Anatomía sensible

Aunque "Anatomía sensible" sea un tratado (poco convencional) sobre las partes del cuerpo, toca más de la literatura que de la ciencia. Y eso que aquí el potencial lector va a encontrar mucho de anatomía. O más bien de anatomía política. En él, el escritor Andrés Neuman nos (re)descubre a través de treinta capítulos cortos los múltiples recovecos, movimientos y proporciones del cuerpo.

Recorre cada una de las partes para buscarle otro significado, otra manera de entenderlas y de relacionarse con ellas desde un plano casi sociológico que busca desmitificar todo lo relacionado con el mundo de la pose actual. ¿Cómo? Rompiendo los cánones de lo bello y lo feo y presentando estéticas alternativas. La palabra imperfección pierde aquí toda su fuerza.

Así, llena el libro de acepciones y similitudes de territorios tan manoseados (metafórica y literalmente) como pueden ser la espalda, los pies o la vagina. Por poner tres ejemplos. Todo ello a través de un lenguaje muy arriesgado y lírico. Tanto que, a veces (las que menos), cae en descripciones que podrían aparecer en pasos de cebra.

Neuman completa el libro con un imaginario para redescubrir el cuerpo humano y nos ofrece otros modos de comprenderlo a los que quizá solos no habríamos llegado. En definitiva, se trata de una auténtica celebración del cuerpo: tanto de sus virtudes como de sus defectos. Una nueva óptica desde la que mirarnos que ofrece más amplitud de campo. Una lectura que rompe con los estereotipos. Una nueva forma de ser.