El misterioso cuarteto Crybaby se desenvuelve con soltura entre coordenadas similares a las manejadas por Morrissey, Richard Hawley, Roy Orbison o Ed Harcourt, presumiendo del siempre distinguido aire que acompaña a los crooners de aire clásico y corte tradicional. No en vano, el activo más evidente de los británicos recae sobre la fortaleza y extraordinaria capacidad vocal de su líder y artífice Danny Coughlan, con la que éste dota de hipnótica elegancia a cada uno de los diez cortes incluidos en el presente debut homónimo. Sin embargo, el don resultaría insuficiente si la calidad de las canciones no sustentase la intensidad de la propuesta. Así, el dramatismo estilístico resulta artísticamente moldeado hasta formar parte indispensable del espectáculo en composiciones como “I Cherish The Heartbreak More Then The Love That I Lost”, “We’re Supposed To Be In Love”, “Twist Of The Knife” o “When The Lights Go Out”. “Crybaby” es un disco ciertamente hermoso y equilibrado, que deja además una de las sorpresas más agradables del primer tercio de la temporada
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