El alcalde de la ciudad, Ahmed Aboutaleb, decidió suspender el concierto al considerar "suficientemente seria" la alerta recibida, más aún teniendo en cuenta la cercanía del atentado de Barcelona. La conexión con este, por ahora, es descartada de momento por la policía y por las unidades antiterroristas, aunque todas las fuentes coinciden en que es pronto para sacar conclusiones de ningún tipo.
El aviso de un posible atentado provenía de la Guardia Civil y se centraba en una furgoneta con matrícula española que iba y venía de la sala en cuestión, la Maassilo, continuamente. Durante el operativo se encontraron varias bombonas de gas de uso doméstico dentro de la furgoneta y se detuvo a su conductor, de nacionalidad española, que la manejaba en estado de embriaguez. El País cita fuentes policiales que dicen que el conductor "era el dueño del vehículo y sus explicaciones sobre la carga de bombonas de gas que portaba eran plausibles", aunque El Mundo señala que "la furgoneta no está a nombre del conductor, sino que era alquilada y procedía de España". Esta mañana la policía holandesa anunciaba la detención en Brabant de una segunda persona, un joven de 22 años, durante los operativos de la madrugada de ayer, por su presunta relación con los hechos.
Allah-Las -por si alguien lo está pensando ahora mismo- siempre han descartado que hubiera intención de mofa o algún significado subyacente en su nombre, y tal y como contaban a The Guardian el año pasado lo habían escogido simplemente porque buscaban que tuviera cierta "sonoridad sagrada". También reconocían que les habían llegado bastantes emails de musulmanes diciéndoles que les parecía ofensivo, pero que solían contestar explicando sus motivos y la mayoría de ellos lo entendía perfectamente. En estos momentos la investigación sigue abierta, por lo que iremos actualizando si se confirma algo más.
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