“Llevamos veintitrés años dando por culo y todavía hay mucha gente que nos descubre"
Entrevistas / Angelus Apatrida

“Llevamos veintitrés años dando por culo y todavía hay mucha gente que nos descubre"

Jesús Casañas — 28-10-2023
Fotografía — archivo

Angelus Apatrida es uno de nuestros grupos de metal más queridos y aclamados, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras. Prueba de ello es la gira que están preparando y que les llevará por Europa, Oceanía, Asia, América Latina, Estados Unidos y Canadá. Todo para presentar “Aftermath” (Century Media, 23), su nuevo disco, cuyo título (“secuelas”) hace referencia directa a la crisis sanitaria.

Fruto de aquellos días en los que la pandemia azotaba el mundo y nos encerraba en nuestras casas vienen esta docena de temas nuevos, con la caña y calidad que caracterizan a Angelus Apatrida. La particularidad ees que esta vez incluyen hasta cuatro colaboraciones: Jamey Jasta (Hatebreed) canta en “Snob”, Todd La Torre (Queensrÿche) hace lo propio en “Vultures And Butterflies”, Pablo García (Warcry) toca la guitarra en “Fire Eyes”, y Sho-Hai rapea en “What Kills Us All”. De todo ello charlamos con el cantante, guitarrista y frontman de la banda, Guillermo Izquierdo.

Reconstruyamos la historia de este disco nuevo. Para ello me voy a remontar a la crisis sanitaria, que terminó con muchos grupos. Pero vosotros hicisteis aquel disco homónimo, “Angelus Apatrida”, que funcionó muy bien. Se posicionó número uno en nuestro país, entró en listas de Alemania o Suiza, y os llevó a una gira internacional por Europa y América del Norte. ¿Cómo recuerdas todo aquello?
Literalmente, como si hubiera sido ayer, aunque hayan pasado tres años. Lo bueno es que ninguno de nosotros tuvo que sufrir ningún problema grave, ningún familiar ni nadie cercano lo sufrió. Por lo tanto, centrándonos en el tema económico-laboral, ahora lo recordamos como una batalla que acabó con un final feliz. Porque tuvimos serios problemas. Una banda de nuestro nivel tiene que estar tocando continuamente, y que se jodan tantísimos conciertos… Al final un grupo es como cualquier otro negocio, y eso es lo que les pasó a tantos negocios. Lo que pasó con la mayoría de gente que se dedica a la música en directo, a la cultura y al arte, es que no recibimos la cantidad de ayudas que sí que recibieron otros sectores enseguida, que fueron rescatados. Hubo un momento que vimos que peligraba la empresa, porque estábamos en números rojos. Sobrevivimos con lo que pudimos sacar de paro de autónomos, y con la ayuda de nuestros familiares y parejas. Pero sí que hubo un momento que dijimos: “Si en verano esto no mejora y empiezan a salir bolos, tendremos que chapar y buscar otro trabajo”. Pero afortunadamente en julio empezaron a aparecer festivales a pesar de las restricciones, y nos encontramos en 2022 con mogollón de bolos y en una situación bastante favorable. Gracias a la gente sobre todo, que nos ayudó a tirar para adelante: primero comprando el disco y mucho merchan online, y después acudiendo a los shows. Lo recordamos súper felices, el concepto de que solo el pueblo salva al pueblo. Olvídate de los de arriba, de instituciones ni hostias.

"La prioridad tanto para la banda como para Century Media es seguir afianzando el nombre de Angelus en Estados Unidos y Canadá"

Tocasteis en Hellfest, Graspop, Dynamo, Resurrection Fest y Leyendas del Rock, e hicisteis vuestra primera gira como cabezas de cartel en Estados Unidos y Canadá. En febrero de 2023 hicisteis las últimas cuatro fechas de la gira en España con las entradas agotadas. ¿Ha sido vuestra gira más ambiciosa, contra todo pronóstico?
Sí, sobre todo contando con el hándicap que veníamos arrastrando. Teníamos un montón de planes para 2020 que se fueron a la mierda, y uno de ellos era la tan ansiada gira estadounidense, que pudimos rescatar para septiembre de 2022. No vamos a engañar a nadie, sabemos el estatus que tiene ahora mismo Angelus Apatrida en el estado español siendo una de las bandas más punteras del metal, pero no nos esperábamos la acogida tan grandiosa que íbamos a tener en esas cuatro fechas. Fue brutal, hicimos un documental que sacamos este verano en el que hablamos de todo esto: la pandemia, la gira por Estados Unidos. Está en Youtube gratis, se llama “28 meses después”. Nos dio mogollón de esperanza y nos recargó las pilas para poder afrontar una nueva vida.

Esta nueva vida es el nuevo disco, que se empezó a trabajar ya en esa gira. ¿Cómo se hace la preproducción de un disco estando en la carretera?
Ha sido la vez más difícil de hacer la preproducción, pero luego la más fácil de plasmar. Es la primera vez que nos ocurre, que tenemos tan poco tiempo para poder preparar la preproducción en condiciones. Al final lo tienes todo en la cabeza, algún riff ya lo podías ejecutar, era como tener el disco entero compuesto en la cabeza y decir: “No encuentro el momento de que nos sentemos cada uno en casa a desarrollar las ideas. ¡Espero no darme un golpe en la cabeza y que se me olvide! [risas].

El resultado es “Aftermath”. Comentas en la nota de prensa que hace referencia a todo lo vivido desde la pandemia de 2020. ¿Es todo consecuencia de lo que hemos contado hasta ahora en la entrevista?
No era el título que teníamos pensado originalmente, pero al final acabó en este concepto de “Aftermath”: después de una catástrofe, de una guerra… Puede ser físico o psicológico. Marcaba perfectamente, en ambos sentidos, el haber sobrevivido a una pandemia global, que es la primera vez en nuestra vida que lo vivimos. Y haber salido tan reforzados en la banda, musicalmente, con una simbiosis con el público que nunca habíamos tenido… Siempre habíamos tenido muy buen rollo con nuestro público y con todo el mundo, pero esta vez ha ido más allá. Ha habido como una especie de cariño extra, que notamos y seguimos notando en los festivales que hemos estado tocando este verano, y eso es una consecuencia de lo que ha pasado también. Lo que refleja la portada, que es un tópico, pero el tema de la victoria de la gente normal como nosotros, seguidores del heavy metal y del rock, ellos han sido los que nos han aupado y apoyado. El concepto es entre una cosa post-apocalíptica y una romántica.

¿Es un disco conceptual, ahora que has usado la palabra “concepto”?
No, no lo creo. Al menos lo que yo tengo entendido como disco conceptual, que haya canciones que estén entrelazadas entre ellas, que tengan sentido con la portada… Podemos encontrar alguna referencia en alguna canción, que obviamente y como siempre hacen referencia a la vida cotidiana y a las cosas que ocurren. Como “Gernika”, que aunque se llame así salió un día viendo Yemen, Ucrania o Palestina, después de lo que ha pasado encima tiene que ser puramente terrorífico vivir una situación así. Sin previo aviso que suenen las alarmas. Hay canciones que tienen mucho mensaje inmerso. Son más personales, más intensas, como pueden ser “Cold” o “I Am Hatred”, una canción que dice que tengo una mala hostia que no puedo con ella. Pero no, un disco conceptual como puede ser una ópera rock no creo. No somos muy fans de ese tipo de cosas. Habla de nuestra historia, de nuestra evolución, de lo que ha ido pasando en los últimos años hasta lo que estamos llegando, y de lo que queda por hacer todavía.

"Por puro desconocimiento, de niños nunca fuimos demasiado fans del rock y el metal españoles"

Habéis contado con diversas colaboraciones. La que más me ha llamado la atención es la de Sho-Hai, rapeando en castellano en “What Kills Us All”.
Nos apetecía hacerlo. No lo habíamos hecho nunca. De Sho-Hai precisamente somos muy amigos, le quiero un montón, Violadores es la puta mejor banda de rap de este país, y él es uno de los mejores. Siempre ha habido algún guiño por ahí en el que decía “soy un Angelus Apatrida” o cosas así, y llevábamos tiempo diciendo de hacer una mezcla entre el heavy y el rap. Así surgió, hace ya tiempo. Esta canción estaba casi compuesta cuando estábamos con el anterior disco, pero no pudo ser. Para este simplemente le dimos una vuelta, compusimos cosas y se lo comenté: “Oye tío, vamos a hacer esto”, y ya me iba pasando por whatsapp algunas letras. Tengo muchas ganas de que la peña lo escuche. Mucha gente nos decía: “Haced algo en castellano”. El crossover que se crea va más allá, no es la típica banda que pueda mezclar rap con metal… Va a haber mucha gente en España que se va a sorprender, obviamente, como en su momento con la colaboración de Anthrax con Public Enemy, “Bring The Noise”. Aunque tampoco es nada nuevo. Ya lo habían hecho S.A. con Violadores, por ejemplo.

La presentación va a ser por todo el planeta…
La semana de salir el disco, el 27 de octubre, nos vamos de gira por toda Europa con cartel de lujo, acompañando a Death Angel y Sacred Reich. Por fin volvemos al circuito europeo, después de 2020. Nada más terminar esa gira nos venimos aquí y hacemos una gira bastante larga por España y Portugal, desde noviembre. Y después volvemos a Latinoamérica, que no vamos desde 2016. También estamos trabajando en volver a Asia y a Oceanía, creemos que será para abril-mayo de 2024, donde se juntaría también con ir a Norteamérica de nuevo. Estamos cuadrando las fechas en la agenda, porque también vamos a hacer otra gira europea en 2024. Hay mogollón de planes, recuperar todos los que se quedaron en el tintero en 2020. La prioridad tanto para la banda como para Century Media es seguir afianzando el nombre de Angelus en Estados Unidos y Canadá. Va a ser la primera vez que el disco se edita físicamente de forma masiva allí, con una edición especial y una promo… Da un poco de vértigo, porque ahora solo tenemos dos meses para estar más descansados, pero con muchas ganas de empezar.

Hablabas hace un momento de Soziedad Alkoholika, que fue el grupo que recomendabais vosotros para la exposición Tiempos de Rock en la sede de la SGAE en Madrid. Entiendo que es uno de vuestros mayores referentes estatales…
Sí, desde luego. Por puro desconocimiento, de niños nunca fuimos demasiado fans del rock y el metal españoles. Crecimos con Iron Maiden, Judas Priest, Black Sabbath, Metallica... lo típico. Con once o doce años empecé a escuchar música un poco más dura: Kreator, Sepultura, Machine Head, Fear Factory, Biohazard y cosas así, o mucho hardcore de Nueva York, Sick Of It All... De repente escuché a Soziedad Alkoholika y dije “qué cojones es esto”. Creo que fue con la banda sonora de “El día de la bestia”, allá por el 95. Me fliparon, me pillé la maqueta, el “Intoxicación etílica”. Recuerdo ir al colegio escuchándoles, para mí era la vaina.
Luego por supuesto también Hamlet, otra banda que, con “Sanatorio de muñecos”, es uno de los pilares del metal español sin ninguna duda. Además de grandes amigos, son una banda que admiro. Al margen de lo típico, algo de Barón Rojo y cosas así, no conocíamos mucho más. Luego, con los años, sí que hemos descubierto mucho más.

Hablando de descubrir grupos, una forma con la que descubrí muchos que por prejuicios o simple desconocimiento no me había parado a escuchar fue viendo el programa de “Un país para escucharlo”. ¿Os sirvió a vosotros salir en este programa para llegar a un público al que a lo mejor no habíais llegado anteriormente?
Imagino que sí, toda promo y toda publi es buena, y sobre todo aparecer en espacios así es cojonudo. De hecho hemos salido varias veces, y siempre hay peña que te escribe: “Ya estáis aquí otra vez”. En “Cachitos”, en los conciertos de Radio 3, en la reposición de “La Resistencia”… Claro que sí, obviamente para eso se hacen también esas cosas. A mí me pasa exactamente lo mismo que acabas de decir, sé que hay bandas increíbles que por unas o por otras nunca me he parado a escuchar. Y luego me arrepiento mucho, porque las escucho y digo: “¿Dónde habéis estado toda la vida? Sois la hostia, si moláis un montón?”. Pero yo que sé, la sobreinformación, el apelotonamiento de cosas que hay, y con mi propio trabajo también, que cuando no estoy de gira o no tengo que estar que si facturas, que si papel, que si tengo que componer, lo último que hago es escuchar música. O si me apetece escuchar música me pongo cosas que estén en las antípodas, Mecano y cosas así. O tiro de clásicos… Pero es cierto, y es una asignatura pendiente… Como sigue pasando con Angelus Apatrida. Llevamos veintitrés años dando por culo y todavía hay mucha gente que nos descubre. El otro día tocamos en Morata de Tajuña en un concierto gratuito, y la peña: “Llevo ocho años hablando de vosotros, y nunca os había escuchado por una cosa o por otra. Cómo me arrepiento y qué alegría veros aquí porque sois la hostia”. Pero sí, es totalmente cierto lo que dices y me lo apunto para mí, nota mental, porque tengo ahí unos cuantos grupos nuevos a los que tengo que escuchar.

 

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.