El paso de Hello Cuca por el Ocho y Medio dejó dos víctimas mortales: dos cuerdas de guitarra, dos, cayeron a las manos de Lidia Damunt, obligando a sendas pausas de lo más incómodo. Si a esto le sumamos el mal sonido (nadie que no supiera leer los labios entendió una letra) y la indiferencia de parte del público, el resultado debería ser una noche desastrosa, directa al cajón de los malos recuerdos... O no. Porque las tablas cuentan y, tras diez años pateándose el inframundo, al trío le sobran energías para remontar situaciones así. Se las compusieron, pues, para presentar las canciones de “Gran Sur” con un repertorio brevísimo (los primeros singles se echan de menos), pero lleno de punteos vertiginosos, aullidos y alaridos varios, bajos-apisonadora y baterías de cemento armado, demostrando así que la mejor Murcia siempre ha sido subterránea, fanzinera y amiga de la bronca. Antes y después de este ejercicio de supervivencia, el inefable DJ Potapop celebró el aniversario de su programa mezclando audazmente a Parálisis Permanente con Astrud y a Dexy´s Midnight Runners con The Faint: sonará raro, pero bailaron todos. Enhorabuena.
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