Faltan tan solo tres días para la celebración del festival barcelonés (o, si se prefiere en números, unas escasas setenta y dos horas), fijado entre las fechas del 18 19 y 20 de este mes. Y no han sido horas fáciles para la organización: los riggers o montadores de los elementos aéreos de los escenarios del festival, pertenecientes a la empresa UTE Rigging, no están contentos con la negociación de una nueva licitación por parte de la Fira Barcelona (lugar de celebración del festival), ya que esta no incluye nada relativo a sus contratos y sus condiciones laborales actuales y por lo tanto no asegura su continuidad. Los tambores de huelga, por tanto, no son una novedad, ya que sus exigencias llevaban días sobre la mesa. La propia huelga lleva ya, casi, una semana en activo, desde el día 11. Sin embargo, la decisión de la Fira Barcelona de contratar a otras dos empresas a modo de sustitución parece haber volado casi todo, si no todo, por los aires. Los trabajadores de UTE Rigging, que naturalmente consideran violado su derecho a huelga, han llevado esta decisión a los tribunales, y el juzgado de lo social número 27 de Barcelona, tal y como cuenta RAC1, ha admitido a trámite la denuncia. En las próximas horas podrían anunciarse medidas cautelares.
Tanto el festival como los trabajadores esperan, ansiosos, la respuesta judicial: si se considera erosionado el derecho a huelga el juez podría decretar el despido de los trabajadores recién contratados, no habría tiempo a realizar cambio alguno y, por tanto, habría de suspenderse el festival, como ya han adelantado los propios organizadores del Sónar a RAC1. Este conflicto laboral, de hecho, ya ha provocado una bajada en el ritmo de ventas de las entradas. A pesar de todo, por parte del Sónar nos aseguran que "el festival se sigue montando tal y como estaba previsto. Nos consta que las partes, FIRA y riggers, van a seguir hablando para llegar a un acuerdo que no perjudique al festival". El Sindicato de Riggers, por su parte, asegura que están preparados para montar en 36 horas todo lo necesario para llevar a cabo el festival, por lo que dicte lo que dicte el juez están dispuestos a sentarse y negociar con la Fira, a quien acusan de no querer negociar.
Actualización [16-07-2019 10:20h]: El juzgado de lo social número 27 de Barcelona y su juez titular, Santiago Vidal, han decidido desestimar las medidas cautelares que pedían los riggers, por lo que el montaje del Sónar seguirá haciéndose con las otras empresas contratadas por la Fira Barcelona. Según recoge EFE, fuentes del Sónar han asegurado que dicha decisión supone que el festival se celebrará con normalidad. La Vanguardia recoge dos de los argumentos principales esgrimidos por Vidal: por una parte afirma que "ejercer legítimamente el derecho a huelga de unos cuantos, no puede poner nunca en peligro la viabilidad del lugar de trabajo de muchos otros trabajadores, que también merecen la tutela de los tribunales de justicia", y por otra cita criterios puramente económicos, ya que según él produciría "prejuicios irreparables y muy elevados a otras empresas y trabajadores de sectores como el transporte, la hostelería y la restauración”.
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