Imaginad que un día pican a vuestra puerta y un señor te ofrece 200 dólares por dejar que se filme un vídeo en tu casa. Poco después te cuentan que se trata de Radiohead. Otro día te dicen que al director le gustaría ver tu casa. Te lo presentan como Paul y tú piensas "me suena su cara".
Esta es más o menos lo que le sucedió a Stefanie Wilder-Taylor, residente en Los Ángeles, cuando aceptó que el nuevo videoclip de Radiohead se grabara en su casa y conociera a Paul Thomas Anderson, director de Boogie Nights (1997), There Will Be Blood (2007) e Inherent Vice (2014), que ya había colaborado con Jonny Greenwood en varias ocasiones.
A cualquiera le entusiasmaría la idea, sin embargo, Stefanie confiesa en el podcast que la banda "no le importa una mierda" y que no ha escuchado nada más allá que "Creep".
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.