Fake Names
Discos / Fake Names

Fake Names

7 / 10
Adriano Mazzeo — 12-05-2020
Empresa — Epitaph / Pias
Género — Punk

¿Es Fake Names una banda necesaria en este momento? Disculpad el monotema, pero un disco así de enérgico y fresco podría desentonar con el ánimo en el que el mundo anda metido. Eso si nos centramos en lo que se suele ver y expresar en los medios de comunicación y en las caras de nuestros vecinos, quienes parece haberse creído todo lo que han leído durante los últimos meses. Pero intentando responder a la pregunta que rompe el hielo: sí, este disco y esta banda son muy necesarios a día de hoy.

Para comenzar debemos decir que Fake Names es un nuevo súper grupo formado por Brian Baker (Bad Religion, Minor Threat, etcétera), Dennis Lyxzén (Refused, The (International) Noise Conspiracy), Johnny Temple (Girls Against Boys) y Michael Hampton (Embrace). Su recién nacido disco de debut es el resultado de un trabajo que comenzó en 2016. Y sólo ocupará veintisiete minutos de tu vida disfrutarlo al completo, multiplicado por la cantidad de veces que quieras repetir su escucha en caso de que te entregues a una dosis de power-pop, hardcore punk y guiños new wave, moderada con llamativa precisión.

Aquí encontraremos ecos de todos los grupos principales de los integrantes de la banda, con lo que “Fake Names” supone un acogedor ambiente dentro de la galaxia punk rock en el que todas esas sonoridades logran convivir perfectamente. Es energía y desenfreno. No importa la edad de sus miembros, porque aquí hay ganas de pasarlo bien, combinando el ejercicio nostálgico con ese tipo de letras provocativas y tocapelotas a las que el sueco nos tiene acostumbrados. Así, las guitarras se desarrollan a buena velocidad, mientras la voz de Lyxzén sigue en sus trece, desgarrándose en el momento justo y, sobre todo, echando mano de la experiencia en cada una de sus intervenciones.

A eso hay que sumarle que todo el disco discurre sin destaques notables, con cada canción aportando su granito de arena, lo cual no significa que no debamos destacar esa bocanada de aire maravillosa que supone la new wave “Being Them”, la electricidad de “Brick” y su coro casi hooligan que resulta inspirador, y la emoción melódica de “This Is Nothing”, que posiblemente te deje tarareándola por un buen rato.

Evoque sensaciones melancólicas o no, “Fake Names” es un disparo en la diana, un sentimental puñetazo en la cara, un slam dance con trajes protectores, una epopeya de furia sensible y, sobre todo, divertida.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.