Nunca está de más echarle un repaso a los conciertos que, de tanto en tanto, publican los estadounidenses Dropkick Murphys. La fiesta está asegurada para todos, desde los asistentes a la propia banda, pasando por los espectadores que únicamente pueden verlo todo en casa. Aquí, aprovechando nuevamente las fiestas con motivo de St. Patrick, se montaron una juerga –a la que se sumaron The Mighty Mighty Bosstones- de antología que se extendió durante seis noches (y siete conciertos consecutivos) recuperando los temas que eligieron sus fans, entre temas propios y sus habituales temas tradicionales. Punk a la irlandesa, con mucho ritmo y mucho alcohol, como nos gusta.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.