Los mejores discos de electrónica internacional de 2015

Heterodoxia y femineidad

En un año en que han sido mujeres solistas quienes han facturado buena parte de los discos más relevantes de la temporada -en casos como los de Grimes, U.S. Girls o Colleen, tangencialmente relacionados con la electrónica- no debe sorprender que hayamos elegido el “Platform” de Holly Herndon como el trabajo más relevante de un género cada vez más multiforme y ajeno a tendencias. Más allá de la cuestión de género, de un supuesto punto de vista “femenino” que estaría plasmado en “Platform”, la heterodoxia es precisamente una de las principales características de un disco que en lo conceptual se interroga sobre las relaciones entre cibercultura y humanidad.

Y heterodoxa es también la producción de discos en 2015 en lo que a electrónica se refiere: del industrialismo de Blank Mass, Prurient o Container a la elegancia house de Fort Romeau, el wonky de Rustie o las mutaciones de la tradición berlinesa representadas en los trabajos de tres veteranos venidos de diferentes lugares del mundo: John Tejada, Levon Vincent o Kangding Ray. Destacar también otra cara, la más accesible y/o comercial de un género que a e

Heterodoxia y femineidad

En un año en que han sido mujeres solistas quienes han facturado buena parte de los discos más relevantes de la temporada -en casos como los de Grimes, U.S. Girls o Colleen, tangencialmente relacionados con la electrónica- no debe sorprender que hayamos elegido el “Platform” de Holly Herndon como el trabajo más relevante de un género cada vez más multiforme y ajeno a tendencias. Más allá de la cuestión de género, de un supuesto punto de vista “femenino” que estaría plasmado en “Platform”, la heterodoxia es precisamente una de las principales características de un disco que en lo conceptual se interroga sobre las relaciones entre cibercultura y humanidad.

Y heterodoxa es también la producción de discos en 2015 en lo que a electrónica se refiere: del industrialismo de Blank Mass, Prurient o Container a la elegancia house de Fort Romeau, el wonky de Rustie o las mutaciones de la tradición berlinesa representadas en los trabajos de tres veteranos venidos de diferentes lugares del mundo: John Tejada, Levon Vincent o Kangding Ray. Destacar también otra cara, la más accesible y/o comercial de un género que a estas alturas prácticamente ha venido a sustituir al rock como fenómeno de masas. Clásicos como Garnier, St. Germain o Chemical Brothers y nuevos valores (Floating Points, Bob Moses, George Fitzgerald, Ghost Culture,...) han firmado trabajos valiosos en ese sentido. Luis J. Menéndez