El trabajo, desde el más absoluto underground, del sello Conspiracy -afincado en Amberes, Bélgica- es ejemplar y rotundo en cuanto a logros artísticos. Su catálogo, ambicioso y disperso, sabe tanto de minimalismo asfixiante y oscuro (Tribes Of Neurot, Starfish Pool) como de emorock intenso (Quetzal). ¿Y de post-rock? Pues también, faltaría más.
En esa difusa línea que separa el rock después del rock, hallamos a los austríacos Valina, una formación que confía en el instinto y la libertad tanto como en su, por otra parte indudable, seguridad instrumental. En “Into Arsenal Of Codes” nos encontramos con sonoridades nada cómodas, afianzadas en progresiones de guitarras aceradas que invocan a Thurston Moore y Guy Picciotto. Guitarras que a menudo son envueltas en armazones de frágil cristal con cierto poso Thrill Jockey y acompañadas de una voz que parece querer gritarte un montón de verdades al oído mientras una batería obsesiva desparrama sinrazón y caos con precisión quirúrgica y, muy lejos, mueren unas cuantas notas de trompeta. Shellac, Fugazi, Sonic Youth, Lungfish, incluso Tortoise, planean por un disco exigente y duro, de matizada inventiva, pero recomendable y, sin duda, apasionante.
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