Es hoy

“La vida es como los dibujos, no haces lo quieres, haces solamente lo que te sale. Lo único que sabes hacer”. Carlos Giménez, una leyenda del cómic español, dicta casi literalmente sus últimas voluntades. El autor de obras imprescindibles como “Los Profesionales”, “Dani Futuro”, “Barrio”, “Malos Tiempos” o “Paracuellos”, cierra su trilogía dedicada a la muerte con “Es hoy”. Si en “Crisálida” se enfrentaba al abismo del pasado a través de la evocación de un amigo fallecido recientemente en circunstancias dramáticas; y en “Canción de Navidad” utilizaba el archiconocido relato de Dickens para reflexionar acerca de la vejez y la soledad, en esta ocasión nos encontramos al ya conocido y entrañable Pablo, el alter ego del autor, en un diálogo final consigo mismo.

Es su último día, el momento de decir adiós a todo y a todos. El tiempo se consume y es hora de poner en la balanza lo bueno y lo malo de toda una vida. Sin embargo, aunque hay breves instantes para la melancolía, lo que hallamos es, ante todo, un inmenso vitalismo. Pablo no tiene miedo a la muerte, por mucho que sepa que no le aguarda ningún otro mundo, únicamente la nada de la que venimos y hacia la que vamos, sólo nostalgia por aquellos que ya no están a su lado –viejos amigos, una madre–. En sus recuerdos, recupera lo que él mismo define como “historias sencillas” “A la gente normal y corriente sólo nos suceden historias sencillas”. Lo que no impide que sean a menudo, tremendamente divertidas o estremecedoras. Así las anécdotas de juergas de juventud, de personas que fueron importantes en su vida y que ahora se han desvanecido. Incluso los momentos en que casi sin advertirlo arriesgó la vida, como cuando una corriente lo arrastró mar adentro y estuvo a punto de ahogarse. Todo ello entremezclado con ácidas perlas de sabiduría vital, con sus ideas acerca de la sociedad, la religión o la política. El resultado es una obra enormemente libre, tan ligera como emotiva, porque su autor, Carlos Giménez, ha sido siempre un hombre libre.

“Yo creo que ya he vivido todo lo necesario. Así que esto es todo… y ya está, se acabó. Fin de la película y fundido en blanco”.