Tras descubrir que, en “Yes”, su nuevo disco, Pet Shop Boys recuperaban parte de su creatividad en estudio llegó el momento de constatar sitambién sus conciertos mantendrían también la magia.
Ahora, una vez vividos los cien minutos de su nueva actuación en Barcelona, podemos subrayar que así es. Neil Tennant y Chris Lowe, acompañados por tres bailarinas y un bailarín, protagonizaron el que posiblemente sea su mejor concierto en la Ciudad Condal en años. ¿Cómo lo consiguieron? En primer lugar gracias a una escenografía en la que la imaginación suplía al presupuesto (infinidad de cajas de cartón blancas de tamaños distintos que unos operarios movían aquí y allí por el escenario).
En segundo, gracias a un repertorio de éxitos que únicamente decayó durante los diez minutos en los que Tennant se enfundó un traje de noche. Sonaron desde “Heart” hasta “Suburbia”, pasando por “Love Comes Quickly”, “Always On My Mind”, “Left To My Own Devices”, “Suburbia” o“It’s A Sin”, y acercándose a su repertorio reciente con “Love etc”,“Pandemonium” o “Did You See Me Coming?”. A modo de curiosidad, los británicos combinaron su “Domino's Dancing” con una versión más bien anecdótica y muy a su estilo del “Viva La Vida” de Coldplay. Entre los mejores momentos, el muro derribado en “Go West”, y el acertado bis con “Being Boring” y “West End Girls”.
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