¡Que bien sé yo la fonte que mana y corre, aunque es de noche! que diría San Juan de la Cruz. Y también es una cascada de agua la inspiración musical y audiovisual de este compositor nazarí. Lleva por título Donde el agua se hizo ritmo 2.0 y consta de cuatro episodios bien equilibrados que se puede disfrutar tanto en modo musical como documental inmersivo a través de la plataforma Filmin.
De la mano de JJ Machuca (teclista de Lori Meyers y Lagartija Nick) la transgresión de esta propuesta es lograr la conexión perfecta entre la música y el universo. Prepárense para disfrutar de un viaje por los sentidos a lo Baraka o la trilogía Qatsi. Estamos ante las variaciones Goldberg de JJ Machuca que nos sirve en bandeja un paisaje sonoro equilibrado y muy fácil de digerir. Todo gira, según sus propias palabras, “en torno a los sonidos y la ampliación de la obra a nivel compositivo.”
En 2021 conectó la primera parte dentro del documental La Danza de los Mundos. Pero ahora da un paso más. En Donde el agua se hizo ritmo 2.0 un looper para crear una percusión de bases rítmicas con un sistema revolucionario que consiste en transformar el piano en un sintetizador. “Contemplar el agua danzar y su belleza nos hace valorarla y ser conscientes de la destrucción que sobre ella ejerce el ser humano”. Si el documental sonoro nos puede llevar por unos recovecos audiovisuales de mayestática belleza, no menos es la escucha de su banda sonora de forma aislada. “La belleza y la danza de la naturaleza combinan perfectamente en las formas, en las texturas, en el movimiento de los elementos de todos los mundos imaginables”. Si queremos hacer una síntesis para el no versado en música experimental, podemos catalogarlo como un “Tubular Bells modo Graná”; “De niño me encantaba Mike Oldfield, para mí era un juego sacar y tocar sus canciones. De hecho, lo vi en directo con solo 14 años. Además, ya sabes que me gustan mucho las campanas.” Puede parecer muy new age, pero en JJ Machuca no hay impostura ni medias tintas, porque su proyecto mana y corre, nuevamente parafraseando al místico. “Los loops sirven para amplificar el efecto de la danza del agua, ya sea en primeros planos a cámara lenta del impacto de las gotas, ver cascadas desde el cielo o contemplar el agua espejo al más estilo Valdelomariano”. Sostiene JJ Machucha que “la música, como el agua, tiene infinitas caras y formas”. Es una herramienta perfecta para potenciar el mensaje de lo que se quiere expresar.
“Será como ir al cine y ver en pantalla grande el documental con la música en directo en su versión 2.0"
El próximo 24 de febrero, en el Centro García Lorca, tendrá lugar la puesta en escena de este potente proyecto. ¿Qué podremos encontrar en él? “Será como ir al cine y ver en pantalla grande el documental con la música en directo en su versión 2.0. En él hay más recursos de imágenes y texturas sonoras. En los directos me acompaña en las proyecciones Rubén Guirado “Muwasha”. Para Lorca, el agua cuando corre es símbolo de vitalidad. Sin embargo, representa la muerte cuando está estancada. Coincido con él en cuanto a la vitalidad del agua cuando corre, pero mi percepción acerca del agua estancada es sinónimo de contemplación, reflexión y también belleza”. Este particular homenaje audiovisual al cine mudo/sonoro, donde los elementos existentes se concretaban a través de la pantalla y el piano o en su caso, una pequeña orquesta. “En La Danza de los mundos en directo, me recreo en este género donde intento llenar el vacío de las palabras con la intensidad de las imágenes y la música de piano del siglo XXI”.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.