“El corazón de una banda es ser una unidad creativa”
EntrevistasPulp

“El corazón de una banda es ser una unidad creativa”

Sergio Ariza — 10-06-2025
Fotografía — Tom Jackson

El regreso de Pulp con un nuevo disco, “More” (Rough Trade/Popstock!, 25) es una de las noticias musicales del año. El primer disco de la banda de Jarvis Cocker en veinticuatro años, desde el lejano “We Love Life” de 2001. Y además lo estarán presentando en nuestro país, concretamente en el Bilbao BBK Live (10 julio).

Tengo cita en un hotel de Madrid con Jarvis Cocker y Nick Banks para hablar de todo ello unos 10 días antes de que anuncien al mundo la aparición del disco, que han dedicado al bajista Steve Mackey, recientemente fallecido. El disco responde muy bien, siguen sonando a ellos mismos como siempre han hecho y las canciones tienen muy buen nivel.

Cocker y Banks son gente normal, como no podía ser de otra forma, aunque cada uno parezca venir no ya de una clase diferente sino de un planeta distinto, dos amigos con unas raíces profundas en el Norte de Inglaterra, dos tipos que han compartido carretera, manta y cientos de anécdotas que no dudan en recordar con sonoras carcajadas de Nick y la lengua afilada que uno espera del autor de “Babies” o “Common People”.

La primera pregunta puede que sea obvia pero ¿por qué volver a grabar un disco?
Nick: Es una pregunta difícil que, evidentemente, nos van a hacer en muchas entrevistas. Yo creo que una vez que nos encontramos los cuatro en una habitación, aunque fuera ensayando las viejas canciones, siempre cabía la posibilidad de que surgiera algo nuevo, te guste o no te guste. Así que una vez que estábamos con ello nos preguntamos, ¿oye por qué no probamos esta idea? Además, cuando empiezas a dar conciertos está bien tocar las canciones antiguas, pero llega un momento en el que necesitas un desafío, tanto para nosotros como para el público, y meter algo que nadie ha escuchado antes hace que todo se vuelva más interesante, o no (risas), para la audiencia. Así que una vez que metimos una nueva canción y fue bien decidimos ir a por más.
Jarvis: Sí, la tocamos y no salieron corriendo, ni se fueron al bar a pedir algo.
Nick: Parecía que la gente estaba muy contenta de poder oír una nueva canción.
Jarvis: Es lo que hace la gente cuando decide formar una banda, crear canciones para poder tocarlas en directo, unas son bien recibidas otras no tanto y, con el tiempo, te excita la idea de poder grabarlas y hacer un disco. Y luego va cambiando y lo que necesitas es un disco porque te lo pide la compañía. Pero este disco fue más parecido a lo primero, nadie nos lo estaba pidiendo, fue más espontáneo.

¿No hubo nada planeado?
Jarvis: Hombre, no fue como si los cuatro nos encontráramos de casualidad en el estudio (risas)
Nick (Riéndose): ¿Pero cómo han llegado estos micrófonos hasta aquí?
Jarvis: Todo surgió porque hicimos esta canción en directo en 2023, una que había escrito para una obra (“Hymn Of The North”) y fue muy bien. Así que luego decidimos hacer otra, “Background Noise”, y también fue bien. Así que, como ya teníamos dos, cuando terminamos la gira decidimos alquilar un local de ensayo y ver qué más nos salía. Pero el factor decisivo fue cuando grabamos todas esas canciones nuevas y se las pasamos a nuestra mánager, Jeannette Lee, y nos llamó diciendo que ella veía claramente un disco ahí.
Nick: Además creo que al final el corazón de una banda es ser una unidad creativa y no solo los directos, ya sabes unirnos cada cierto tiempo para tocar las canciones que ya grabamos hace tiempo. Así que es mejor seguir siendo creativos y no solo una especie de fonógrafo en directo.

The Cure sacó un disco de regreso el año pasado llamado ‘Songs Of A Lost World’ que recibió el elogio unánime de la crítica, ¿os ha servido de inspiración ver a una gran banda volver con uno de sus mejores discos?
Jarvis: ¿Cuándo salió ese disco?

Se llevaba hablando bastante de él pero creo que salió en la segunda mitad del año pasado (el disco salió el 1 de noviembre de 2024)
Jarvis: Sí, pues creo que ya habíamos escrito todas las canciones para ese momento y creo que grabamos “Spike Island”, que fue la primera, en agosto, trabajando con James Ford en su estudio. Lo hicimos muy rápido, creo que en dos días, y ya supimos entonces que estábamos en el camino correcto.

“Siempre odiamos ese nombre (Britpop) y los aspectos nacionalistas que acarreaba, porque eran horribles”

¿Qué tipo de presión siente una banda con una trayectoria como la vuestra ente el hecho de sacar su primer disco casi en 25 años?
Jarvis: Es una cuestión muy interesante, yo creo que si tuviera el suficiente dinero, grabarlo ya hubiera sido suficiente para mí, porque fue una experiencia muy buena, no nos llevó demasiado tiempo y las canciones suenan bien. Es un sentimiento extraño cuando creas algo y te sientes muy apegado a eso y luego se edita y la gente empieza a escucharlo y entonces sabes que es como decirle adiós porque ya no es tuyo solamente, ha salido al mundo.
Nick: Sí, porque nosotros hemos estado desde el día 1 en el que se empezó a crear y para esta fase ya lo has oído, lo has internalizado, lo conoces todo sobre él y no es que estés cansado de él, pero estás preparado para empezar con lo siguiente. Pero una vez que está fuera es el momento de que otros opinen sobre él y lo único que puedes hacer es, si sale mal, preguntarte ¿estaba equivocado al pensar que era un buen disco? Aunque eso, desde luego, también puede ser un poco aterrador, ver lo que la gente opina de él.

El disco parece un poco dividido entre dos partes, una primera con los temas más movidos y una segunda con las baladas más sentidas ¿Está buscado a propósito?
J: Pues no le dimos muchas vueltas a la secuenciación del disco. Sí que había tres canciones, que no es que no tuvieran la misma letra pero en las que sí que canto sobre sentimientos, y ese es el único tema que tiene este disco. Eran “Spike Island”, “Farmer’s Market” y otra en la otra cara, “Background Noise”, en las tres se nombran sentimientos, así que lo único que tenía claro era que esas tres canciones tenían que estar alejadas unas de otras, porque si no me iban a preguntar sobre todos esos sentimientos…

Pues no lo has conseguido, la siguiente pregunta que tengo escrita es en este disco se habla mucho de sentimientos, de amor, de madurar y crecer, ¿es ese el tema que une el disco?
(Risas de los dos) J: Lo sabía, evidentemente eso le da una estructura al disco pero, aparte de eso, no había realmente un concepto.

Las letras, por lo general, son bastante positivas ¿se ha vuelto Jarvis Cocker un optimista en medio del caos mundial en el que nos encontramos?
J: Es un poco extraño pero sí. Hice un propósito de año nuevo hace unos cinco años en el que iba a intentar ser más optimista, Pero principalmente es porque nunca he sido optimista en nada. Solía creer que existe un método para impedir que pasen cosas malas, que podías preverlo y entonces no pasaría (Habla con Nick) ¿Te acuerdas cuando vivíamos en esa casa con ascensor? Me metía en el ascensor y lo único en lo que podía pensar era en todas las cosas malas que podían pasar, la primera era quedarme allí encerrado para siempre, pero repasaba todas las cosas malas mientras esperaba que llegara esperando que cuando lo hiciera, ya se me hubiera ocurrido todo lo negativo para que nada de ello pasara. Luego le conté a mi mujer sobre eso que hacía y lo estresante que era pensar siempre en todo lo malo que podía ocurrir y me dijo “podías pensar sencillamente en las cosas buenas que te pueden pasar” y creo que tiene parte de razón, así que estoy intentando quitarme el hábito, aunque a veces todavía me pasa. Pero supongo que si eso es optimismo, entonces sí, me he vuelto más optimista. Está bien eso de enfocarte en las cosas buenas en vez de en las cosas malas que te pueden pasar, enfocarte en lo bueno para que sea eso lo que te pase.

“Spike Island” empieza el disco por todo lo alto musicalmente, mientras que líricamente volvéis al mítico escenario del famoso concierto de los Stone Roses, como en “Sorted For E’s And Wizz”, ¿qué es lo que os parece tan significativo de aquel concierto para volver a él?
J: La verdad es que yo no estuve en ese concierto, aunque dos miembros de la banda sí. Pero he visto algunas imágenes en YouTube y el comienzo es muy bueno. Ian Brown se sube al escenario y comienza a decir (imita a Ian Brown) “Time, time!”
N: (Risas) Tengo que buscar eso
J: Sí, es un gran comienzo para un concierto. Los Stone Roses eran una gran banda, sobre todo en el norte de Inglaterra, fue una cosa muy nuestra... Los que somos del norte pensábamos: esta es nuestra banda. Y era bajo sus propias reglas y en el sitio que habían elegido ellos. Fue una cosa muy poderosa hacer ese concierto. Creo que por eso se ha convertido en algo legendario, no funcionó especialmente bien, pero estaban intentando crear algo bueno, algo para el norte de gente del norte, algo que todavía resuena… Yo nunca vi a los Stone Roses en su pico, los pude ver ya cuando estaban promocionando su segundo disco, que aun así creo que también era bueno, pero se separaron poco después, y los vi también cuando se volvieron a juntar e hicieron ese concierto en Manchester y verlos fue una de esas experiencias vitales que te afectan. La gente está obsesionada con ellos y es un poco normal porque en los 80, cuando el norte había sido totalmente desmantelado por el gobierno conservador ellos nos dieron esperanzas.

“Tina” es una de las canciones más directas y accesibles del disco, creo que podría ser uno de los sencillos del disco, además líricamente es una de las canciones más Pulp de todas, con Jarvis cantando sobre una chica que te gustaba cuando eras joven en Sheffield, lo que la une a otras chicas de canciones vuestras como “Disco 2000”, “Common People”, “Razzmatazz” o incluso “Babies”, ¿te siguen dando flechazos como los que narras en estas canciones todavía o es algo que desaparece con la edad?
J: No, no, me arrestarían ahora mismo. Es cierto que en mis letras no suelo meterme en personajes, siempre suelo ser yo mismo el que canta, no me convierto en Ziggy Stardust, pero en esa canción en particular sí que soy esta especie de personaje extraño…
N: (Riéndose) Sí, con un poquito de acosador… Aunque hay que recordar que antes de que existiera Internet cuando conocías a alguien, la única manera de contactar con ella era acercarse y decirle algo. En estos tiempos hay muchas otras maneras de hacerlo
J: Tenías que ser directo, y de eso habla un poco la canción de que te podías obsesionar con alguien a quien no conocías y te podías destrozar la vida siguiendo una película que te montabas a ti mismo en tu mente. Y no es una buena idea, y lo sé porque a mí me ha pasado también. Así que no lo hagáis, por favor.

En “My Sex” se pueden escuchar otras de vuestras variadas influencias, estando a medio camino entre Barry White y Serge Gainsbourg, ¿Cuáles creéis que han sido las principales influencias para este disco y si ha habido alguna nueva?
N: Es un disco muy variado, así que sería difícil decir cuáles, sobre todo porque somos cuatro personas muy distintas con gustos bastante variados, así que creo que es difícil decir cuáles exactamente han sido las influencias del disco. Creo que en la carrera de Pulp es difícil decir qué influencias particulares han tenido cada disco, somos una banda bastante personal, si eso es bueno o malo, ¿quién sabe? Aunque creo que eso es bueno, sobre todo en este disco, y creo que es distinto a los demás y variado, lo que creo que es una de sus fortalezas.

Decís que sois cuatro personas con gustos más variados pero ¿en qué artistas o bandas coincidís los cuatro?
J: Creo que no hay ni uno en el que nos pongamos de acuerdo los cuatro
N: (Se ríe) No
J: Solía ser The Fall, cuando Russell todavía estaba en la banda pero ¿de verdad que no hay una banda que nos guste a los cuatro?
N: Deberíamos tener aquí a Candida y a Mark ahora, pero creo que Love nos gusta a todos, el “Forever Changes” es extraordinario. Así que voy a ir con ese como mi apuesta particular.
J: Sí, estoy de acuerdo con ese, pero, desde luego, no puedes decir que estemos especialmente influidos por ellos

No, pero es curioso, hace un par de años entrevisté a Belle & Sebastian y me dijeron que los únicos discos en los que todos los miembros se ponían de acuerdo era en “Forever Changes” y el debut de la Velvet Underground
N: A ver si fuéramos los Monkees, o algo así, y viviéramos todos juntos en la misma casa, posiblemente escucharíamos las mismas cosas.
J; Pero creo que es una cosa buena esa disparidad de influencias, ya que hablabas de “My Sex”, esa fue una de las que hicimos cuando teníamos alquilado tres días un local y yo tenía una secuencia de acordes y os los toqué y tú te pusiste a tocar ese especie de ritmo ligeramente hip hop y le quedaba perfecto. El hecho de que no hayamos tocado en tanto tiempo, bueno, que no hayamos escrito canciones juntos en tanto tiempo lo hizo nuevamente excitante.
No me estoy quejando pero Nick toca la batería bastante fuerte, es un hecho, algo de lo que me he dado cuenta trabajando con otros baterías “¿qué estás haciendo todavía puedo oírme?” (Nick estalla en carcajadas) Así que cuando la batería está alta tú tienes que salir con algo que también sea alto para que te escuchen y tengo que cantar de una manera particular para que se me escuche y eso sí que es una gran influencia cuando estás escribiendo canciones, afecta a todo lo demás. Así que creo que la música de Pulp es esa combinación de gente distinta intentando hacerse oír, tan sencillo como eso.

Por cierto en “Partial Eclipse” se escuchan ecos del Badalamenti de “Twin Peaks” y “Hymn Of The North” tiene unas cuerdas muy de película de James Bond de John Barry, supongo que sois fans, tú Jarvis ya apareciste en la saga de Harry Potter, ¿le gustaría a Pulp hacer una canción para una película de James Bond si se lo pidieran?
J: Oh, lo intentamos
N: Sí, nos pidieron que hiciéramos una canción.

¿Cuándo?
N: En 1998
J: Si, cuando estábamos grabando “This Is Hardcore”, se llamaba “Tomorrow Never Lies”, aunque en un principio era “Tomorrow Never Dies”, que creo que era el título de la película, y se lo pidieron a varios artistas. El caso es que, como es conocido, “This Is Hardcore” nos llevó mucho tiempo, lo que no ayudó mucho, pero esa canción la hicimos en un momento, porque nos llamaron y nos dijeron que la necesitaban para el día siguiente o algo así.
N: Sí, creo que era miércoles y nos la pidieron para el viernes, era una locura
J: Pero el caso es que a todos nos gustaba John Barry, mira ése es otro nombre que nos une… Así que sí, nos gustaba Barry y las bandas sonoras de Bond así que nos pusimos a ello y estuvo bien.
N: Sí, fue excitante hacer una canción en tan poco tiempo, porque llevábamos tanto tiempo atascados en “Hardcore” que fue un poco un alivio. Teníamos la mañana para escribir la canción y la tarde para grabarla, ¡y lo conseguimos! Y creo que así es cómo se debería hacer la música, de manera inmediata, escribirla por la mañana, grabarla por la tarde, mezclarla por la noche y listo…
J; Rechazada de madrugada (Risas)

¿Qué canción fue la elegida?
J: La de Sheryl Crow.
N: En YouTube puedes ver que alguien ha hecho el montaje de los títulos de crédito de la película con nuestra canción.
J: ¿No me digas?
N: Lo he visto hace nada (risas)

“Hymn Of The North” me ha parecido una de las mejores canciones del disco, es una de las baladas más bonitas de vuestra carrera y creo que está dirigida a tu hijo, Jarvis…
J: Se va a terminar cabreando conmigo si sigo hablando de ello.

¿Es importante para ti que tenga esas raíces del Norte de Inglaterra? ¿Que sepa de dónde viene?
J: Sí, la verdad es que es algo que me pregunto si lo sabe, creo que sí, que se interesa por Sheffield y le gusta hablar con Richard Hawley.
N: Eso vale (risas) Que le cuente todas las historias
J: No, pero, en serio, me gusta que conozca a gente del norte, yo me crié allí y es parte de mi ADN, aunque realmente él ha crecido en París. Es curioso que lo hayas sacado a colación porque esta misma mañana se ha mudado a Londres, aunque no sé si decidirá vivir en Inglaterra, le gusta moverse mucho, solía venir a quedarse conmigo cuando hacía el programa de radio y se quedaba conmigo los fines de semana, pero realmente no ha pasado mucho tiempo en el norte, aunque el norte tal y como yo lo recuerdo ya no existe.
N: Desde luego ha cambiado mucho, Gran Bretaña se ha homogenizado mucho, las diferencias ya no son tantas.
J: Pero sobre lo que decías, la verdad es que habla con un poco de acento norteño, lo que tampoco es tan extraño dado que ha aprendido inglés de mí…

“Este disco surgió cuando tocamos una canción nueva y la gente no salió corriendo, ni se fue al bar a pedir algo”

La última canción está compuesta, precisamente, junto a Richard Hawley pero me ha parecido una letra muy significativa sobre el mundo en el que vivimos, es solo un amanecer, pero ahora han encontrado una manera de hacerlo rentable (“But now they’ve found a way to make it pay”), la primera regla de la Economía, la gente infeliz gasta más (“The first rule of Economics? Unhappy people they spend more”) visto así nuestros gobernantes están haciendo un gran trabajo a favor de la economía, ¿no?
(Risas) J: Sin duda, no hay un mensaje en este disco, pero podría ser este, en vez de gastar para tratar de evadirte de la infelicidad haz algo, crea algo.

Ahora todo gira en torno al consumismo y si lo único que haces es consumir en vez de conseguir cosas para hacer otras por ti mismo te conviertes en una pieza más del engranaje.
N: Evidentemente el capitalismo está hecho para convertir a la gente en consumidores que sigan comprando cosas, nos ven más como consumidores que como personas humanas.

Nunca habéis sido una banda política per se, pero tenéis canciones como “Cocaine Socialism” o Jarvis en solitario ha sacado temas como “(Cunts Are Still) Running the World”, ¿cómo os sentís viendo cosas como el vídeo de Donald Trump creado por Inteligencia Artificial en el que convierte Gaza en un resort de lujo para ricos, con estatuas doradas suyas y Elon Musk arrojando billetes a los niños? ¿Qué opinión os merecen los actuales líderes del mundo? gente como los propios Trump y Musk, además de Netanyahu o Putin.
J: Pero creo que es importante saber que también hay una importante oposición a todo eso, no tiene porqué ser el futuro, yo espero que quizás la Inteligencia Artificial haga que la gente se dé cuenta que no todo lo que ve en su ordenador, su televisión o su móvil es real, y que eso haga que la gente aprecie la realidad más, esa sería una buena resistencia. Porque la manipulación que va a traer la Inteligencia Artificial va a hacer que todo lo digital resulte sospechoso.
N: Y hablando de experiencias reales pocas pueden superar a la ir a ver en directo a una banda. Seis personas tocando instrumentos y cantando delante de ti.

Sí, pero a hasta esa experiencia ahora también se ve a través de la cámara del móvil, con muchísima gente grabando en vez de atendiendo a lo que está ocurriendo delante de ellos.
N: ¿Por qué hace eso la gente? No vas a volver a ver ese vídeo en tu vida, siente el momento y las emociones de ese instante y olvídate del móvil.
J: Pero, hasta si están con el teléfono, es una sala llena de gente mirando una misma cosa y viéndose afectados por ella, no es como ir a un restaurante y ver a 10 personas sentadas en una mesa cada uno de ellos mirando una cosa distinta en su móvil. Las bandas todavía nos pueden salvar… No lo sé, pero por lo menos sigue siendo una experiencia comunal, algo que es importante para los que están allí.

Una de las decisiones que habéis tomado para este disco es contar con un productor de renombre como James Ford, conocido por su trabajo con bandas como Blur o Arctic Monkeys, ¿por qué os decidisteis por él? ¿Y qué le ha aportado al álbum?
J: La razón inicial fue porque Emma y Andrew, que tocan con nosotros, están en una banda con él, así que fue fácil ponerse en contacto y le gustó la idea, así que estuvo bien. Lo que ha aportado, pues fue una presencia permanente, no discutíamos porque él estaba a cargo. Es un tipo muy amable, el estudio en que grabamos no era muy elegante. Recuerdo que una mañana hubo un problema técnico pero por la tarde ya estaba arreglado y logró encontrar un buen sonido muy rápido. Fue muy fácil grabar con él y, lo que es más raro, fue realmente divertido.
N: Sí, además queríamos grabar este disco rápido, casi volviendo a esa idea de la que hemos hablado antes de “Tomorrow Never Lies” de que la música tiene que ser inmediata. Y él es muy bueno en eso, no dándole muchas vueltas a todo, eso ha sonado bien, vayamos con la siguiente. Una vez que se consigue ese momentum, es fácil grabar, creo que grabamos las pistas básicas para las once canciones en 10 días. Eso, para los tiempos que corren, es ir muy, muy deprisa. Para nosotros, si hacemos caso a nuestra historia, eso también es ir muy rápido. Y eso realmente es algo por lo que estamos muy agradecidos. Y no creo que haya sido porque nos hayamos saltado un mínimo de control de calidad, porque el disco suena fenomenal.
J: Además cuando hicimos las bases y tuve que grabar las voces, también se hizo muy rápido, igual que la mezcla. Es la primera vez que nos damos cuenta que grabar un disco puede ser así de fácil.

Entrevisté la semana pasada a Black Country New Road, que también les ha producido el disco James Ford ¿qué opináis de la nueva camada de bandas del Reino Unido e Irlanda, grupos como los nombrados, Fontaines DC, Squid, Black Midi, etc…?
J: Nos parece genial que sigan saliendo bandas, porque es un hecho cada vez más raro. Cuando nosotros éramos jóvenes todo el mundo parecía estar en una banda, quizás más gente debería haberse dedicado a otra cosa (risas)
N: La verdad es que cada vez es más raro, así que me gusta que todavía salgan algunas bandas por aquí, aunque también he de reconocer que no soy un gran descubierto de música nueva, pero la mezcla de gente distinta en una habitación siempre va a traer algo de magia, en cambio un chaval en su habitación con un ordenador o una guitarra no necesariamente va a conseguir esa magia.
J: Creo que esa nueva escena puede que sea una de las razones por las que mi hijo se ha mudado a Londres con su banda, gracias a él se que hay una nueva escena alternativa de bandas en Londres, que se conocen entre todos y se organizan entre ellos, está bien, es como que tengan su propia cosa bajo el radar.

Por cierto, he oído que el disco sale en junio, ¿tenéis pensado anunciarlo antes y sacar algún adelanto o saldrá en plan sorpresa y sin previo aviso, en plan Beyoncé?
J: No sé si estoy autorizado a decirlo, pero creo que lo vamos a desvelar la semana que viene.

Por fin vais a sacar un disco con Rough Trade, de su enorme catálogo ¿qué disco o banda es vuestro favorito?
J: ¿De Rough Trade? Pues echando la vista muy atrás, uno de mis sencillos favoritos de todos los tiempos “Nag, Nag, Nag” de Cabaret Voltaire salió en Rough Trade. Así más reciente, me gusta ese disco de Parquet Courts que tiene esa canción que me gustaba ¿Cómo se llamaba? “Marathon Of Anger” (el disco es “Sympathy For Life” de 2021)(NdR)
N: Yo iba a decir ese que llevas (se refiere a una chapa con el “The Queen Is Dead” de los Smiths que llevo en la chaqueta)(Ndr) Los Smiths son, claramente, la banda Rough Trade, siguen sonando frescos y nuevos a día de hoy.

Pero mejor no hablamos de Morrissey, ¿no?
J: No pienso meterme ahí (risas)

De entre todas las bandas que os gustan ¿cuál dirías que ha tenido el mejor regreso posible y cuál creéis que nunca debería haber vuelto a juntarse, si hay alguna?
J: Uf, bastante complicada
N: Pregunta muy difícil
J: A ver antes has mencionado a los Cure y creo que esa fue buena, sin haber escuchado todo el disco, me encanta que en la primera canción que sacaron había como cinco minutos de música antes de que empezara a cantar.

No, ninguna de las canciones era “Friday, I’m In Love” o “Just Like Heaven”
N: Yo les fui a ver en su última gira, en Leeds, y hubo un montón de música muy pesada y muy intensa. Les vi la primera vez en 1980 y siempre creo saber qué pasa con esta banda, pero la última vez fue muy intensa, creo que tocaron varias del nuevo disco que mucha gente todavía no había escuchado. Es evidente que sabe mantener su posición.
J: Sí y además me gusta que hayan peleado por el precio de las entradas, que verles no sea una cosa especialmente cara. Está muy bien, es evidente que no son una de esas bandas que se han juntado únicamente por dinero, hay otras razones para ello y eso está bien. Una de las cosas que más me admira de Leonard Cohen y de David Bowie es que los dos hicieron un gran disco justo antes de morirse, que decidieran dedicar algo de un tiempo que se acababa a hacer eso también me parece muy loable. Creo que en eso consiste la creatividad, tiene que haber algo más que “por favor, dame la pasta” (Risas)

Por cierto, ¿tenéis algún tipo de postura sobre el regreso de Oasis y los ríos de tinta que ha hecho correr? Y, por cierto, ¿guardáis algún tipo de relación con los Gallagher o algunas de las otras bandas con las que compartisteis escenarios y demás a mediados de los 90?
J: A mí me gustaría ver a Oasis en directo ¿y a ti Nick?
N: A mí no tanto, me parece que ha habido demasiado griterío en torno a ello y creo que va a ser algo un poco decepcionante. Pero sí, en los 90 sí que tuvimos cierta relación con ellos. Pero el otro día estuve pensando que cuando Pulp comenzó a ir por el buen camino éramos un poco extraños, un poco forasteros, y entonces aparecieron Oasis y se llevaron todos los focos, y realmente no éramos tan parecidos, ellos eran un poco como abusones del norte y era un poco raro que nos relacionaran con ellos, pero bueno, desde luego consiguieron impactar a un montón de gente. Y ahora vuelven a dar unos conciertos.
J: La primera vez que los conocí, ¿te acuerdas Nick de la vez que tocamos en San Francisco?
N: Claro
J: Nosotros íbamos de teloneros de Blur y Oasis tocaba también en un club de la ciudad. Si alguien hubiera tirado una bomba en San Francisco ese día no hubiera existido el Britpop (Risas). El caso es que queríamos ir a verlos porque habíamos oído hablar ya mucho de ellos, así que dijimos ¿podemos ir? Y nos dijeron de acuerdo, pero Jarvis tiene que venir primero a nuestro autobús de gira (Nick se muere de risa recordándolo) Total que fui y llamé a la puerta y estuve hablando con Noel, no creo que Liam estuviera por allí, pero obviamente pasé la audición (risas) porque nos dejaron ir al concierto. Y en cierta manera respeto todo eso.
N: Y fue un concierto increíble
J: Con Oasis pasa un poco lo que te decía antes de los Stone Roses, son una cosa muy del norte, hace que la gente del norte diga esto es nuestro y es increíble. Así que yo sí que iré a verles, puede que sea maravilloso. Ya sabes la tensión entre Noel y Liam es la cosa que los hacía buenos, creo. Mientras no se salga de madre estará bien (risas)
N: Si consiguen sobrevivir al primer concierto estará bien.
J: Seguro que esa es una de las cosas a las que todo el mundo va a estar atento, será muy interesante.

“Ver una banda en directo es una de las pocas experiencias reales y comunales que nos quedan”

“Different Class” salió justo hace 30 años, en el pico del Britpop, y os convirtió en estrellas, pero luego con “This Is Hardcore” reaccionasteis contra ese éxito y fue algo así como la estaca definitiva en aquel movimiento, si echáis la vista atrás ¿qué os lo que rescataríais de todo aquello y que es lo que le echáis en cara? ¿Sois de los que pensáis que, en cierta manera, la reacción política al Britpop, las Union Jacks y demás son la semilla que llevó al Bexit?
J: Puede ser perfectamente, de primeras nosotros siempre odiamos ese nombre y los aspectos nacionalistas que acarreaba, porque eran horribles. Me sorprendió gratamente recordando sobre todo esto, que un tipo llamado Daniel Rachel escribió un libro sobre el Britpop. Creo que lo quería llamar “Cool Britannia” y le dije no pienso hablar contigo si lo llamas así (risas). Creo que al final se terminó llamado “Don’t Look Back In Anger” o algo así (*NdR: De hecho se terminó llamando “Don’t Look Back In Anger: The rise and fall of Cool Britannia”). El caso es que hablé con él y le conté que mi momento personal más bajo en todo aquello fue cuando hice una entreviste con GQ y cuando salió me pusieron en portada con unas enormes letras GQ llenas de Union Jacks, y es que me puso enfermo que me pusieran al lado de la bandera.
El caso es que me pidió que hiciera una introducción para el libro y recordé con fuerza ese momento y lo mal que me sentó, pero también escribí sobre lo que me pareció bueno de todo aquello que fue que un montón de gente muy diversa y de bandas del underground lo consiguieran. Pero, al final, el Brexit ha sido una cosa tan horrible que cuesta mirar al Britpop de una manera positiva, pero sí que hubo cosas positivas, gente en los márgenes convirtiéndose en el centro de atención, además con ideas más progresistas, con lo que muchos pensamos que podría ser un cambio positivo, que podíamos hacer una Inglaterra más tolerante, más inclusiva y más divertida. Durante un breve periodo de tiempo fue un sueño muy bonito.
N: Por un tiempo fue así, pero luego metieron a mucha gente en este concepto y todo se diluyó. Además para una banda es muy difícil que la encajonen en un movimiento o un estilo. Y los periodistas siempre habían intentado encajonarnos antes pero nunca había funcionado hasta todo aquello del Britpop. Era un poco de risa porque terminamos en el mismo cajón que esos tipos duros de Manchester, etcétera. Pero ya sabes, una fiesta de una única persona no es una verdadera fiesta.

¿Y por qué creéis que Pulp no consiguió romper en el mercado de EEUU?
J: Porque no lo intentamos. Esa gira que hicimos con Blur fue nuestra única ocasión por allí, y no nos pagaban mucho dinero. Además íbamos todos los de la banda y el resto del equipo en el autobús de gira, teníamos 40 minutos después de cada actuación para tomarnos algo y luego tenías que empaquetar tus cosas, coger el autobús e irte al siguiente sitio, a veces durante tres días, sin mucho más que hacer que mirar por la ventana sin que el paisaje cambie.
Siempre había tenido la idea de que estar de gira en un autobús era muy divertido, en plan los viajes del colegio o esos psicodélicos de los 60. Pero la realidad era que la gente se ponía a ver golf o lo que fuera todo el puto tiempo (Risas) Y luego te ibas a dormir en una especie de ataúd, como un vampiro, con la gente tirándose pedos a tu lado (más risas) Una cosa horrible, los conciertos estaban bien, pero los desplazamientos eran horribles. Te tirabas un día en la carretera para llegar a Nueva Orleans y que luego solo fueran 10 personas al concierto y te preguntabas ¿por qué estamos haciendo esto?
N: Sí y también tocamos en un festival en San Luis y pensábamos genial, vamos a tocar en un festival con montones de gente, así que nos podremos ganar a unos cuantos. Pero cuando vamos a tocar hacía un calor increíble, debíamos estar a 43 grados de temperatura y encima nuestro escenario estaba en un sitio por el que la gente pasaba para ir a los escenarios principales y los pocos estadounidenses que había allí estaban todos vestidos igual y no nos hacían caso.
J: Y ¿te acuerdas de ese otro donde había un halfpipe para skaters?
N: Sí, creo que eso fue en Boston. Pero el caso es que aquello no tenía mucho sentido.
J: Me acuerdo de lo de Boston porque estaba en el escenario y me preguntaba ¿por qué nadie me está mirando? Y terminé mirando hacia donde miraba todo el mundo y había gente saltando con monopatines. No había ninguna razón para estar allí. Eso sí, la gira que hemos hecho por allí este pasado otoño ha sido una experiencia totalmente distinta
N: Sí, ha sido fantástica
J: Así que creo que volveremos por allí, si no nos prohíben entrar. Pero en aquel momento no estábamos preparados. Además también estaba lo que nos decía nuestro amigo Richard Hawley que había ido con su banda The Longpips durante 9 meses y casi se vuelven locos.
N: En realidad se volvieron locos
J: Y, por si fuera poco, cuando volvieron los de su sello les despidieron

Siempre se ha comentado el parecido entre “Gloria” de Umberto Tozzi y “Disco 2000”…
J: ¿No vas a hacer que nos ganemos una demanda a estas alturas? (Risas)

No, no, pero esto es realmente una curiosidad de la que solo he tenido noticia porque en The Guardian en 2012 hablando de música española, hablaban de Mecano, que es uno de los grupos más exitosos en nuestro país, y decían lo siguiente “Entre la legión de bandas españolas y latinoamericanas a las que inspiraron también está Pulp, cuyo “Common People” suena sospechosamente parecida a “Los Amantes”” ¿Habéis escuchado alguna vez a Mecano o la canción “Los Amantes”?
J: Creo que sí en realidad, fue gracias a Mark Radcliffe
N: Sí, pero esto fue después de haberla sacado
J: Eso es y te puedo asegurar mirándote directamente a los ojos que no había escuchado esa canción cuando compuse “Common People” (Risas) Solo fue una vez que se convirtió en un éxito, pero es verdad que cuando la escuché posteriormente pude oír las similitudes.

Sí, luego van por otros caminos pero la melodía del riff de teclado que abre “Los Amantes” es la primera estrofa
J: Incluso el sonido del teclado suena parecido, puede que lo hicieran con el mismo Casio con el que la hice yo
N: Pero vamos hay muchísimas canciones que recuerdan a otras…

Y, para terminar, vais a tocar en el Hollywood Bowl junto a LCD Soundsystem, una de las grandes bandas de este Siglo XXI, poniendo que llevamos ya un cuarto del mismo, ¿cuáles dirías vosotros que son los discos fundamentales de lo que llevamos del mismo?
J: ¿De este siglo?
N: Ni la menor idea, creo que lo mejor sería preguntar a alguien joven y no a dos señores mayores como nosotros, porque creo que la música debe estar dirigida más al gente joven. Yo, en cuanto a música actual, me fío de lo que le gusta a mi hija. Cuando vamos en el coche y me gusta una canción le preguntó por el nombre del artista y el disco, en cuanto le gusta algo a ella intentó investigar un poco más sobre ello.
J: La última vez que estuve medianamente al día fue cuando tenía el programa de radio, porque me enviaban bastantes CDs, aunque si te soy sincero, la mayoría han terminado en la basura en cuanto he hecho limpieza (Risas). La verdad es que cuando me puse con la radio pensé voy a escuchar de todo pero luego vi el saco gigantesco de discos que me enviaban y dije esto va a ser imposible si quiero seguir teniendo una vida. Creo que leí hace poco que ahora sale más música en un día que la que se editaba en 1957 en todo el año. Así que es muy difícil, aunque también pueda parecer que no queremos responder a tu pregunta (risas). Pero, por ejemplo, guardo muy buen recuerdo del disco de Dean Blunt, “Black Metal”, que estaba muy bien presentado (*NdR: Otro disco de Rough Trade). Al final era una manera con muy poco criterio para seleccionar las cosas que metía en el programa, me fijaba en las portadas o en los títulos de las canciones. Ese suele ser un buen método para seleccionar, si ves cosas como Rust o Live, tiendes a ponerte en alerta (risas)

No eres muy fan de Neil Young, supongo (Más risas)
J: No, no, sí que me gusta mucho Neil Young.
N: De todas formas hay que tener en cuenta que cuando nosotros comprábamos discos no había manera de escuchar las canciones antes de comprarte el disco, porque había como mucho un programa de radio que te pusiera a las bandas interesantes y, como mucho, escuchabas una canción. Así que cuando ibas a la tienda de discos te fijabas mucho más en las portadas de los discos, cogías uno y decías este parece interesante y pensabas pues tiene que sonar bien.
Es curioso que digas eso porque cuando yo tenía 15 años me compré precisamente el “Forever Changes” de Love porque me gustó mucho la portada
N: ¡Ahí lo tienes!
J: También me he comprado una gran cantidad de malos discos de esa forma (Risas)

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.