“Nos gusta que nuestra música esté entre lo bonito y lo inquietante”
Entrevistas / O'o

“Nos gusta que nuestra música esté entre lo bonito y lo inquietante”

Raúl Julián — 17-08-2022
Fotografía — Hector Tre

No queda claro si O’o practican pop mutado en electrónica o electrónica disfrazada de pop, en una controversia que resulta ser parte inherente de su encanto. La dupla francesa afincada en Barcelona formada por Victoria Suter y Mathieu Daubigné publica "Touche" (InFiné, 22), un debut que comentamos con la propia vocalista.

¿De dónde ha venido la inspiración para componer ‘Touche’? ¿Qué os ha motivado para componer estas canciones que conforman vuestro primer álbum?
Cuando empezamos a hacer música juntos grabamos un EP de seis canciones llamado ‘Spells’ y empezamos a tocar en directo. Pero obviamente con seis canciones no se puede llegar muy lejos. Así que el impulso inicial fue "necesitamos más canciones". Hacer un primer LP fue inspirador en sí mismo: es muy motivador, ¡y en realidad empezamos a inspirarnos con cualquier cosa! Además, creo que la naturaleza ha jugado un papel importante en la creación de este álbum: es un tema recurrente en la mayoría de las canciones, como si fuese una especie de guía. También intentamos conectar la música con las letras, y que los sonidos que elegimos para una canción tengan sentido con la historia que se cuenta. Así que las letras son una buena fuente de inspiración para crear un ambiente visual y sonoro para cada canción. Luego, por supuesto, también nos inspiramos en la música que escuchamos, en los sonidos que oímos, pero eso no hace falta ni mencionarlo.

¿Dirías que la música de O’o es pop convirtiéndose en electrónica o electrónica disfrazándose de pop?
Quizá es electrónica que se convierte en pop… Nos gusta mucho probar cosas diferentes y no ceñirnos a un género específico. De hecho, en ningún momento nos decidimos por un género, supongo que sólo sabíamos que íbamos a hacer música con la ayuda de un ordenador. Al principio, cuando empezamos, las canciones eran más largas, casi siguiendo el modelo de las canciones de rock psicodélico, sin estribillo ni hilo conductor. Para ‘Touche’ la idea era hacer las cosas de forma diferente, probando formatos más cortos, con estribillos más pegadizos y demás... Y la gente empezó a llamarlo pop, así que nos quedamos con ello.

Efectivamente, el disco incluye otros embellecedores: algo de avant-garde, mucha modernidad y pose arty ¿De dónde vienen esos elementos? ¿Cuáles han sido vuestras principales influencias en ‘Touche’?
Los dos somos apasionados de la música desde pequeños y con padres muy melómanos también. Lo cierto es que eso nos ha influenciado mucho. Escuchamos muchos géneros diferentes, abarcamos desde la música clásica hasta el techno, pasando por las músicas tradicionales del mundo y el pop. Por supuesto, estamos influenciados por otros artistas y por la música que escuchamos, pero no creo que hayamos pensado conscientemente en ninguno de ellos mientras hacíamos el álbum. Es más bien una inspiración más profunda, que está ahí simplemente porque forma parte de nosotros. De hecho, cuando sentimos que nos recuerda demasiado a artistas que amamos, como James Blake, Nicolas Jaar o Kate Bush, por nombrar algunos, siempre decidimos tomar una dirección diferente porque no queremos sonar demasiado como ellos. Pero sería genial que todas estas influencias se reflejen en este disco, ¡todas a la vez!

“Lo único que sabíamos es que haríamos música con la ayuda de un ordenador

En cualquier caso, esa dualidad y mezcla de estilos es uno de los principales atractivos de ‘Touche’ ¿Qué tipo de disco queríais hacer? ¿Qué aspecto queríais que tuviese el disco?
No teníamos un plan real, pero la idea más importante para nosotros era encontrar un sonido característico, en lugar de limitarnos a un género específico. Hasta entonces, la música solía tener matices un poco tristes y oscuros. Con el álbum, queríamos mostrar también otra cara de O'o. Nos sigue gustando utilizar tonos menores, pero era un reto interesante explorar un lado más divertido y alegre. También, como decía antes, decidimos volver a formatos más tradicionales, canciones más cortas con un estribillo, en lugar de los formatos más largos y progresivos por los que apostamos en nuestro EP. Nos gusta coquetear con diferentes géneros: por ejemplo, empezar con una canción pop pero terminar en ambient. Poder cambiar de estilo en el álbum, incluso dentro de una misma canción, pasando por diferentes estados de ánimo y saltando incluso de un mundo a otro. Eso es algo que creo que sí nos propusimos.

Me encantan esas voces incluidas en el disco, las mismas que casi sugieren hipnóticos cantos de sirena ¿Cómo fueron grabadas las voces en el disco? ¿Qué efecto pretendíais conseguir en el oyente con las voces?
Personalmente no quería "sólo cantar". Siempre me ha gustado encontrar sonidos diferentes en mi voz, que no sea sólo "bonita". La forma de trabajar comienza, en la mayoría de las canciones, con la voz. Trabajo en mi rincón con una loop station y primero grabo sonidos en bucle, onomatopeyas o a veces incluso palabras, y compongo la línea melódica vocal encima. Así que, desde el principio mi voz se utiliza como acompañamiento, como un piano o una guitarra, por ejemplo. Por supuesto está la producción de Mathieu, a quien le gusta trabajar las voces, modificarlas, aunque sea para hacerlas irreconocibles. A veces le pregunto qué es un sonido concreto y me sorprende respondiendo "es tu voz".

El propio Mathieu completa la respuesta: Cuando descubrí Ableton siempre buscaba el "a capella" para poder hacer canciones alrededor de las voces. Luego descubrí los samplers y las inmensas posibilidades de los efectos que te permiten convertir la voz en un sonido, en otro instrumento... Trabajar ahora sólo con la voz de Victoria me obliga a llevar este trabajo un poco más allá, para hacerlo evolucionar y es realmente interesante explorar todas las posibilidades.

Tirando de referencias en el disco: Kate Bush, Beth Gibbons (de Portishead), Björk o Laetitia Sadier (de Stereolab) ¿Cuál eliges?
¡Depende de para qué! (Risas) ¡Pero una mezcla entre todas ellas parece un sueño! Tal vez yo me decantaría por Kate Bush y Mathieu elegiría a Björk

El disco me resulta, al mismo tiempo, muy delicado y muy atrevido, muy insinuante.
Creo que nos gusta mucho que pueda ser algo entre lo bonito y lo inquietante. Hay una mezcla de voz natural con sonidos triturados que a veces pueden sonar como algo raro en medio de una canción dulce. Tampoco lo decidimos, es más bien algo que surge porque nos gusta este contraste, pero la idea es que siempre haya algo un poco fuera de lo normal.

¿Cómo es el proceso compositivo en O’o? ¿Cuál es vuestra forma habitual de trabajar?
Como te comentaba, el proceso de composición suele comenzar con la letra. Luego me pongo a componer la melodía de la voz y una vez que la base nos gusta lo suficiente, entra el trabajo de Mathieu. Construimos la parte instrumental en torno a la letra, intentando inspirarnos en el significado de las palabras y en el tipo de sonidos que pueden evocar. Y, por supuesto, utilizando las diferentes herramientas que nos proporciona Ableton, o el sonido del sintetizador Prophet 8, que es muy particular y reconocible. Trabajamos juntos, de forma bastante estructurada, dando importancia a cada pequeño detalle de forma a veces bastante obsesiva. Aunque en las primeras etapas entran en juego elementos de improvisación, e incluso de accidente, las canciones finales están cuidadosamente estructuradas en su desarrollo.

¿Qué ventajas e inconvenientes tiene el hecho de ser un dúo?
Creo que hay muchas más ventajas que desventajas. Realmente nos encontramos muy cómodos porque estamos de acuerdo muy a menudo. Queríamos las mismas cosas. Lo más difícil, a veces, es el exceso de tiempo que pasamos juntos ¡Somos como una pareja de ancianos! (Risas). Pero ambos sentimos que esta colaboración nos ha llenado y nos ha permitido hacer cosas que no habríamos logrado el uno sin el otro.

“La naturaleza ha jugado un papel importante en la creación de este álbum”

‘Touche’ es vuestro debut en format largo ¿Qué expectativas tenéis con el disco?
¡Conquistar el mundo! (Risas). Nos llevó mucho tiempo terminarlo y darlo por terminado. Y es nuestro primer LP, lo que lo hace especial en sí mismo. Además, es un disco que nos ha permitido fichar por InFiné, un sello que siempre habíamos respetado.
Sentimos que estamos en buenas manos, y esperemos poder tocarlo más en directo, y ¡ver un poco donde nos lleva…! Pero lo que nos gustaría, más que nada, es que nuestra música evocara sensaciones y emociones.

Sois franceses, pero lleváis un tiempo asentados en Barcelona ¿Qué os llevó a mudaros a la ciudad? ¿Cómo os sentís en Barcelona?
¡Ahora tenemos calor! (Risas). Yo vine a Barcelona para descubrir otro sitio, vivir fuera de mi país y tener esta experiencia. Me enamoré de esta ciudad tan bonita, festiva e inspiradora. ¡Y me quedé hasta ahora! Conocí a Mathieu en el cole, cuando éramos adolescentes. En aquella época ya hacíamos música juntos, aunque era un estilo muy diferente al de O’o, pero podríamos decir que había cierta conexión artística entre nosotros. Tomamos caminos diferentes y, cuando años más tarde me comentó que quería cambiar de vida, le propuse venir a vivir conmigo a Barcelona para hacer música juntos. ¡Y así fue! Es estimulante vivir en el extranjero, estar inmerso en una cultura diferente, y aunque no sintamos una influencia española directa en nuestra música, lo más probable es que, al vivir aquí, al menos nos haya inspirado.

Ganasteis el concurso Bala Perduda organizado por sala barcelonesa Apolo en 2018…
¡No lo podíamos creer! Aparte de un concierto en Heliogabal, la primera vez que nos subimos juntos a un escenario fue en la Sala Apolo para el Bala Perduda. Estabamos aterrados y, de hecho, el concierto de la final fue un desastre para nosotros porque tuvimos un montón de problemas técnicos y teníamos muy poca experiencia. ¡Incluso salimos del escenario sintiendo vergüenza! Así que cuando ganamos fue algo totalmente inesperado ¡y también bastante mágico! Ese concurso nos aportó mucho: tocar en el Primavera Sound y grabar ‘Touche’ en Aclam Records, son recuerdos inolvidables.

¿Cómo son los conciertos de O’o?
Para el directo seguimos siendo un dúo, lo que reduce el campo de posibilidades y al mismo tiempo nos hace redoblar esfuerzos para hacerlo más vivo y, sobre todo, diferente con respecto a los temas del álbum. Añadimos mucha guitarra, por ejemplo. Nos parece interesante dar una nueva vida a las canciones en directo, estirándolas y tomándonos el tiempo de viajar de un universo a otro. Hemos alargado todos los temas con «outros», momentos muy atmosféricos u otros mucho más bailables. Nos gusta ver bailar a la gente, y también hacer un tema con guitarra y voz. Queremos que sea un camino sinuoso, que haya sorpresas, cosas nuevas que solo se pueden escuchar en un directo. Aquí también nos parece importante no tener que elegir un género y divertirnos cambiándolo a lo largo del set, incluso más que en el disco. Ahora estamos empezando a tocar de nuevo y estamos probando cosas, pero nos gustaría poder trabajar las luces y quizás algún día añadir músicos al escenario. Pero bueno, de momento, la idea es poder tocar lo máximo posible, coger experiencia y ver hacia donde nos lleva O’o.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.