¿Cómo ha sido la confección de este ‘Millennials’?
Eneko: Estuvimos durante dos años y medio trabajando el disco, y justo Pablo (voz y guitarra) se marchó a Madrid cuando ya estaba del todo enfocado. Primero estuvimos con la parte de guitarras y percusión sobre todo, y ya en la distancia, fuimos confeccionando con Pablo todo el repertorio de sintes. Lo grabamos en el estudio de grabación que tiene él allí, así que al menos nos salió gratis a los tres.
“Hay gente joven a la que le pilla una depresión solo por ver que a otros les va bien”
En vuestro anterior proyecto, Dreaming For A Day, utilizabais el inglés y ahora habéis dado un cambio al castellano, ¿qué os ha llevado a ello?
Eneko: Está claro que en castellano tenemos menos competencia, pero la decisión de cambiar de idioma ha sido porque nos apetecía más hacerlo así. Cada vez hay más bandas que hacen este cambio de forma muy natural.
¿Teníais claro que el álbum tenía que llamarse así o surgió tras tener toda la selección de canciones?
Javitxu: Nos costó más elegir el nombre del grupo que del disco.
Eneko: Fue sobre todo después de escribir las letras, pero antes de terminar la grabación del disco. Es cierto que el nombre tira bastante del hype que tiene el término en la actualidad, pero resume bastante bien lo que la gente se puede encontrar en él.
¿Qué hay de esa generación de los 80 y 90 en el álbum?
Javitxu: En cuanto a sonido el disco tira más hacia los 80, sobre todo por la cantidad de sintes que hay.
Eneko: Quizás las referencias de los 90 tienen que ver mucho con el estilo de bandas de pop-punk que hemos escuchado, pero no creemos que estemos dentro de ese rollo. Inconscientemente seguro que sale, pero no está buscado.
Al escuchar el disco, a veces parece que vuestra música suena a atemporal, como si fuese de otra época, ¿qué os hace lanzaros a ello, viendo que los gustos de los jóvenes a día de hoy van por otro lado?
Eneko: Por un lado está lo que buscamos y por otro lado lo que somos, creo que es una mezcla de ambos. Nos hemos fijado en sonido de bandas como The Wombats o Two Door Cinema Club, pero la referencia noventera californiana está ahí, claro. Tenemos referencias de los 90, pero también de 2010. Diría que el disco es atemporal porque abarca diferentes estilos de diferentes épocas.
Habéis dicho alguna vez que no os gustan las etiquetas, pero al escuchar el disco sí que veo que podría asociarse con un sonido bastante determinado, ¿no lo veis así?
Javitxu: Yo pienso que tiene un sonido indie-pop. La gente aquí entiende por indie el sonido de Izal, Vetusta Morla y Love of Lesbian pero cuando yo hablo de este estilo me vienen a la cabeza más Chvrches o The Wombats.
¿Qué es para vosotros el indie?
Eneko: Nosotros hemos hecho pop-punk puro antes, y para nosotros esto no se asemeja en nada a aquello que hacíamos. Cuando hablamos de indie podríamos decir que son esa oleada de grupos que surgen a partir de los 2000’s y que nosotros hemos cogido esa rama más discotequera. Nuestra música bebe de ese indie, no como idea sino como estilo de música, que junto a cantar en castellano puede suponer una novedad con respecto a lo que hay en el panorama musical. Igual Grises hacen algo como nosotros, o Dinero, pero estos últimos tiran más al rock…
Y si digo que me recordáis a bandas como la extinta NoWayOut o los pamploneses Virenque…
Javitxu: Pues sería un halago parecernos a NoWayOut porque me encanta, pero no creo que hagamos eso. Tú miras las notas de Chvrches y son Blink-182, y no dirías que Chvrches es pop-punk.
Eneko: Yo respeto a NoWayOut pero me parece que no tiene nada que ver.
En vuestro debut habláis de la nostalgia de la infancia y la adolescencia, pero sobre todo de las preocupaciones y problemas de las generaciones más jóvenes, ¿no creéis que a veces se magnifica demasiado ese sufrimiento de la juventud?
Javitxu: Las letras las compuse cuando acabé la carrera y estaba en una situación en la que no sabía muy bien qué hacer. Sí que pienso que ahora se ha puesto muy de moda los 80, y luego vendrá la reivindicación de los 90 y demás, y pienso que la gente siempre siente nostalgia de las épocas pasadas. Intento que todo lo que cuento en las letras sea lo más abierto posible. A lo mejor estoy hablando de la presión que tengo ahora intentando encontrar trabajo y otra persona lo entiende de otra manera.
Eneko: Para mí más importante que la letra es el cómo lo cuentas. Queríamos relatar un poco las cosas como las hubiéramos contado hace años.
“Al trap le doy dos años de vida como mucho. No a sus artistas, pero sí al género”
En una entrevista de promo afirmabais que “los jóvenes de hoy bailan sin estar contentos”, ¿por qué?
Eneko: Parece que es así. La juventud está un poco perdida. Cuando hablamos con gente, más joven que nosotros incluso, no saben muy bien qué hacer. Y diría que el mayor problema es que hacen cosas pero no saben por qué las están haciendo. Muchísimas personas hacen la carrera para tener algo, no para dedicarse a ello. Voy a conseguir un trabajo para ahorrar, y yo pienso, ahorrar para qué si no te vas a poder comprar una casa. Nuestra sensación es que vemos a mucha gente jodida por dentro que aparenta estar bien por fuera.
Os lo compro, pero también es una de las generaciones con más medios y oportunidades al alcance…
Eneko: Es eso, sí. Te diviertes y lo pasas bien, pero por dentro faltan muchas cosas. Y a la vez, al tener tantos medios y oportunidades, parece que estás un poco sobrepasado… Hay gente joven a la que le pilla una depresión solo por ver que a otros les va bien.
Os habéis lanzado al disco largo como estreno porque decís que no creéis en el formato EP, pero por poneros un ejemplo, bandas jóvenes como Carolina Durante se han hecho un hueco por medio de éste y parece que el mercado musical a día de hoy funciona sobre todo a base de píldoras.
Eneko: Sabemos que lo que mejor funciona son los singles, está claro. Nosotros queríamos sacar algo físico y pensábamos que el LP era el mejor formato.
Javitxu: A mí me gusta hacer discos pequeños. Con la anterior banda hicimos un disco de siete canciones y ‘Millennials’ es como un EP escondido que solo dura 30 minutos. Como carta de presentación nos parecía más atractivo o más serio.
Con el auge de la música urbana, la electrónica..., ¿no os ha picado el gusanillo de abrir el abanico de vuestras influencias?
Javitxu: A Eneko y a mí nos encanta la electrónica de los 80 y tenemos claro que en el siguiente trabajo nos gustaría tirar por ahí. En este disco quisimos mostrar un poco de ese deseo por medio de los sintes que hemos metido, pero una marcha más hubiese supuesto cambiar el trabajo por completo.
Ahora que parece que la Cultura con mayúsculas vuelve a estar de moda gracias a la política, aunque vaya a ser de forma efímera, ¿qué os gustaría encontraros en el gremio, sobre todo siendo una banda que pretende hacerse un hueco en el panorama musical?
Eneko: Yo veo demasiado enchufismo, que a veces te puede venir bien… Pero si nos fijamos ahora mismo en temas de festis y demás solo hay propuestas de trap e indie español. Yo al trap le doy dos años, hasta 2020 como mucho.
¿Por qué? Es un nicho de artistas bastante camaleónicos…
Eneko: No creo que la gente que lo hace vaya a desaparecer, pero sí el género como tal. Bueno, igual me equivoco…
Javitxu: Por lo menos es algo nuevo. Yo lo que echo de menos es el conocimiento que tiene la gente de otros géneros o estilos fuera del indie español. Hay demasiados festivales de indie y los pocos que se salen de ese estilo se tiran al rollo casposo de traer a grandes bandas de hace dos o tres décadas. Ahora mismo pones RockFM y escuchas siempre a Guns n’ Roses, ACDC y, como mucho, Foo Fighters. A la gente no le interesa el rock, no surgen bandas nuevas más allá de las leyendas.
Eneko: Sorprende que Berri Txarrak haya metido a 10.000 personas en el BEC de Bilbao mientras que Vetusta Morla está agotando 38.000 entradas en Madrid sin demasiado esfuerzo. Ahí ya ves qué es lo que le gusta a la gente.
¿Entonces qué futuro le veis a vuestra propuesta?
Javitxu: Yo creo que lo nuestro funciona en festivales. Para mí lo más importante de un disco es que se te quede la melodía y ‘Millennials’ es muy sencillo en eso. Si la letra es buena, pues mejor, pero la melodía lo es casi todo.
Eneko: Lo más difícil para nosotros ha sido hacerlo fácil.
¿Cómo tenéis planteado el directo, partiendo de la base de que tenéis mucho sonido electrónico y sólo sois tres componentes?
Eneko: Lanzaremos muchos sonidos ya que solo estamos batería, bajo y guitarra. Queremos mezclar ese sonido para que sea como una fiesta de electrónica con un deejay pinchando. No engañamos a nadie, es lo que hacemos y lo que nos gustaría transmitir.
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