Incidental Music

La historia de W.H. Lung básicamente resulta ser la de una banda que no quería serlo. Sus orígenes se centran en un conjunto de amigos que se unieron para experimentar a través de unas habilidades musicales bastante limitadas, obteniendo unas canciones de lo más pegajosas entorno al synth pop setentero que bebe del espíritu glam más frenético. Al mostrar lo que tenían entre manos, todo el mundo quedó rápidamente prendado de su propuesta y les ofrecieron la oportunidad de tocar en directo, algo que en realidad nunca se habían planteado.

A pesar de su reticencia inicial, fueron llamados para multitud de festivales en el Reino Unido, apresurándose para confeccionar las canciones de su elepé debut que acaba concentrando una pegada envidiable, muy relacionada con lograr melodías vigorosas. Lo que nos vamos a encontrar en este “Incidental Music” son temas de lo más inmediatos, escondiendo un nervio que en muchas ocasiones mira a la new wave más asociada al post punk, pero también guardando el punto romántico y exhibicionista que hace que la comparativa con artistas como Bryan Ferry tampoco resulte tan descabellada.

Con tan solo ocho temas de duración de lo más irregular, son capaces de lograr lo más parecido a una ópera rock ejecutada desde un punto de vista totalmente sintético. Estamos por lo tanto ante una banda que encuentra momentos relacionados con la épica de una forma nada deliberada, sino más bien dejándose llevar por todo el aparataje de guitarras que siempre acaban apuntando hacia la crispación. Sin presentarnos ningún solo instrumental realmente significativo, el empuje y por momentos histrionismo que muestra su frontman resulta fundamental para que los temas acaben explotando de forma definitiva.

Más detalles interesantes que nos ofrecen a lo largo del disco llegan a través de esos momentos donde se acercan a bandas como DEVO y muestran una faceta más desinhibida a la hora de lograr unos ritmos más eléctricos. Este es el caso de temas como “Second Death of My Face”, logrando que el disco acabe por despegar sobremanera y transmita un mayor carácter eufórico. Nos encontramos por lo tanto ante una banda con clara vocación a encabezar festivales no tardando, todo ello con argumentos musicales de lo más sólidos.