Kyoko

Javier Arteaga, músico de Vitoria-Gasteiz, conocido sobre todo por su labor tras las teclas en The Soulbreaker Company y The Freetangas, ha buscado unos colaboradores de lujo para viajar durante casi quince minutos al espacio exterior. En la estratosférica travesía le acompañan Guille, batería soulbreaker, y Roberto, guitarrista de Entropía. “Kyoko" alberga cuatro temas en apenas un estimulante cuarto de hora, y es el primer volumen de una trilogía titulada "La futilidad humana contra la cibervida". Estaremos atentos a la salida de los dos siguientes capítulos.

'Leaving Earth' comienza como si de una composición del mismísimo Vangelis se tratara. Voces grabadas en la cápsula de alguna nave cercana a Plutón destacan junto a un teclado filigranero, que se adapta sin problemas a las cambiantes condiciones de una atmósfera donde el oyente respira entre la tranquilidad y la inquietud. 'Humanoid Bioengineering' prosigue por la senda de una posible banda sonora futurista, con un conjunto endurecido por unas guitarras hardrockeras y progresivas, añadiendo, además, sonidos robóticos con unas teclas que parecen pedir auxilio en boca de algún androide que ya ha tenido la desgracia de cruzarse con algún ser humano. 'Replicant' continúa explotando la improbable armonía entre un teclado que también haría las delicias de Isaac Asimov y una guitarra que se muestra abrasiva en ocasiones, si bien es capaz de asumir su condición secundaria cuando las etéreas melodías lo requieren. A todo esto, la batería, como durante todo el trayecto a bordo del Kyoko1, siempre estuvo ahí, efectiva, precisa e imprescindible.

La homónima y amable, por lo menos en apariencia, 'Kyoko' cierra el círculo de una profecía que vaticina un futuro cercano incierto, al que el calificativo distópico se le puede quedar muy corto. Unas canciones que bien podrían ambientar una partida de póker con Harrison Ford y sus amigotes replicantes como ilustres jugadores.