¿Houseros?
Entrevistas / Rinôçérôse

¿Houseros?

Redacción — 26-09-2005
Fotografía — Archivo

Jean Phillipe Freu y Patou Carrie encarnan a una especie de mamífero salvaje que apareció hacia el 1994 en Montpelier, un animal que ha crecido innovando en el terreno de la música electrónica creada a partir de guitarras electricas. Este otoño, con la publicación de “Schizophonic” (V2, 05), se han acabado de convertir en un monstruo del rock de baile.

Después de tres años de silencio discográfico, el matrimonio que forma el grupo francés sale a la calle con su tercera referencia, un pequeño Frankenstein (mitad instrumento, mitad máquina) que me incita a mover las piernas como una desquiciada. Desquiciada estaba un poco también aquella mañana, en la que tenía a Jean-Philippe (paciente y comprensivo) al otro lado del teléfono. Después de aquella entrevista, en la que el galo se comunicó en inglés, francés y un español nada novato, el cincuenta por ciento del grupo demostró que lo suyo era cuestión de pura habilidad con el lenguaje, el hablado y el sonoro. “Empezamos experimentando porque lo que hacíamos era inusual, hace diez años en Francia la escena electrónica estaba muerta y nadie hablaba en ningún lugar del mundo de revival del rock electrónico”. Fue un sello español, Elefant, el que les dio una primera oportunidad cuando editaron un Ep homónimo de la banda.

"Nos sentimos cercanos a grupos de la escena neoyorquina como LCD Soundsystem o Rapture, pero eso no quita que nos dejemos de sentir precursores"

Después vino “Installation Sonore” (Pias, 99), un debut de marcada tendencia house, y más tarde “Music Kills Me” (V2, 02), donde las guitarras se hacían más patentes entre capas de ritmos y estribillos repetitivos. Pero, sin lugar a dudas, con “Schizophonic” se posicionan firmemente. “Hace más de diez años que empezamos a tocar y a componer como Rinôçérosé. Siempre hemos sido una banda de rock con influencias de la electrónica, así que si alguien nos pregunta si nos hemos subido al carro de lo que se lleva ahora, contestamos que nosotros ya lo hacíamos en el 94. Nos sentimos cercanos a grupos de la escena neoyorquina como LCD Soundsystem o Rapture, pero eso no quita que nos dejemos de sentir precursores”. Los franceses se han hecho valer a través del coraje que han demostrado, tanto en sus discos como en sus directos, el gancho más potente de los franceses, donde han conseguido más adeptos. Desde aquella primera actuación en España, en Benicàssim 99, han conseguido recrear un auténtico espectáculo sonoro. “Todo lo que hacemos está orientado en el momento de tocarlo en directo, pero en concierto nuestros temas suenan direfentes. Siempre hemos llevado una banda grande, ahora somos dos guitarras en vez de tres, esa es la única novedad. Lo importante es que todos tenemos claro que hay divertirse y trasmitir esa diversión”. Muchas cosas han cambiado respecto a sus anteriores Lp’s, un salto de grado, más que de registro “Con éste album hemos puesto la integridad del grupo en peligro, nos hemos arriesgado mucho porque la gente esperaba otra cosa más cercana al house y es verdad que en “Schizophonic” se notan más las guitarras que antes, ahora están en primer plano”. Unas guitarras influenciadas por el hard-rock clásico, el funk setentero y la música disco primigenia a partes iguales. “Sí, hemos intentado que fuera muy groovy, que la gente sintiera esa sensación del funk en los huesos, pero sin dejar de lado la fuerza que da la distorsión de las cuerdas. Ha sido un peligro que hemos querido correr porque nos apetecía, simplemente. Para nosotros el grupo es el mejor hobby del mundo, no lo hacemos por dinero, porque los dos trabajamos como psicólogos, y eso nos da mucha libertad. Cuando acabo las clases que doy en la universidad me apetece tocar como si tuviera quince años”. También está el tema de los colaboradores. “Son grandes personas que han sabido impregnar su personalidad en cada tema. Cada uno ha participado en la composición de la canción que cantaba, nos lo hemos pasado en grande y hemos conseguido la heterogeneidad que queríamos. Ha sido muy terapéutico para todos”. Mark Gardener (ex cantante de Ride), Nuutti Kataja (Dead Combo), David Lavaysse (I&Fused) y Jessie Chaton (Fancy), que ha interpretado el single de adelanto, “Bitch”, un hit explosivo, tanto por su letra como por su capacidad de atracción. “Creo que ´Bitch´ es una mezcla entre AC/DC y los Jackson 5. Es el único tema en el que hemos compuesto la letra. La canción habla sobre una relación sexual sadomasoquista, pero no hay ningún tipo de maltrato, es sólo un juego sexual entre un hombre y una mujer”. Y, aunque preguntar si se trataba de algo autobiográfico hubiese venido a cuenta, evito interesarme por sus hábitos sexuales de forma directa. “El hecho de que Patou y yo estemos casados es maravilloso a la hora de componer y de tocar porque nos entendemos perfectamente y nos complementamos muchísimo, aunamos nuestras ideas sin necesidad de hablar. También es verdad que pasar todo el día juntos, trabajando y conviviendo no es fácil, así que vez en cuando necesitamos un poco de distancia, entonces yo me voy a ver a mi madre y ya está. O podría irme a Barcelona. Me iría allí si tuviera que dejar Montpellier. Me encantan las discotecas y los museos, además hacéis las mejores fiestas del mundo”.

Un comentario
  1. You keep it up now, unadnsterd? Really good to know.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.