Keith Jarrett. Una biografía

Esencial para cualquier fan de Keith Jarrett, delicioso para cualquiera que sepa disfrutar con la buena –excelente, en este caso– crítica musical, el libro que el productor, crítico y musicólogo alemán Wolfgang Sandner ha dedicado a glosar la trayectoria musical del pianista norteamericano tiene casi tanto de biografía como de hagiografía, y no es un demérito, más bien al contrario. Combinar la admiración irredenta hacia un músico con una evaluación totalmente ecuánime de su obra es seguramente más complicado que abordar su obra con la asepsia del entomólogo, como quien examina una extraña forma animal, y lo que no se le puede negar a Sandner es un conocimiento apabullantemente exhaustivo de la carrera del autor de “The Köln Concert” (1975), así como una apasionada y brillante forma de transmitirlo, por momentos tan torrencial como para enganchar al profano en la materia.

Poniendo el foco en su trabajo, tan solo reparando en su privacidad cuando esta redunda en su obra, esta biografía tiene la virtud de explicar muy bien esa innovación dentro de la familiaridad, esa permanente negación jarrettiana sin perder de vista muchos preceptos clásicos, esa capacidad de improvisación dentro de unos cánones reconocibles, que ha hecho del jazzman una de las figuras claves del género en el último medio siglo, desde que se fogueara con Miles Davis y Charles Lloyd hasta sus celebrados tríos de estándares del gran cancionero americano, con el decisivo e incondicional –contratos sellados mediante apretón de manos, al estilo de la Factory mancuniana– apoyo de Manfred Eicher y su sello ECM desde principios de los años setenta.