Artés es una pequeña población situada a unos trece kilómetros de Manresa rodeada de montañas y bosque. Un remanso de tranquilidad y paz en el que el productor David Rossell tiene, desde hace un año, un estudio situado en una de las casas del pueblo. Pues bien, hasta allí me desplacé invitado por la banda para escuchar en exclusiva para un medio de ámbito estatal “Som riu”, un segundo trabajo en el que tienen depositadas muchas esperanzas, tal y como me comenta el propio Marcel Lázara 'Tito' (cantante y guitarra): “Las expectativas con este segundo disco son dos. Por una lado consolidarse aquí en casa, donde la gente se enganchó mucho con un primer disco que han acogido con mucha estima, y por otro lado darlo a conocer por Europa y España. A ver si somos capaces de transmitir las mismas sensaciones fuera que las que hemos logrado en Catalunya”.
Para lograr ese doble objetivo han construido un álbum que, por lo escuchado en el estudio, mantiene las coordenadas sonoras de su anterior, es decir: la frescura caribeña del tumbao, el reggae o incluso el merengue, combinado con el aroma mediterráneo inoculado en el ADN de la banda. Sin embargo la novedad del álbum reside en una lírica muy trabajada, de fuerte contenido poético y que, como me comenta el propio Alguer Miquel (cantante), tiene en la esperanza y el ciclo de la vida representado por el agua, su fuente de inspiración. “El nuevo disco “Som riu” , en castellano “Somos río”, nace de esa idea de colectividad por la cuál muchas gotas unidas pueden formar un río que, puesto en acción, representa el agua como motor de vida, motor de cambio. Y sobre todo en este disco hemos puesto mucha esperanza. Esperanza en las canciones; esperanza en cambios sociales; esperanza en el futuro y en que las cosas vayan un poco mejor. Todo el disco es un poco cantar a esa esperanza, pero no a una esperanza pasiva a la espera de que las cosas cambien, sino a una esperanza activa que signifique movernos para cambiar las cosas”.
Toda una declaración de intenciones que se ve reflejada en canciones como la propia “L’esperança”, “Músic de carrer” o un gema tan dulce como “Compta amb mi” que se erige en una especie de himno a la fidelidad y al espíritu de solidaridad que debe lograr que esos cambios sociales de los que hablábamos lleguen a buen puerto. Evidentemente tampoco podía faltar una buena ”rumbeta” que viene de la mano de un tema como “El meu poble” que, además, sirve como homenaje a esas plazas de pueblo que se convierten en punto de encuentro de la gente dispuesta a pasárselo en grande.
Otros temas a destacar del disco son: “Governant”, en el que se muestra el descontento con los políticos en general y que como me apunta el propio Alguer nos recuerda que “en ocasiones la memoria histórica más reciente, es la que primero se olvida”; “Batega” con un aroma a reggae muy reposado en el que muestran su faceta más poética; “Camp de batalla” con una gran letra que nos recuerda que debes empezar a soñar si quieres encontrar aquello con lo que sueñas; “Dues gotes” con cierto toque ska más dinámico inflamado por los vientos, otra de las identidades de su sonido, y un curioso hammond que le da una textura diferente y que nos recuerda a todos que somos como dos gotas de agua cuya energía las empuja a unirse irremediablemente. Y, tras catorce temas, finalizamos la escucha con un “No t’adormis” que sirve de despedida simbolizada con ese río que llega a desembocar al mar, y que se convierte en una arenga que nos anima a hacer la cosas ahora que aún estamos a tiempo. Una letra inspirada en unos bellos versos de Mario Benedetti, que es junto a Machado, uno de los poetas de cabecera de un Alguer que se le ve muy satisfecho con el resultado.
Y ya para a finalizar dejemos que sea el propio Sergi Carbonell 'Hipi', pianista de la banda, el que nos de las claves musicales de su nuevo trabajo: “En este disco podríamos decir que hemos puesto una marcha más. Hemos incorporado guitarra eléctricas que, por ejemplo en el primer disco no habíamos utilizado y en el directo utilizamos poco, y hemos explorado un poco este recurso. Intentar jugar y experimentar con sonidos un poco más duros. También os vais a encontrar con temas que son más cañeros, con más ritmo. Si en el primero todo era muy tranquilito, en este hemos intentado llevar toda esa esencia del directo al nuevo disco y aunque tenemos muy presente que es un álbum para escuchar en casa, hemos buscado que tenga un poco más de “punch”. Esto incluye que el disco contenga diferentes paisajes, diferentes sonidos. El piano tiene bastante presencia a nivel armónico, aunque como decía las guitarras las hemos trabajado mucho más en este segundo disco”.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.