El autor de este libro autobiográfico pretende unir sus dos grandes pasiones, la fotografía y la música. Aquí nos relata estos tres años durante los cuales ha recorrido el país acompañando a algunos de los grupos de música más relevantes de la escena nacional. Tres años en los cuales Rafa ha llegado a ser uno más, o quizás algo mejor: ese testigo invisible que nos permite con sus potentes fotografías ver, entender y disfrutar de lo que normalmente no vemos cuando nos situamos delante de un escenario y disfrutamos de un concierto. En siete capítulos Rafa nos introduce en las entrañas de bandas que llenan estadios como Vetusta Morla o Los Planetas, bandas que adoran la carretera como Sidonie o Lori Meyers o nos enseña como graban sus discos otros como Dorian o Neuman. Siete capítulos muy disfrutables y claves en toda banda o artista. Grabación y promoción, viaje, pruebas de sonido, comer, dormir y descansar, backstage, concierto y post-concierto.
La magia y la gracia de Rafa Ariño como fotógrafo reside en lograr captar los momentos, disparar en el momento preciso y lograr humanizarnos a todos estos músicos. No tiene precio el poder vislumbrar las almas de los componentes de grupos como La Habitación Roja, Leon Benavente, Second, Supersubmarina, Belako o Love Of Lesbian entre muchos más. Como indican en el prologo del libro Gerardo Cartón y Ángel Carmona aquí hay mucho arte, pero también un sincero homenaje a todos aquellos que contribuyen con su trabajo y esfuerzo a que podamos disfrutar de esas bandas que nacieron en bares y acabaron llenando plazas de toros. Un libro que recopila momentos vividos, la trastienda invisible para el gran publico de esos instantes que sin libros así quedarían en el más triste e injusto de los olvidos. Especial ilusión me hace ver el interior del Vinilo Bar de Gràcia (Barcelona) donde la gente de Inspira y Love Of Lesbian acaban de copas y donde todos, servidor incluido, han disfrutado de buena música y mejor compañía.
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