El 21 de julio, The 1975 actuaron en Kuala Lumpur (Malasia) en el Good Vibes Festival, dónde eran cabeza de cartel. Aún y así, la actuación no duró demasiado ya que el cantante Matthew Healy criticó las leyes homófobas del país y seguidamente besó al bajista de la banda Ross MacDonald. Tras el beso, Healy dijo al público "es jodidamente ridículo decirle a la gente lo que pueden hacer con eso y aquello”, señalando su ingle. “Si quereis invitarme aquí para hacer un espectáculo, podeis iros a la mierda. Me quedaré con vuestro dinero, podeis censurarme, pero he hecho esto antes y no sienta bien, y estoy jodido". A raíz de estos hechos, el Ministerio de Comunicaciones y Digital de Malasia canceló los dos días restantes del festival.
A principios de esta semana, el organizador del festival, Future Sound Asia, anunció que pretendían reclamar por daños económicos. Aún y así, la cifra de 2,6 millones de dólares no se reveló en ese momento. En una declaración a la revista Rolling Stone, el abogado de Future Sound Asia, David Matthew, confirmó que “el reclamo contra The 1975 es esencialmente por incumplimiento de contrato”. Continuó: “El representante del Sr. Healy aseguró categóricamente por escrito antes del espectáculo que el Sr. Healy y la presentación en vivo de The 1975 se iban a adherir a todas las pautas y regulaciones locales durante su presentación en Malasia. Desafortunadamente, la garantía fue ignorada”. Además, Rolling Stone también informó que varios músicos de Malasia que estaban programados para tocar en el festival están preparando una demanda colectiva contra el grupo británico por las pérdidas financieras resultantes de las fechas canceladas del festival.
Los días posteriores a los acontecimientos, algunos de los asistentes malasios y diversas personas queer del país, se quejaron a través de redes sociales como TikTok, y criticaron el comportamiento de Healy y la banda. Comentaron que la actitud con la que fue al festival y su complejo de salvador blanco no ayudaba en nada a la situación ni a la población del país. Un país, con una cultura y valores especialmente tradicionales y conservadores.
Por otra parte, también había aquellos que les echaron en cara la poca empatía que tuvieron respecto a sus fans de Malasia. Muchos habían comprado los abonos exclusivamente para verles a ellos, y decían que al grupo no le importó que los más perjudicados de esta situación fueran estos mismos fans que se quedaron sin disfrutar de su concierto. Sin embargo, algunos de sus fans no estuvieron de acuerdo con estas quejas y siguieron defendiendo a la banda.
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