El Espejo

Aunque en su momento formase parte de algún proyecto previo como Kebrantas, lo cierto es que el debut en solitario (y en firme) de David López se ha hecho esperar. Sobre todo si tenemos en cuenta que el firmante lleva décadas ligado al mundo de la música, primero ejerciendo como A&R de RCA allá por los noventa y, a continuación y hasta hoy, al frente del sello Limbo Starr. En cualquier caso, es ahora cuando el madrileño decide dar un paso al frente y mostrar explícitamente su faceta como músico, en una aventura bautizada como Da Loma.

El resultado es un álbum de diez canciones, que tiene en su coherencia y la fuerza del sentido conjunto algunos de sus principales activos. La férrea instrumentación ampara y al mismo tiempo sirve de nexo común entre las diferentes piezas que conforman la referencia, mientras que (por méritos propios) las propias historias contenidas en las canciones resultan erguidas como protagonistas principales. Es ahí donde el autor se despacha a gusto y muestra su auténtica personalidad creativa, situándose de paso cerca de referentes patrios con peso propio como Abraham Boba, Julio de la Rosa, Santi Campos u Ornamento y Delito, algunos de ellos pertenecientes en algún u otro momento a la escudería Limbo Starr. David López ha esperado pacientemente para publicar estas canciones, y con la decisión tomada apuesta por revelarlas con una honestidad que da como resultado dardos ásperos, afilados y directos en su contenido. Y es que un poso punk (o post-punk) con preferencias ochenteras tiende a aparecer en el fondo de la presente referencia, completando el cupo de esos elementos claves en el aspecto final del elepé.

Es ahí donde destacan cortes como “El amor, la fuerza”, “Del revés”, “T.A.M”, “En el festival”, “De Madrid al suelo” o el propio “El Espejo” que abre y da título al disco, todos ellos bien posicionados y sumando en positivo a la hora de conformar el producto final. "El Espejo" (Limbo Starr, 19) es, en definitiva, una obra de narrativa actual con la que el músico expresa sin tapujos vivencias, motivadores y opiniones personales que tienen la propiedad de motivar cierta empatía. O dicho de otro modo: son capaces de generar, precisamente, cierto reflejo en el receptor final.