Este festival ha sobrepasado el ecuador de la primera edición del ciclo. Desde que se inició el pasado 30 de diciembre, se han celebrado más de ocho encuentros con música en directo y se han vendido más del 80% de las entradas.
Han intentado recobrar las sensaciones de cómo se vivían los conciertos antes de la pandemia, a pesar de las continuas restricciones de movilidad, cambios de horario y de aforo. Todavía les quedan seis conciertos de esta primera edición y ya están pensando en cómo será la próxima.
Ya están agotadas las entradas para algunos de los próximos eventos como el que ofrecerán los andaluces Vera Fauna, el próximo jueves 18; o el del joven ceutí Mori junto al madrileño Rusowsky el jueves 18 de marzo.
Aún están disponibles las últimas entradas para el resto de conciertos, como el del grupo de rock madrileño Parquesvr, el próximo día 25 de febrero; la banda de groove-pop Blanco Palamera, el 4 de marzo; o el santiagués Ortiga, el 11 del mes que viene. Como colofón final, estará el 25 de marzo en la sala Independance Club un icono de la música urbana estatal, Pedro Ladroga.
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