meses (con “Spit At Stars”, “Torn On The Platform” o “Second Minute Hour” a la cabeza), al tiempo que se pateaba el circuito de pubs londinense. Y hay en él motivos de sobra para sumergirse: fluidez narrativa, jovial versatilidad, pocas pretensiones y digestión fácil.