Pray for Haiti

Hace años que Mach-Hommy ya venía avisando que estaba preparado para sacarse de la manga un bastión discográfico impepinable de la liturgia hip hop. De hecho, para quien no haya escuchado “Haitian Body Odor” (2016), avisar que se trata de uno de los discos más tristemente infravalorados de la pasada década. Sin embargo, es ahora cuando ha llegado el momento más ansiado. Uno marcado por la peculiaridad que define los rasgos estilísticos de sus orígenes haitianos, que despliega a lo largo de una arcadia plural de flows, destilada con savoir affaire, potenciada por los contornos instrumentales de francotirador dispuestos por un Westside Gunn que se convierte en mano derecha, también en lo vocal, y abanderado del fastuoso plantel de colaboraciones procedentes del interesantísimo sello discográfico Griselda Records.

Con el minimalismo como forma de expresión absoluta, Mach-Hommy ha edificado una obra maestra que devuelve esperanzas al mundo hip hop ajeno a la infección trap de nuestros días. No hay más que dejarse seducir por la arcadia cósmica de jazz retrofuturista que hila las progresiones de “Folie Á Deux”; seguramente, la pieza hip hop más rutilante que haya salido a la luz en estos últimos años.

Pero hay más, muchísimo más. De hecho, no hay un solo beat, base o ad-lib que sobre en estas dieciséis canciones horneadas en los fogones más ardientes de la inspiración. Y esto lo consigue desde dos extremos referenciales tan reveladores como MF Doom y Dj Madlib; en su momento, cabezas pensantes de los fabulosos Madvillian. Partiendo de estos paralelismos, brotan gemas tan relucientes como la aterciopelada y humeante “The Stellar Ray Theory”.

Entre la imaginación rítmica de J Dilla, en modo plano detalle, y la exuberancia de los juegos de palabras, preñados de dicción criolla, Mach-Hommy ha estructurado un desfile de significantes reconocibles, ideales para rubricar con personalidad intransferible un LP destinado a sumar más adeptos a la causa anti-maximalista de las producciones que rigen los modismos del hip hop actual. Y, aún por encima, con la saca repleta de canciones memorables. ¿Se puede pedir más?