Esta canción fue grabada en el Puerto de Santa María, en Cádiz, durante el mes de octubre de 2020. Con ella, Jorge Martí, el vocalista y guitarrista, cuenta como cerca del verano de ese año que da título al single, sus amigos y él fueron por primera vez a la discoteca Espiral de L’Eliana. Relatan las emociones que sintieron esa noche, pasando de estar cohibidos hasta que oyeron “Theres’s A Light That Never Goes Out” de The Smiths. En ese momento, saltaron a la pista y se dieron cuenta de que “la luz de la música que nos guía y que ahora brilla imponente, ya nunca se apagaría”.
Hace un contraste a su vez con lo que fue el verano de 2020 para su hija, que ahora mismo tiene la misma edad que él en dicho recuerdo. La adolescente llevaba sin ir al colegio 3 meses, sin ver a sus amigas y parecía triste y deprimida. Pero ella, cuando se encontraba en su habitación, bailaba y cantaba al son de la música como si nada estuviese pasando. Sin embargo, cuando salía de ese mundo, volvía a su timidez.
Con este single, la banda formada por Jorge, Marc, Pau y José, dan las gracias a la gente con ilusión que, como la joven, se dejan llevar por la música. Expresan que no tiene que importarnos lo que puedan decir de nosotros, si no que tenemos que ser nosotros mismos.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.