Science and Ritual

No cabe duda de que la electrónica paisajística es uno de los nichos que más alegrías ha dado en la caligrafía cibernética de estas tres últimas décadas. De los Durutti Column más abstractos a Oval, pasando por los clímax más oníricos de Disco Inferno, océanos de belleza nos han inundado los oídos, en una expresión donde el laboratorio de sonidos siempre ha sido la herramienta principal a través de la que cosechar resultados tan brillantes como los firmados por Ultramarine o Seefeel en su momento.

A esta tradición de grabaciones de campo, loops acuáticos y electricidad amorfa pertenece “Science and Ritual”, primer LP de la alianza conformada por el guitarrista británico Tony Laming y el multiinstrumentista catalán Arnau Obiols. Fijados en una disposición central hacia las texturas analógicas y las percusiones orgánicas, el dúo se ha encerrado en la tienda de juguetes para hacer volar su imaginación en un artilugio de belleza aerostática y espíritu post-punk, en su forma de utilizar el estudio como un instrumento más. O, mejor dicho, el proceso de investigación como creación en sí misma.

Pero para que un concepto funcione, no basta con voluntad e ideas, sino que también se hace necesario apresar las musas en el momento de la improvisación. Y eso es lo que se intuye en pedazos de gloria como “Devotion”, donde recuerdan a una versión tribal de Klaus Schulze, o en “Barefoot”, digna de ser comparada con los experimentos más brillantes de Ian Crause. También en “Colouration”, donde arrecia el espíritu de Jon Hassell. En realidad, da igual donde lancemos el oído: la sensación hiperfísica de esta música remite a una hibridación inmersiva donde todos los grupos enunciados arriba les colocan en una posición de privilegio, compartida con otros espeleólogos de pro como Der Panther.

Sin la certeza de saber hasta dónde llegará este proyecto, ahora nos queda disfrutar de tan sembrado ajuar de sonoridades sin correa. La experiencia está más que asegurada.