Game Over

Mutiko nos presenta su primer trabajo largo en colaboración con Denso, uno de los productores más innovadores y prolíficos del momento, además de escudero de su compa Tatta, Etxepe… Sus producciones son vanguardistas e inspiradas en las tendencias internacionales, arriesgadas pero limpias y pegadizas: huele a Atlanta, pero también a house, reggaetón, e incluso hyperpop.

La voz de Mutiko es puro slime autotuneado, con flow en las rimas y margen para entonar. Algo más positivas en este primer largo, e inspirado en cine y calle. La referencia a la serie “Last of us” está traída magistralmente, las referencias al mundo digital son constantes, como en “5 lobitos” (“tiene la loba, uno eres tu, otro tiene otro arroba”). “Game Boy” suena a verano desde ese primer sinte y voz filtrados, que se van abriendo hasta oir el tag “Denso”, porque “quiero que me juegues como en una Game Boy”, además de “repite esa mirada cuando estemos solos, o cuando estemos sobrios”. Son barras y no las de la panadería del barrio.

Sin querer hacer mas spoiler que estos highlights de sus narrativas e imaginario propio, las colaboraciones cuentan con su compadre Tatta, Maida, M. Sanchez, Chois y Zaidbreak como muestra de que esto no es mas que la punta de un iceberg contra el que esta a punto de chocar la escena local.

Además, los primeros trabajos de este tipo de artistas salen ya mediante empresas culturales mas que establecidas, que aunque aun no se atreven a salir del formato digital (muy cuidado, eso si: con lyric videos trabajados Game Boy en 3D incluida), asegurarán (y rentabilizarán) bien el recorrido de directo de estos jóvenes con filas de adeptos.

Es evidente que los ritmos en Euskal Herria han cambiado por fin, de rigideces estoicas ska punk a sincopas y bajos blandiblú, sea por el cambio de los tiempos o no. Lo comprometido ha dado paso a lo hedonista, pero sin dejar de lado las bien sentadas bases políticas locales autogestionarias que, por otra parte son las que han permitido que se desarrollen estas nuevas tendencias. Y si, aunque ya podamos celebrar la nueva hornada de música urbana vasca, aún habrá que esperar para sus primeros temas en euskera.