Ganas había ya de ver a The Killers en Barcelona tras la suspensión de una fecha prevista para la pasada primavera en la ciudad condal. Más que nada para comprobar in situ el valor de un flojo disco, “Hot Fuss”, que les ha convertido en estrellas mundiales y les ha aupado al carro de las nuevas bandas empeñadas en reverdecer la grandeza de la nueva ola ochentera. Y bien, a pesar de que The Killers en directo, funcionan mejor de lo que uno espera (la verdad sea dicha), su discurso sigue siendo insuficiente. ¿El problema? Su falta de sangre sobre un escenario, los de Las Vegas estuvieron demasiado estáticos y distantes, y un repertorio muy pobre que solo consigue despegar cuando atacan sus dos notables singles, las celebradas “Somebody Told Me” y “Mr. Brightside”, y la muy Real Life (por mucho que ellos piensen que se parece a Duran Duran) “Smile Like You Mean It”. El resto de su cancionero va de lo discreto a lo realmente bochornoso. Sirva de muestra para esto último, ese delirio glam-gospel que es “All These Things That I´ve Done " con el que cierran todos sus conciertos, una canción que debería sonrojar hasta al fan más despitado. De risa.
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