Nueve Sevillas
Cine - Series / Gonzalo García Pelayo, Pedro G. Romero

Nueve Sevillas

8 / 10
Toni Castarnado — 19-11-2021
Empresa — Elamedia Estudios
Fotografía — Archivo

Verdaderamente, no sabemos qué recorrido tendrá “Nueve Sevillas” y ese caballo blanco que espera paciente en la parada del bus, eso aún es una incógnita. Pero puestos a hacerle justicia, esta sería la crónica 2.0 de Sevilla como metrópolis artística. Funciona para los afines y, también, para los no tan afines al flamenco. Este es un documental de paseos en paz, en silencio nocturno, fuente de frases certeras mientras se habla del flamenco, desde vértices desconocidos y con instinto animal. Muestra todo lo profuso que hay en nueve barrios de una ciudad que en el siglo XVII era la Nueva York de la época. Con referencias al toro y al mundo gitano, “el público es el que mata al toro, no el torero”, decía Luís Miguel Dominguín al jubilarse. De hecho, el documental parte de la grada de una plaza mientras suena “Ese toro que no pisa” de Enrique Morente, al que curiosamente, se ve entre el público. Este proyecto tiene su punto de partida en el cartel que diseñó Pedro G. Romero para la Bienal de Flamenco de Sevilla en 2018, usando como hilo conductor a los nueve personajes retratados en el mismo, entre los que hay poetas, abogadas, actrices y hasta el propio García Pelayo como protagonista.

Como primera metáfora, se insiste en que el flamenco, ¡es la única actividad por la que no persiguieron a los gitanos! De otro modo, se instala la idea que Sevilla sin sevillanos, es la gran Sevilla, y que el flamenco tuvo un proceso de descolonización y una referencia clara, “lo negro es capital del ritmo que sale de la tierra”. Esta es una de las teorías que vertebran la bailaora Yinca Esi Graves y el maestro de la vida y la conversación, José Luís Ortiz Nuevo. A continuación, ella baila “Summertime” de George Gershwin en un portal; un momento maravilloso, hipnótico. Sorprende gratamente el protagonismo que aquí tienen los bailaores como seres autónomos, figuras indispensables en el mapa del flamenco, aunque según el punto de vista de cada uno, a veces están un paso por detrás en importancia al papel del cantaor o el guitarrista.

Hay otra cuestión que planea a menudo en la ciudad, ¿eres más de la Feria o de la Semana Santa? La primera transeúnte responde que de la Semana Santa, por algo se llama Macarena. Si bien, la Feria parece más presente. “El misterio de la Feria es que todos son públicos y artistas a la vez. Sevilla es una ciudad que baila”. En “Nueve Sevillas” hay un largo desfile de personajes, la mayoría de ellos muy puros y extravagantes. A través de la figura de “Bobote” y su baile de la gallina, se habla sobre cómo el flamenco llega a todos los confines del mundo, por ejemplo en Tokio hay más tablaos que en toda España, y Osaka es la Utrera de allí. “El tango en Buenos Aires, la Samba en Río de Janeiro, el fado de Lisboa, el son de La Habana o el blues en Nueva Orleans, son todos contemporáneos del flamenco”, reza un cartel. Un género que tuvo su propia autonomía de 1808 a 1898.

Se cuenta que Sevilla es una ciudad con una historia profunda, de moros y judíos, negros y gitanos, italianos y marranos. Por ejemplo, se llega a la conclusión que el germen de Veneno a mediados de los setenta viene dado por la alegría en las calles y por ese momento socio-político tan concreto. “A partir de la alegría, se puede crear”, dice Abel Martín. Por otro lado, en una tertulia deliciosa a tres con él, García Pelayo y Juan de Mairena, se resalta que la suerte es la desviación de la expectativa. Aquí es donde surge una referencia cinematográfica a "8 ½" de Fellini, la nota a partir de la cual dirimimos el punto de la suerte. Hablando de cine, hay una buena ristra de títulos que conectan con el contenido, de “Vivir en Sevilla” en 1978 del propio García Pelayo (“Nueve Sevillas” se podría tomar como la segunda parte de aquella) hasta “Ese oscuro objeto del deseo” de Luís Buñuel en 1977 y la explicación sobre el sexo como elemento ligado al flamenco.

Otro asunto a debatir es la diferencia entre identidad y tópico; la identidad no aceptada y la transmisión honda de la popularidad. En un momento dado, y durante otro paseo sin desperdicio, la mágica bailaora Javiera de la Fuente dice esto, “la querencia es más que necesidad”, y también eso tan trillado pero tan cierto, “todo viene de antes y todo está por hacer”. En todo caso, su testimonio es excepcional, cuenta como llega a la ciudad desde Chile con la mochila repleta de sueños (como Yinca Esi Graves). De hecho, se plasma que aquí no hay prisioneros, ni tampoco vencedores ni vencidos, porque en el fondo, la ilusión es una cosa y valer es otra. En el mundo del toro cunde esta frase, “para ser torero hay que parecerlo”. Algo que defiende a ultranza Vanesa Montoya, una mujer que entró ahí por deseo, por convicción.

Por ende, cuenta la leyenda que la afición flamenca nació alrededor del mundo del toro; gitanos carniceros, clases peligrosas y mujeres de la vida, con una jerga propia y un gusto particular en el cante y el baile. A todo esto, y en clave casi cómica, se discute si las galeras (el marisco) vienen de Liverpool o de Detroit, o como los extranjeros que se quedaron prendados con la ciudad y la Expo en 1992 y que se quedaron allí, después de dos años se comían los mocos. O finalmente, interesantes los argumentos de Rocío Molina y Silvia Pérez Cruz, hablando de la intuición y la animalidad del arte. “Cuando mejor funciono es cuando no hay pensamiento”, asevera Silvia. Como contrapunto a los paseos y a las charlas, hay actuaciones de músicos con una patina renovadora, de Israel Galván a Rocío Márquez con Fahmi Alqhai, de Niño de Elche a Rocío Guzmán con la seductora “Dolce tormento” o una Rosalía que echa el cierre al documental cantando “Que no salga la luna”. Por tanto, “Nueve Sevillas” es un documento majestuoso y singular en estructura que invita a una reflexión profunda y sosegada, sobre el flamenco y, más importante aún, sobre la vida.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.