Discos de referencia: “Un gramo de fe” (Pony Bravo), “This Is The Sound” (Marina Gallardo), “Rugen las flores” (McEnroe), “Voces del extremo” (Niño de Elche).
Discos de referencia: “Un gramo de fe” (Pony Bravo), “This Is The Sound” (Marina Gallardo), “Rugen las flores” (McEnroe), “Voces del extremo” (Niño de Elche).
La Mina es el estudio residencial del cordobés Raúl Pérez (The Baltic Sea). Está localizado en una antigua casa de estilo nórdico de los 70 con decoración vintage, piscina y techos de seis metros de altura, rodeada de árboles (“un espacio de creación, un contexto idílico para el músico”, explica), a seis kilómetros del centro de Sevilla.
Su epicentro es una mesa Raindirk Series III de 1974 originalmente diseñada por Cyril Jones para los desaparecidos Olympic Studio de Londres (¡hoy, unos cines de lujo!). En pocos años, Pérez se ha convertido en referencia de buena parte del indie andaluz (y por extensión, de todo el país), sin que la juventud con la que empezó haya sido inconveniente.
Entre su equipo, destaca su listado de micrófonos y un backline vintage amplio, entre el que se incluyen baterías y cajas, amplificadores, guitarras y teclados. Como algunos otros estudios residenciales diseminados por nuestra geografía, La Mina ofrece una casa de dos plantas como alojamiento.
Raúl defiende conceptos como personalidad o carácter, en un momento en que demasiados discos suenan parecidos. “Lo mas importante para mí es el concepto, y es lo que intento aportar, tanto desde un punto de vista de estética sonora como en la composición. Llegar a encontrar un lenguaje propio en combinación con cada grupo, y que el resultado sea único. Huyo de las fórmulas y la sobreproducción, creo que el valor comercial de algo está en que sea reconocible por sí mismo, es la única forma de que perdure en el tiempo y que resulte creíble”, asegura.
¿Condicionantes, problemática a que se enfrenta? “El tiempo. Las producciones son cada vez más cortas por los presupuestos que se manejan y el momento de la industria. Para mí, la diferencia entre una maqueta y un disco, en muchas ocasiones ya no tiene que ver con el estudio donde se graba, sino con el tiempo que puedas emplear en componerlo y grabarlo”.
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