"Cada cosa que nos ha ocurrido ha sido un regalo"
Entrevistas / Palace

"Cada cosa que nos ha ocurrido ha sido un regalo"

Beatriz H. Viloria — 18-10-2019
Fotografía — Archivo banda

En verano pasaron por el festival Madcool y en esta semana podemos comprobar cómo se mueven los británicos Palace en sala con las canciones de "Life After" (Fiction/Music As Usual, 19), su segundo álbum. El vocalista Leo Wyndham y el guitarrista Rupert Turner nos hablan sobre sus orígenes y sus nuevas canciones. Ayer actuaron en Madrid, pero todavía pasarán por Valencia (18 octubre, Loco Club) y Barcelona (19 octubre, Sidecar; Ciclo De Bolo).

Os conocéis desde adolescentes, ¿cómo surgió la banda?
(Leo) Acabamos el colegio y empezamos una banda, estábamos haciendo distintas cosas, Rupert era el único músico. Empezamos la banda para pasarlo bien por las tardes. Matt, Rupert y yo nos juntábamos una vez a la semana en un sótano de Camden. Teníamos dos canciones, pillábamos unas cervezas y nos poníamos a tocar. Nunca planeamos ser una banda profesional, pero colgamos un tema en Internet y atrajo mucha atención, lo cual nos pareció muy raro, porque empezó como un hobby y, de repente, nos estaban llamando para dar conciertos, algo que tampoco habíamos planeado. Tuvimos que pensar en un nombre para la banda, y mi hermano pequeño propuso Palace, de broma. Todo surgió de una forma muy honesta y orgánica, y cada cosa que nos ha ocurrido ha sido un regalo, porque nunca esperamos nada. Por eso es muy surrealista estar en otro país para actuar.

Os han descrito como una banda que no atiende a modas. Desde luego, no seguís el hype del momento.
(Rupert) Musicalmente, eso creo, porque tenemos gustos e intereses diferentes y no pensamos en ser una banda de rock u otra cosa, simplemente unimos nuestras influencias. Y esto nos mantiene lejos de lo que está de moda.

Desde el momento en el que no montasteis el grupo con la idea de hacer algo en serio…
(Leo) Justo, nunca planeamos hacernos famosos o tocar en grandes estadios. La idea de intentar ser algo que no soy y hacer música de un cierto estilo para intentar triunfar, ese no es nuestro rollo, porque resulta deshonesto. El tipo de música que nos gusta es honesta y real.

Tomando el título de vuestro nuevo trabajo, "Life After", ¿cómo fue vuestra vida después del primer disco?
(Leo) Me ha gustado lo que has hecho ahí (risas). Fue una experiencia de la que aprendimos mucho. Acabado ese disco y al enfrentarnos al siguiente, nos sentíamos más seguros, que éramos mejores músicos, que habíamos madurado como banda, y llegamos a un punto en el que sentíamos que nos merecíamos estar ahí. Con el primero todo nos parecía una locura, ahora creemos que nos hemos ganado estar en Palace. El segundo disco resultó muy natural, nos sentíamos más confiados. Esta vez sabíamos lo que estábamos haciendo, porque llevamos tocando juntos unos siete años, nos sentimos como viejos rockeros (risas).

Habéis dicho en alguna ocasión que esa primera experiencia fue dura...
(Rupert) Sí, porque estuvimos dando palos de ciego. Y tardamos mucho, unos siete meses, trabajando en un estudio muy pequeño, Joe se volvió loco, pero aprendimos mucho sobre lo que nos gustaba y lo que no, que si algo sonaba bien había que dejarlo estar… Aprendimos a disfrutar del proceso.

(Leo) Creo que cuando estás nervioso y no confías mucho en ti mismo, no tocas ni escuchas las cosas igual. Esta vez hemos disfrutado mucho más. Con el primer disco nos rompimos la cabeza y casi perdemos el juicio.

"Hemos aprendido a fiarnos más de nosotros mismos, de lo que nos gusta y lo que no. Y también a celebrar nuestras imperfecciones y nuestros errores"

¿Qué aprendisteis y os asegurasteis de no repetir para el segundo?
(Leo) Creo que hemos aprendido a fiarnos más de nosotros mismos, de lo que nos gusta y lo que no. Y también a celebrar nuestras imperfecciones y nuestros errores. Y a pasarlo bien y disfrutar de la experiencia. Muy importante también no hacer cientos de tomas de una guitarra. Esta vez con Catherine –Marks, productora que ha trabajado con St. Vincent, Wolf Alice o PJ Harvey, entre otros– a la tercera nos decía que valía.

¿Existe alguna conexión entre vuestros dos discos? Hasta la portada de After Life me da la impresión de que es una continuación de la portada del primero. ¿Lo habéis hecho a propósito?
(Leo) Mi hermano pequeño diseña las portadas y todo el arte de Palace desde el principio, por eso hay ese hilo conductor. Él creó esa estética de pintura al óleo y de mundos fantásticos. Para Life After sentí que no debían verse unas caras como en "So Long Forever" (16), sino más bien la naturaleza, una selva, plantas… Se lo comentamos y un mes después apareció con esta portada y alucinamos. Cuando estábamos grabando, vino un día y se tiró horas escuchándonos para empaparse de la música y coger ideas, es increíble. Él fue nuestro primer bajista y nos dio el nombre, es una parte fundamental de Palace. También es nuestro contable (risas).

"Life After" habla de pérdida, aunque siempre buscando el lado positivo. “He estado escribiendo esta canción para ayudarte a respirar de nuevo” cantáis en el tema titular. ¿Cuál ha sido la inspiración de estas canciones?
(Leo) Buena parte de ellas beben de experiencias que he vivido en los últimos dos años, como la experiencia tan dolorosa que ha vivido mi novia. Estar al lado de alguien que ha sufrido una gran pérdida y que siente un dolor tan intenso te hace conectar mucho con esa persona. Tú no sientes su dolor, pero vivirlo a su lado refuerza la relación. Nunca había vivido algo así y fue duro, pero aprendí mucho y al final acabas encontrando algo de esperanza y positivismo.

Y al interpretarlas en directo, ¿sientes que puedes transmitir ese positivismo al público?
(Leo) Eso creo, sí. Están muy recientes y hay cosas muy directas e intensas en las canciones, aunque, en general, transmiten un mensaje positivo que puede animar a la gente. Tocarlas juntos también lo hace más llevadero. El primer disco era muy oscuro y a veces nos costaba, pero con el tiempo desconectas emocionalmente y se hace más fácil.

Os habéis asentado en Londres. ¿Cómo está la escena local? Nos llegan bastantes novedades por aquí, pero, ¿cómo se vive desde dentro?
(Rupert) Está bastante saturada, hay muchas bandas y resulta muy competitiva, pero eso es bueno porque te hace esforzarte más para destacar. Sin embargo, es increíble, se cubren todos los estilos.

(Leo) Hay muy buenos grupos: Black Midi, Black Country New Road, Fat White Family… Hay cosas muy chulas y no especialmente comerciales, todas tienen algo especial u oscuro.

El Madcool ha sido vuestro primer festival español, pero ya habíais tocado en nuestras salas. ¿Conocéis algún grupo o artista que os haya llamado la atención especialmente?
(Rupert) Mi mujer es muy fan de Rosalía (risas).

(Leo) Y conocemos a Hinds, son muy populares en Reino Unido. España es un país divertido para tocar, es de esos lugares a los que quieres volver una y otra vez. Queremos estar de gira por España para siempre (risas).

¿Qué puede esperar la gente que nunca os ha visto?
(Leo) Unos conciertos cargados de épica y energía, que te transportan a otro lugar y, con suerte, que transmiten cosas con las que puedes conectar emocionalmente. Las guitarras son una parte esencial de Palace, y nuestra forma de tocarlas y de interactuar entre nosotros con ellas tiene un cierto sabor vintage. Y bastante intensidad. A veces vemos gente llorando en nuestros conciertos, la gente se emociona, lo cual mola.

(Rupert) Nos pegaremos una buena llorera.

(Leo) Eso, venid a llorar con nosotros.

(Rupert) Nos abrazaremos al final (risas)

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.