“Es un disco autobiográfico al noventa y nueve por ciento”
Entrevistas / Estrella Fugaz

“Es un disco autobiográfico al noventa y nueve por ciento”

Raúl Julián — 27-04-2022
Fotografía — Archivo

Lucas Bolaño publica el que es segundo disco de su proyecto más reciente, Estrella Fugaz, tras la buena acogida que tuvo su estreno hace un par de años. ‘Luminosa’ (Sonido Muchacho, 22) es un álbum presentado en primera persona, en el que el músico comparte, sin tapujos, experiencias y pensamientos en clave de pop.

‘Luminosa’ (Sonido Muchacho, 22) es un disco mayoritariamente de pop, expandido en diferentes direcciones, pero sin duda de ese tipo de pop con mayúsculas. Lo primero que me gustaría saber es cómo entiendes tú la música en general y el pop en particular.
¡Qué pregunta! (Risas). No sé qué contestar... Yo escucho música muy variada. En realidad, lo que se puede entender por indie no es lo que más suelo escuchar. Yo entiendo todo como un disfrute. Hago lo que me gusta y canto de dónde vengo. He escuchado mucha música de los noventa, y en mi casa mi viejo ponía mucha música colombiana, salsa y así. Vengo del reggae también. Me gusta mucho tipo de música y aquí se plasma un poco eso. Yo diría que ya casi todo es pop. Está todo tan mezclado...

En cualquier caso y como decía, dentro del género del pop, el disco cambia de sentido en numerosas ocasiones ¿Tenías claro que esta variedad debía estar ahí? ¿Qué tipo de álbum querías hacer? ¿Qué aspecto querías que tuviera ‘Luminosa’?
Quería que fuera más abierto que ‘Un sendero fluorescente’. Yo venía de otros proyectos más noventeros de guitarra, bajo y batería, pero realmente yo tampoco soy solo eso. Y me hacía ilusión plasmar todo el recorrido. Igual que con otra edad fui más de grupos yanquis, y en otras épocas más de reggae y de dub, pues ahora (que ya tengo cuarenta años) hay algo con más menjunje en todo eso. Disfruto haciendo eso y no me gusta hacer siempre lo mismo. Hay que pasarlo bien.

“Quería que este disco fuese como estar conmigo por ahí un fin de semana”

Diría que las letras de ‘Luminosa’ tienen un trazo costumbrista, actual y sincero ¿Qué debe tener obligatoriamente la lírica de Estrella Fugaz?
Las letras van un poco en la línea de ‘Un sendero fluorescente’, rollo costumbrista... hablo de cosas que me preocupan. Quizá ahora he hecho un ejercicio de intentar introducir cosas como más de coña. En un ‘Un sendero fluorescente’ ya quería abrir un poco el hueco al humor; y en este lo mismo, aunque no sé si ha quedado más plasmado, la verdad. Pero sí quería que hubiera un poco de humor, de rollo ácido, que cuando escuches el disco también puedas reírte y decir “este tío es gilipollas”. Que fuese un poco como si estuvieras conmigo por ahí un fin de semana: tomas algo y lo pasas bien y tal, pero también tienes algún momento más íntimo. Lo veo un poco como convivir conmigo.

Entonces ¿Cuánto de autobiográfico hay en las canciones de este disco?
Todo lo que hay es autobiográfico excepto las referencias a series o cosas así. Incluso esas referencias lo son, porque si hablo de Star Trek es porque la he visto de canijo. Todo es autobiográfico. Quizás hay veces que hay una visión más mágica o más brillante de lo que es la realidad, pero es que al final esto son canciones y también hay que darles brillo. Pero diría que es autobiográfico al noventa y nueve por ciento.

Efectivamente, en algunos momentos del disco también aparece ese punto de ironía, humor negro y acidez que antes comentabas ¿Cómo es de importante este elemento actualmente en tu música?
Al final, cuando saco un disco es siempre un reflejo de lo que soy, no hay más historia. Por eso está ahí ese humor ácido y absurdo que hace que a veces te rías de mí y digas “este tío es idiota”. Otras veces el asunto tiene un punto político pero ingenioso. Es un poco un popurrí. No lo había pensado así, pero ahora que lo preguntas sí que es un poco como lo que te decía antes: como estar un fin de semana conmigo. Una especie de convivencia en la que vamos a dormir en la misma casa y compartir momentos personales. Pues este disco es un poco así. Por ahí va el asunto. Me gusta que haya humor. Antes, por ejemplo, en Experimental Little Monkey, no era así. Era más seriote y era un coñazo (Risas).

El disco ha sido grabado, producido y mezclado por ti mismo ¿Crees que focalizar todo el proceso en la misma persona dota de una identidad global al disco? ¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes de encargarte tú mismo de prácticamente todo?
No sé con quién lo hablaba el otro día, pero la mayoría de los grupos lo que hacen (o hacemos) es ir al estudio cuando ya está todo pulido, directamente a grabar. A no ser que tengas más pasta y puedas estar una semana con ello, claro. Yo curro en casa y puedo currar en cualquier momento dependiendo del día, o prolongar el proceso de la canción durante meses. No compongo y luego grabo. Yo alterno composición y grabación, y puedo ir metiendo cosas por el camino. A mí eso me mola porque las cosas van creciendo, son reversibles y puedes darles vueltas. Y eso yo creo que en un estudio no puedes hacerlo, a no ser que tengas mucha pasta, como decía. Es un proceso que a mí me mola hacer así.

En cualquier caso, en el álbum también hay colaboraciones como la de Valdivia en “Una DDH y el Electropura” ¿Cómo surgió esta colaboración y qué otros músicos participan en “Luminosa”?
Hay peña, eh (Risas). Han colaborado no solo cantando y tocando, sino también con las traducciones. Valdivia y yo nos conocimos porque los dos bajamos a tocar a Murcia y surgió amistad. Yo he hecho la producción de los últimos cuatro temas que ha hecho, que los está sacando ahora. Y guay porque ella es crack cantando, es ejemplar, una maravilla. Le pregunté si se animaba y se animó. También canta Catalina que tiene un proyecto de electro-pop en francés que está muy guay y mete unas voces en “Las plantas”. Y también Betacam, con una base hecha con un sinte modular sobre la que hice “Uhura y Sulu en una nave de blancos”. También hay trombones de Nuria, flautas de Jose. David de La estrella de David también aparece en “La pastilla”. Mola hacer cosas en abierto, porque trabajando solo en casa y haciendo todo solo se puede correr el riesgo de que sea un poco coñazo. Mola juntarse con colegas con los que te llevas bien y hay una relación de amistad y cariño y poder hacer cosas: que sea como una ensalada y que no dependa solo de ti, que sea una especie de fiesta.

“Me gustan los procesos que crecen, son reversibles y puedes darles vueltas”

Escuchando el disco me han venido a la cabeza nombres diversos como los Delafé, La Casa Azul, los Mercromina de Joaquín Pascual o Vainica Doble ¿Qué artistas son los que más te motivan como compositor?
A Mercromina lo he escuchado mucho, pero hace ya tiempo. Era un grupo que me molaba y puede que la forma de cantar recuerde. No soy especialmente fan de Vainica Doble, pero las he escuchado y algo me molan. Delafé me imagino que es por el rollo rapero. También hay algunas letras de Mucho Muchacho, también he pensado en clásicos colombianos... Hay un popurrí de cosas que quería tener presentes, pensar en ellas y que salieran. Pero supongo que has acertado un poco, sí.

¿Cuáles dirías que son las principales diferencias hay entre ‘Luminosa’ (22) y ‘Un sendero fluorescente’ (20), aquel disco debut de Estrella Fugaz?
En ‘Un sendero fluorescente’, desde que empecé a hacer las canciones hasta que salió, fue un proceso en el que yo estaba un poco perdido porque había dejado el otro proyecto y no tenía un objetivo. Solo quería seguir haciendo canciones, luego me dieron una beca para seguir produciendo y también había tenido una cría, así que las letras también versaban en torno a la paternidad y esa especie de tambaleo de cuando eres padre. Ese disco iba muy por ahí. Mientras que ‘Luminosa’ es más de encontrarse a uno mismo y reírse un poco más. Y con éste tenía el camino un poco empezado. Con ‘Un sendero fluorescente’ empezaron a hacerme caso y tuve buenas críticas, pero ahora tenía un poco de presión en plan “seguro que ahora dicen que el otro molaba más” (Risas). Luego se me pasó y pensé que estaba aquí para pasarlo bien. En resumen: con el primero era padre reciente y estaba un poco perdido, y éste es más de coña y de reencontrarse.

Para publicarlo has fichado por Sonido Muchacho, un sello que a día de hoy es clave en eso que llamamos escena indie nacional ¿Cómo fue el fichaje por la discográfica?
Ahora mismo en la escena es un sello muy guay. Fui moviendo lo que tenía con otros sellos, pero la cosa iba lenta y un día me encontré a Luis, que ya lo conocía de antes, y le dije que tenía esto grabado por si le interesaba. Le había gustado el primero, le mande lo nuevo, también le gustó, me dijo que sí y aquí estamos.

¿Cuál crees que es el lugar de Estrella Fugaz dentro de la actual escena? ¿Cómo o dónde crees que encaja tu propuesta en la escena?
Yo creo que no encaja (Risas). Veo que hay peña muy joven y yo ya tengo cuarenta palos. La escena se repararte entre esa la gente de mi edad que ya tiene un camino largo o los chavales que vienen petándolo fuerte. Mi situación es un poco absurda, porque no voy a ser emergente a los cuarenta años (Risas). El lugar, lo veremos…

Pues dicho de otro modo ¿Cuáles son tus expectativas reales con este disco? ¿Cuáles son las metas?
Cuando haces un trabajo siempre piensas en lo mejor. Lo mejor sería poder vivir de esto, que no creo que sea algo que pueda suceder. Pero si me preguntas cuál sería mi meta, pues sería esa. Lo demás, no lo sé. Nunca he ganado un pavo haciendo esto, pero no pararé de hacer música hasta que palme. Así que el objetivo sería poder vivir de esto, pero si no sucede no pasará nada. Tendré que hacer otras cosas para vivir, como hasta ahora.

¿Cómo son los conciertos de Estrella Fugaz? ¿Qué formación llevas en directo y cómo se plantea la gira para presentar las nuevas canciones?
Hay muchas cosas que se quedaron en el tintero con la pandemia. ‘Un sendero fluorescente’ salió y cuando parecía que despegaba un poco, se fue todo al garete. Ahora tenemos alguna fecha en Zaragoza, Murcia, Cáceres, y también vamos a telonear a Los Punsetes en la Riviera en Madrid. Yo creo que empezaran a salir fechas ahora, con el disco ya publicado. Habrá que meter un poco de caña. La formación es Ricardo, batería, que es quien ha tocado en todos mis proyectos y va con un mix de batería acústica y electrónica. Javier carrasco de Betacam con sintes y bases, y yo guitarra y voz. El formato ideal es el de trio y espero no tener que tocar de otra manera, pero todo puede ser. Pero esto es lo que quiero enseñar: pop y un poco de ruido. Empezamos ahora a ensayar los nuevos temas y cómo funcionará también va a ser un poco sorpresa para mí.

 

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.