Tras pasar tres años en Fuerteventura, el Womad vuelve a la capital de las islas para contabilizar su edición número dieciocho que contará con un formato de tres días, dos de ellos de conciertos y un tercero de actividad familiar exclusivamente. Por los dos escenarios, situados uno en el Parque de Santa Catalina y otro en la trasera del Edificio Miller, pasarán una veintena de artistas nacionales e internacionales que como siempre equilibrarán experiencia contrastada con el riesgo y el placer de la emergencia y el descubrimiento.
Ahí estará por primera vez en la isla el legendario jamaicano Horace Andy recuperado en los noventa por Massive Attack. También los festivos y bailables The Brand New Heavies, garantía de diversión con sus imparables clásicos y esa vocalista excepcional que es N’Dea Davenport. De Níger llegará la tormenta eléctrica de Bombino, el músico Tuareg seguro que arrollará con su “blues acelerado del desierto”.
En la parte más calmada, o quizás no tanto, la bereber marroquí residente en Francia Hindi Zahra, que transmite verdadero magnetismo en el escenario mientras reparte soul, blues, folk, rock, chanson o música oriental. Desde Cabo Verde vendrán las dulces melodías acústicas de Miroca Paris, conocido por acompañar a la percusión a la gran Cesária Évora y ser sobrino del célebre Tito Paris, que emprende aventura en solitario. Una de las mejores invitaciones a la fiesta llegará con ese homenaje-renovación del mambo de la Orkesta Mendoza, que entusiasmó al público del pasado Womad Cáceres y con ese hiperactivo, pero tranquilo Sergio Mendoza (Calexico, DeVotchKa, Mexrrissey, Los Hijos de la Montaña) al frente.
Se intuye que sorprendente será la presentación de La Dame Blanche, proyecto de la cubana Yaite Ramos, cantante, rapera y flautista, hija de Jesús “Aguaje” Ramos (maestro director de la Orquesta Buena Vista Social Club), con un directo que no dejará a nadie indiferente. Tampoco podemos dejar de recomendar el interesante el proyecto Beating Heart, un colectivo de artistas que han conseguido el acceso al impresionante archivo que acumuló durante cuarenta años el musicólogo Hugh Tracey con grabaciones de campo del África subsahariana. Las remezclas que han hecho con ellas suenan impresionantes. Veremos su traducción al directo.
Y en la parte nacional se disfrutará de la idiosincrasia de Niño de Elche, la locura gozosa de los madrileños de Tu Otra Bonita, el nuevo proyecto de la canaria Yanara Espinoza (también en Violeta Vil) bautizado como Papaya, la festividad de los tinerfeños 101 Brass Band, el mestizaje revolucionario de los también canarios Kuarembó o el alegre reggae-dancehall de Profecía Crew.
El cartel aún no está cerrado del todo, pero añadan los siempre interesantes talleres de adultos e infantiles, el ciclo de cine, los mercados global y local y el área de restauración Mercados del Mundo. Y sinceramente, si me permiten el atrevimiento y lo dice alguien de la península, unas las mejores virtudes de este festival es vivirlo con este público canario que lo hace de forma entregada, atenta y apasionada.
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