Pablo Hasél tiene un margen de diez días para entrar en prisión. El Tribunal Constitucional no admitió el recurso de amparo presentado por su defensa. Ahora, le notifican al rapero que en el plazo acordado deberá proceder a su ingreso voluntario.
La lucha judicial de Pablo Hasél se remonta a su detención en 2011. En 2014 la Audiencia Nacional le condenó a dos años de prisión por enaltecimiento del terrorismo en sus canciones y en su actividad en las redes sociales. El rapero siempre ha apelado a la libertad de expresión, pero eso no le libró de dicha condena ni de la de 2018. Esta última le calificaba de "reincidente" y además le acusaba de injurias y calumnias a la corona. La pena, ratificada por el Tribunal Supremo, era de nueve meses de cárcel y se sumaba a la ya existente.
El artista anunciaba en su cuenta personal de Twitter el plazo de diez días junto a un mensaje en el que afirmaba que "no ha habido la suficiente solidaridad para parar esto que nos afecta a la mayoría que no tenemos garantizada la libertad de expresión". Su caso es similar al de otro rapero, Valtònyc, condenado a tres años y medio de cárcel también por enaltecimiento del terrorismo y calumnias e injurias graves al Rey.
El rapero, tras conocer la sentencia, ha subido un tema a su canal de YouTube llamado "No habrá cárcel". Pablo Hasél grabó la canción cuando le llegaron tres sentencias distintas de prisión. Un tema con claros tintes políticos y con el que anima a sus oyentes a no dejarse asustar por su encarcelación.
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