Al calor del rock and roll
Conciertos / Summer Fuzz

Al calor del rock and roll

8 / 10
Raúl Olalla — 28-06-2022
Fecha — 25 junio, 2022
Sala — Polideportivo Municipal de Villamediana de Iregua, Villamediana de Iregua
Fotografía — Denisa Szidorak

Villamediana albergaba durante el fin de semana la propuesta más salvaje de todas las ofertas culturales que se concentraban en La Rioja, y qué mejor opción que un polideportivo (con seguridad ante las inclemencias del tiempo) y un equipo técnico de sonido e iluminación tan en forma como FAC 26 para descubrir, volver a disfrutar de bandas y comprobar que el rugir de guitarras tiene relevo garantizado por muchos años más.

Los comienzos son siempre duros, abrir el viernes un festival no es fácil para ninguna banda, excepto si tu banda se llama Micelio Eléctrico, encantadores de serpientes que ya desde las primeras notas generadas por el bajo daban la sensación de atraerte hasta las vallas de la primera fila. Maestros de las intensidades pasadas por los mejores tinteros del grunge, el rock y el blues, hacen de sus composiciones un paraíso sonoro y así lo recibió el público aplaudiendo cada uno de los virtuosismos de Pablo, Iggy y Cachón en canciones como “Libélula”, “Ballenas” o “La Pirámide”. Hubo tiempo incluso para poner el toque más punk con la colaboración a la voz de BeAtroz, que llegó para dar velocidad a los temas de "Cordura compleja” y “A Grieta” y, con un desparpajo admirable, hizo que la banda sacara su lado más macarra.

Los siguientes no necesitan presentación: la merecen, y más si llevan tantos años haciendo esto del rock de un modo tan personal. El Cuarto Verde era la banda más longeva de la noche del viernes y lo demostraron con canciones que podrían rozar la década. No es fácil ni decirlo ni hacerlo, pero vieron como los asistentes más asiduos a sus conciertos las recuerdan perfectamente. Llegó el tema “El peso de la necesidad” y lo hizo bien acompañado de colaboración al teclado de Lidia, en la que ella y su hermano Miguel se fundieron en una introducción piano-guitarra que consiguió darle una nueva dimensión a la propuesta que siempre ha defendido este grupo. Trasmitieron un torbellino de sentimientos con “Ira”, con la que desplegaron su lado más agresivo y su camaradería con “Salud”, terminando la canción los cuatro juntos abrazados en el escenario. Temas creados por la formación actual como "La vida pesa”, que estrenaban el mismo día, dejan ver el verdadero potencial de Rubén y Miguel, viéndose reflejado en la complicidad con Odón y Deivis cuando tocan juntos.

Finalmente, Messura puso el broche de oro a la noche del viernes. Esta banda se podría definir con una sola palabra: SOLIDEZ. Y es que no hay mayor satisfacción que ver a una banda tan en forma y con una actitud tan eléctrica en el escenario. Los primeros compases de “Soma”, al tiempo que las luces cegadoras avisaban que el escenario iba a explotar (y así fue), y la descarga de riffs y ritmos marcados con total precisión, volcaron al público a las primeras líneas a corear desde el inicio. Burgui, pese a estar ejecutando la mayor virguería jamás creada, se mueve por el escenario cómodo, interactuando con David, Diego y Germán. Este último se estrenó a los coros haciendo que las voces tuvieran más cuerpo al aparecer juntas. Temas de su primer EP “Otoño XVII”, de su LP “Animal”, como “Mienten”, o sus sencillos más actuales, como “Iguales”, conviven en un repertorio repleto de sentimientos y actitud desenfadada con variaciones de intensidad marcadas a su antojo, en un escenario que, pese a ser enorme, se les queda pequeño. La banda, en armonía con el público, estalla con “Reinass”, y es que los de Logroño pueden beber del indie, del hard rock o del stoner y crear trabajos para un proyecto sobresaliente.

La segunda jornada comenzaba lluviosa, pero dentro del polideportivo de Villamediana nada había que temer y ya estaba todo preparado con la primera banda encima del escenario. Los encargados fueron Atokateja. Hicieron un repertorio basado en versiones de punk estatal con el que caldearon el ambiente con un frontman enérgico y con ganas de que la gente disfrutase desde el inicio.

Les siguió Última Oportunidad, que presentaron su propuesta tocando temas de su primer LP “Resurgir” intercalados con los de su último trabajo: “La teoría del Caos”. Solos de guitarras afiladas y melodías más suaves se juntan en el joven grupo en temas como “Por ti” o “La jota”.

Llegó el turno de Flying Ladies y venían cargados hasta los dientes de sus hits más potentes para poner patas arriba al público más fiel y entregado mientras ofrecían un repertorio con temas como "Demasiado imbécil”, “Chico de moda” o “Anticiclón”, en la que Juanito Cancellara participó a la voz, con su actitud más descarada sobre las tablas. Antes de que el público corease el primer “Beste bat” del festival, la banda terminó con “Tactel Generation” y está claro que dejaron con ganas de más.

La Excavadora llegaban los siguientes y, pese a que Pela no iba a poder asistir, dejaron en manos de Fer, cantante y guitarrista de Storm Clouds, el cometido de dar voz y hacer el papel de frontman en la formación de Agurain. Angelillo, Buton, Mikel y, sobre todo, Txiki hicieron un gran trabajo demostrando la potencia que caracteriza a estos cuatro estandartes del punk rock a día de hoy. Pese a su temprana creación, la banda tiene grandes adeptos y eso se deja ver con “Futuro”, “Mala música” o “Animales” donde el público se volcó. Riffs agresivos, rápidos y concisos; en definitiva, una máquina creada para desmontar el terreno.

Por último, y no menos importante (de hecho, todo lo contrario): 28 años después apareció sobre el escenario Anticuerpos, y a Mamen, a la voz y el bajo, se le dibujó una sonrisa que no iba a desaparecer en toda la noche, como a la mayoría de los asistentes que se concentraron para ver el emotivo recorrido de canciones en homenaje a Pedro Landatxe, recordado con una imagen en el fondo del escenario y representado por una caja de batería en el centro durante todo el concierto, al igual que las palabras de Mamen: “Nunca seremos Anticuerpos sin Pedro”. Y por ello se fueron sucediendo las colaboraciones a las voces: Martxi de Cerrado por Defunción (Logroño/La Rioja), Gontzal de LSD (Viana/Navarra), Patxi de Delirium Tremens (Mutriku/Gipuzkoa), César de EH Sukarra (Eibar/Gipuzkoa), etc...

Mientras sonaban los temas de su único álbum como “Olvida la fábrica”, “Una mujer (Te ha engañado)” o “Una vez más”, en las que Guille ejecuta el repertorio como si lo hubiesen grabado ayer, sorprenden haciendo una versión de Joan Jett muy bien recibida por el público. Mención especial de Urko como segunda guitarra y a Javi Arteaga de teclista, que dieron color a los temas y aumentaron el valor sentimental del evento. Pero cuando Begoña de Vulpes comienza a caminar hacia el centro del escenario, el público ya empieza a intuir cómo va a terminar el concierto. Cuando el riff de “Me gusta ser una zorra” estalla, se pone el punto y final por todo lo alto.

Una imagen de Anticuerpos al completo junto con la caja de Pedro y su imagen al fondo como eterno homenaje termina una edición donde la organización (Boogy) y el equipo técnico (Fac 26) han realizado posiblemente uno de los mejores eventos de la zona y con gran proyección de futuro.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.