Tras cinco importantes conciertos en Nueva York, Rage Against The Machine ha compartido las cifras de recaudación de los mismos: un millón de dólares, obtenidos gracias a los fans que compraron entradas benéficas y que se distribuirán entre tres organizaciones sin ánimo de lucro.
Los conciertos se llevaron a cabo en el Madison Square Garden y reunieron aproximadamente a 100.000 personas. El 10% de las entradas para estos espectáculos, así como en toda su gira "Public Service Announcement" se vendieron con "precios de caridad", mediante los cuales se implementaron tarifas más altas, en un esfuerzo por disuadir la reventa.
Entre las organizaciones que recibirán parte de esa cifra de la que estamos hablando en la noticia, se encuentra Immigrant Defense Project, que ofrece ayuda legal a las personas en los Estados Unidos que enfrentan la deportación y otros sinsabores del proceso migratorio. Las otras dos organizaciones son Neighbors Together, que brinda alimentos y servicios sociales a quiénes los necesitan en las áreas de ingresos más bajos de la ciudad de Nueva York; y The Campaign Against Hunger, que facilita el acceso a alimentos sanos y nutritivos en toda la ciudad de Nueva York.
El total de recaudación sumando todos los espectáculos de la gira por América del Norte (Washington DC, Raleigh, Pittsburgh, Cleveland, Buffalo, Toronto y Ontario) supera los dos millones de dólares. Los conciertos de Nueva York fueron los últimos de la etapa americana de "Public Service Announcement". Rage Against The Machine debían embarcarse en la siguiente fase de la gira, constituida por trece fechas entre Europa y Reino Unido, incluyendo dos fechas en nuestro país –que debían celebrarse en Madrid y Málaga–. Sin embargo, la etapa europea de la gira se ha cancelado después de que Zack de la Rocha se rompiera el talón de Aquiles durante el segundo concierto de la gira norteamericana, algo que le ha obligado a actuar sentado durante varias noches del tour americano.
Ocurrió en el concierto de Chicago el 1 de julio, cuando de la Rocha tuvo que marcharse brevemente del escenario antes de volver y terminar sentado su actuación, tras proclamar: “Vamos a mantener esta jodida mierda en marcha. Puedo arrastrarme por el escenario. Vamos a tocar para todos vosotros esta noche”. No fue el único accidente de la gira. En otro espectáculo de en Canadá, Tom Morello fue placado por un miembro de seguridad cuando un fan irrumpió en el escenario.
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