“Empecé como Dj de hip-hop, pero siempre me había encantado el soul. Crecí dando paseos en coche con mi padre escuchando a Isaac Hayes y Curtis Mayfield, pero pensaba que estas canciones iban a ser sólo para mí, para cantarlas en la ducha y poco más”. Genio y figura, Mayer Hawthorne nos cuenta en tono divertido y desde la humildad como no esperaba que su primer álbum “A Strange Arrangement” fuera a ser capaz de colocar el northern-soul en primera plana consiguiendo la aceptación del público y el ensalzamiento de la crítica: “Uno de los grandes del 2009” (Gilles Peterson), “El mejor álbum del año es para… Mayer Hawthorne” (John Mayer), y un larguísimo etcétera. Todavía entre nubes, Mayer nos explica como “en Stones Throw escucharon mis canciones y en menos de lo que podía imaginar ya estaba publicando un disco, realmente no esperaba todo esto. Para mí ha sido un verdadero shock y la verdad es que todavía lo estoy asimilando”. Sobrado de elegancia y capacidad, instrumenta él mismo todo el disco de principio a fin “es un modo de autosuperación, ¿por qué voy a querer que lo hagan otros si soy capaz de hacerlo yo? Es importante ponerse metas e intentar cumplirlas, es un modo de crecer. Además, este disco al fin y al cabo es un disco indie, y mi discográfica también, así que cuantos más medios nos ahorrásemos mucho mejor”. Talentoso como pocos, Mayer piensa no obstante que “el talento es importante, desde luego, pero igual o más importante es ser creativo, no me considero excesivamente virtuoso cantando ni tocando los instrumentos, pero sí que tengo capacidad creativa para dejar que fluyan libremente las ideas. Supongo que esa es la clave”. Embarcado en una gira mundial que le va a llevar por Europa, Estados Unidos y Australia, Mayer nos habla acerca de cómo es para él el público europeo. “Me encanta, es gente con la mente muy abierta a nuevas ideas. Tienen opinión crítica, nadie copia lo que dicen los demás sino que están acostumbrados a pensar por ellos mismos”.
Con la aparición de Mayer, unida al fenómeno Amy Winehouse y el éxito de otros artistas como Eli “Paperboy” Reed o Black Joe Lewis, parece inevitable pensar en un cierto resurgimento del soul, pero a nuestro hombre no le gusta nada que se hable de revival. “No me gusta que se etiquete a determinados artistas como divas y divos del soul sin tener en cuenta el profundo reconocimiento que merece todo lo anterior y que no se suele tener en cuenta”.
Consumidor compulsivo de la obra de gente como Curtis Mayfield, Martha And The Vandellas, The Notations, Four Tops, o Barry White, Hawthorne admite no obstante estar interesado en todo tipo de estilos y escuchar música de gente tan diferente de él como los franceses Phoenix. “Su último disco me encanta, últimamente estoy escuchando mucho rock. No estoy cerrado a nada, me gusta escuchar todo tipo de música, te abre horizontes y te da nuevas posibilidades con las que poder enriquecer tu estilo”. Quizá algo de toda esas influencias musicales se puedan observar en su siguiente disco, del que el artista nos dio un ligero adelanto acerca de lo que podremos encontrar en él. “Quiero abrir nuevos caminos respecto a mi debut, no deseo estancarme en una manera de hacer las cosas y que se me encasille de un modo determinado. Para mi siguiente disco me gustaría apostar por otros sonidos como el Boggie-funk”. Sólo tres días después de esta entrevista, Mayer Hawthorne pisaba por primera vez España, concretamente Barcelona, donde hizo temblar los cimientos de la sala Apolo y dejó una sonrisa eterna en el rostro de los asistentes merced a un concierto más que memorable, certificando de sobras todo lo bueno que se había escrito sobre él. Esperamos impacientes su nueva gira española para este mes de mayo, que pasará por Barcelona (viernes 14; Bikini), Heineken (sábado 15; Heineken) y Bilbao (domingo 16; Kafe Antzokia). Dani
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