“No aguanto esa mierda de las plataformas digitales”
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“No aguanto esa mierda de las plataformas digitales”

Jesús Casañas — 19-04-2018

Músico, productor, manager, programador, agitador cultural… Raro es quien no conozca a Nano dentro de la escena underground estatal. A mediados de los noventa se incorporó como guitarrista a Habeas Corpus y en el año 2000 montó su propio sello, Lengua Armada (Lenguaje Constructivo). En 2006 dejaría su banda matriz para centrarse en sus labores discográficas, pero no por ello abandonaría su faceta como músico, que mantendría con los grupos Deniro y Mierda. Aprovechando el 18 aniversario de Lengua Armada interrogamos a su creador sobre estas y otras muchas cuestiones.

Te incorporaste a Habeas Corpus como guitarrista en 1995, ¿cómo recuerdas ahora aquella primera etapa con la banda?
Entré en el grupo tocando el bajo, aunque yo mi instrumento era la guitarra. Intentaba aplicar bajos de grupos que me gustaban como Pixies y otras bandas de hardcore y punk, pero me marché antes de que el grupo grabara “Sociedad Mecanizada” y al año volví ya como guitarrista. Recuerdo esos principios con mucho cariño, estábamos empezando y había más pasión y entusiasmo que tocata, buscábamos cambiar el mundo podrido a golpe de riffs y textos incendiarios y reflexivos; buscábamos la coherencia, la justicia, cambiar el sistema con nuestro granito de arena. Era todo militancia, muchos estábamos relacionados con colectivos, asociaciones, lo nuestro era cultivar el pensamiento, alertar y alentar a la gente para luchar y conocerse a sí misma. Teníamos discurso propio y a veces enfrentado en el grupo, queríamos ser radicales con nuestro mensaje, en fin… muy bonito y utópico todo, cómo nos movíamos y hacíamos las cosas. Hicimos numerosos conciertos en espacios okupados, centros sociales, y tocábamos cada fin de semana junto a otros grupos compañeros por diferentes causas para recaudar dinero y aportar nuestra energía desde la guerrilla musical, también había mucha inocencia y pasión. Luego fuimos creciendo y tomándonos de una forma más seria nuestra actividad hasta profesionalizarla e hicimos muchas cosas grandes, grabé ocho discos con HC y toqué en muchos y grandes festivales hasta que decidí que había llegado la hora de marchar y comenzar un nuevo camino. Siempre será para mí el grupo central de mi vida, con el cual aprendí y conocí a muchísima gente maravillosa en todo el estado. ¡Aupa Habeas!

En el año 2000 decides montar tu propio sello: Lengua Armada. ¿Qué inquietudes te llevaron a ello?
Por esa época, un par de años antes, comencé a llevar los asuntos de HC y conseguí el contrato para nuestro segundo disco con el sello Mil A Gritos (discográfica que crearon Soziedad Alkoholika) y a partir de ahí varios grupos quisieron trabajar conmigo. Monté Lengua Armada para dar salida a grupos que no tenían apoyos y para autogestionar y profesionalizar más mi trabajo, el cual aprendí por mi cuenta y también gracias a mi paso por la discográfica Zero Records.

En 2006 dejas Habeas Corpus para centrarte en el sello. Imagino que no fue una decisión fácil de tomar…
La verdad, fue muy fácil: estaba pasando una travesía por el desierto a nivel personal, estaba hastiado y cansado ya de la rutina del grupo y además tenía otras inquietudes musicales que en HC no iban a tener cabida, así que decidí abandonar el grupo dejándolo en lo más alto de su carrera y comencé a darle vueltas a ideas que tenía para mi nuevo proyecto. Esto desembocó en crear Deniro, grupo con el cual he editado tres discos, voy a por el cuarto y me he autogestionado todo desde el principio sin ayuda de nadie.

Años después formas el grupo de punk rock Mierda (Mierda pa ti, mierda pa mí), tu “válvula de escape”. ¿Te picaba el gusanillo?
Mierda es una válvula de escape que formé hace unos cuatro años, es un proyecto en el cual vacío la basura que acumulo de este podrido sistema, recojo la actitud de grupos punk que me gustaron desde adolescente y vomito opiniones, emociones, rabia. En Mierda hay autocrítica, ironía, burla, mala baba y me la sopla el tener que ser correcto, ni recto… También ha sido una manera de coger el micrófono con la guitarra y ver que soy capaz. Lo llevo de una forma sostenible, no me agobio, me vienen ideas que quiero plasmar y lo hago, no busco las masas con Mierda ni ningún tipo de reconocimiento, me divierte cagarme en casi todo.

“Monté Lengua Armada para dar salida a grupos que no tenían apoyos”

¿Es más fácil compatibilizar estos proyectos con Lengua Armada?
Si eres constante es fácil compatibilizar todo, cada cosa tiene su espacio, su momento y solo hay que buscar el tiempo adecuado. Puedo tener mi trabajo en Lengua Armada, puedo tener Deniro y Mierda y podría estar en más proyectos, pero no tengo pasta para poder soportar todo.

Ahora Lengua Armada cumple 18 años, ¿pensabas que llegaría a la mayoría de edad?
La verdad es que eché a andar y no sabía dónde iba a llegar, me alegra echar la vista atrás y ver con cuántos grupos he trabajado, cuántas ilusiones depositadas, cuánta gente maja he conocido… y petardos también, que siempre hay algúno, pero contento de seguir representando y trabajando por los sueños y carreras de otros.

Para celebrar este 18 aniversario has montado varios conciertos con gente como Againts The Waves, Aerial Blacked…
He montado este año tres fiestas y estoy muy contento porque han salido muy bien. La primera fue en Barcelona en la sala Rocksound el pasado mes de enero con Aerial Blacked, Mean Machine y Lipstick, todos grupos relacionados con Lengua Armada y con los cuales tengo una estupenda relación personal. Lipstick y yo nos conocemos ya de hace unos diez años, han publicado bajo mi marca dos discos y muy contentos, son maravillosos. Mean Machine llevamos trabajando juntos un par de años y son pura energía. Aerial Blacked y yo llevamos trabajando medio año en su estupendo y bonito proyecto solidario, United, e igual, son gente muy maja y currante.

Las otras dos fechas han sido este mes pasado en la sala Entre Darts Rock, de la cual me encargo de programar los conciertos; la primera fecha la hicimos el 17 de febrero con Aerial Blacked y Against The Waves y fue genial, ATW llevo trabajando para ellos dos años y ahora soy su manager, es uno de los grupos cabeceras de la actual escena metalcore que se está gestando en el Estado.

La segunda fecha en Madrid y tercera fiesta fue el pasado 24 de febrero de nuevo en la sala Entre Darts Rock con los grupos The Virgo Superclusters y No Dogs, que han editado sus trabajos con el sello.

“Me alegra echar la vista atrás y ver con cuántos grupos he trabajado”

La venta de CDs está en pleno receso, ¿crees que se va a convertir en cosa de románticos coleccionistas, como los vinilos?
La verdad es que ya lo es, solo compran los coleccionistas o los seguidores que disfrutan de un buen concierto y que al terminar van al puesto de merchand y pillan lo que sea, al fin y al cabo a la gente le gusta tener algo que tocar, algo material, un disco de vinilo tengan o no plato, un CD o una camiseta, y a veces otros artículos.

El casete, por su parte, ha notado cierta mejoría después de estar a punto de desaparecer. ¿Habéis editando algún lanzamiento en este formato?
Lo del casete es tendencia, parece muy de moda pero eso es pan para hoy y hambre para mañana, nadie tiene pletinas en funcionamiento y encima no es un formato cómodo. A mí me gustan las cintas, tengo tres cajas llenas y pletina para reproducirlas, pero las tengo en cajas y pincho una al año si acaso, siempre utilizo tocadiscos para los discos de vinilo y CDs;  mucha gente no tiene ni esto, no tienen aparatos para reproducir estos formatos, es una pena y escuchan todo a través de plataformas digitales, del móvil o del ordenador, yo no aguanto esa mierda a no ser que esté de viaje, que entonces sí utilizo estas mierdas.

“Mierda es un proyecto en el cual vacío la basura que acumulo de este podrido sistema”

¿Cuál es el presente y el futuro de Lengua Armada? ¿Qué novedades tienes planeadas para los próximos meses?
La verdad, el 2017 ha sido un buen año y este año ha empezado muy bien, estoy muy contento. Tengo dos grupos bandera que destacan que son Imperial Jade y Against The Waves, que están creciendo cada día más. Tengo un montón de grupos que ya son pilares del sello y que me acompañan desde hace algunos años: Lipstick, Paña Radiostation y No Dogs. Ahora mi nueva promesa es Ruta 57, un joven power trío muy potente de rock con mucho groove que lo parte. También he ampliado el abanico sonoro con interesantes y exóticos grupos como The Virgo Superclusters (rock/stonner/psicodelia), Martin Sánchez (rock&roll/swing/crooner), Black TV (rock/funk) o Limando (ska/rock/cumbia/reggae), una nueva apuesta que se publica el 6 de abril; los metaleros Aerial Blacked, que con su bonito proyecto –United– están llamando mucho la atención, The Inductions (rock/high energy) también nueva apuesta que se publicará el 6 de abril y algunas más que están por definir. Hay un montón de buenos grupos que descubro cada día y me molaría apostar por más, pero no hay tiempo y hay que dosificar, en fin… un montón de grupos. Mi discográfica siempre ha sido abierta a sonidos diferentes, comencé con el rap de las chicas BKC y el hard rock de RIP KC, y en la actualidad hay muchos colores dentro del sello.

Y respecto a Mierda, ¿seguirá en 2018 su tour?
Mierda para ti, para mí continua tocando los cojones u ovarios con su ‘No Creo En Nada Tour’ durante este año, lo único que como soy el único miembro fijo voy a mi ritmo y ahora he bajado de 45 rpm a 33 rpm, pero tengo otras diez canciones escritas para escupir este año. Seguro que grabo algunas.

Seguimos 18 años apostando y apoyando a soñadores, ¡salud!

 

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