Juntos

El esperado reencuentro artístico entre Igor y Max Cavalera no se ha materializado (al menos por ahora) en una reunión de la formación clásica de Sepultura, sino en Cavalera Conspiracy, una banda de extrema orientación core donde les acompañan el guitarrista Marc Rizzo (Soulfly) y el bajista Joe Duplantier (Gojira). Su debut, “Inflikted”, se publica el 24 de marzo.

Lo extraño y confuso de la salida de Igor de Sepultura y la reconciliación con su hermano Max tras más de una década de insondable distanciamiento desató la imaginación y la rumorología global. Las expectativas se confirmaron cuando ambos actuaron juntos en el décimo D-Low Memorial Show. 

Tras barajar y descartar el nombre de Inflikted para su nueva odisea musical, cambiaron a Cavalera Conspiracy encerrándose en el estudio en julio para registrar su primer álbum, contando con Logan Mader (ex-Machine Head y Soulfly) como productor. “Tras trece años volver a tocar de nuevo con Igor supone tocar un montón de mierda rápida. Podría hacer lo mismo con otra gente, pero con él es mejor, es como debe ser. El hecho de que este disco sea tan rápido lo hace muy fresco porque es un material muy veloz y excitante. Hay mucha porquería en la música en este momento, es bueno resultar directo, es una bocanada de aire fresco en medio de tanta mierda y repetición, sobre todo en América. Ya no puedo aguantar a tantos grupos adscritos a la misma fórmula, al mismo estúpido formato del nu metal. El significado de este disco es que jodan al formato, a lo que es popular, esto es lo que queremos tocar y como nos gusta hacerlo”, explica Max. Once temas descarnados y sin concesiones que se antojan como el mejor de los patrones sobre el que construir un futuro en común. Según Igor: “Lo hemos desnudado todo haciendo las cosas de manera muy simple y efectiva, así que de esta forma tendremos una base sólida sobre la que crecer. Para mí se trata de un comienzo sorprendente, amo cada segundo de este disco y eso me hace sentirme excitado de cara a seguir trabajando, no es como cuando terminas un álbum, cierras la puerta y piensas que como proyecto ya está acabado”. Al porqué de un trabajo tan orientado al hardcore por encima del metal y la experimentación, responde el mayor de ambos. “Teníamos apodos para canciones: ‘Hex’ y ‘Never Trust’ eran ‘Punk 1’ y ‘Punk 2’. No planeamos nada y dejamos que las cosas surgiesen. ‘The Doom Of All Fires’ es un tema muy interesante para mí ya que mi forma de cantar es casi hip hop, sin embargo yo no canto hip hop, más bien hablo. Eso es lo que me gusta de este disco, es alocado y experimental y aunque sea hardcore no imita al hardcore antiguo, sino que estamos creando algo nuevo”.