"El rock debería ser siempre contestatario y no conformista"
Entrevistas / Aphonnic

"El rock debería ser siempre contestatario y no conformista"

Noel Turbulencias — 06-05-2024
Fotografía — Alberto Lora

Aphonnic, la emblemática banda de rock/metal, ha vuelto con fuerza en base a su último álbum titulado "Crema" (Maldito Records, 24). Un trabajo con el que están incendiando cada escenario que pisan, apurando una gira que les está llevando a recorrer toda la península ibérica.

La banda viguesa de rock/metal Aphonnic viene de lanzar su esperado nuevo álbum “Crema” y ha comenzado a incendiar todos los escenarios de su gira por la península. Casi veinte años sobre las tablas dan muestra que esta formación es, desde hace ya tiempo, uno de los grandes referentes del noroeste peninsular en su género. El presente disco va a ser el gran incentivo que conseguirá que mucho más público ponga su atención en estos titanes de la escena.

“Crema” nace de un proyecto de micro mecenazgo en que realizabais una preventa del disco con diferentes recompensas. Parece que se cumplieron ampliamente las expectativas.
Así es. De 15000€ que pedíamos hemos conseguido 21300€. Tenemos pocos fans, pero creen en esto a muerte, como nosotros, estamos muy orgullosos de ellos y ellas y los tratamos de la mejor forma posible, ya que son nuestro pilar para crear nueva música. Mientras tengamos a esta gente empujando seguiremos creando nuevas canciones: son de las cosas que más feliz te hacen y crear nueva música siempre es una satisfacción personal.

Lo primero que se sucede, una vez alcanzado (sobradamente) el objetivo del micro mecenazgo es el lanzamiento del nombre del disco y la portada. Y fue entonces cuando se polarizaron las reacciones ¿Estáis satisfechos con el ruido creado en torno a la misma?
Estamos muy contentos. hemos trabajado mucho en este disco y las críticas están siendo buenas tanto por parte del público como de la prensa. La portada y el título los hemos creado como anzuelo para atraer a nueva gente. Los que ya nos conocen vendrán igual a escuchar el disco, pero queríamos llamar la atención de más público y ver qué pasaba. Todo está pensado: colores llamativos, pereza a la hora de escuchar nueva música… estamos en una sociedad de la foto, del filtro, de aparentar, de mostrar felicidad y buenos cuerpos, pura apariencia. La portada y el título han llamado la atención de propios y extraños y eso es muy buena señal. Es muy difícil que la gente haga caso a cosas nuevas y esta portada al menos crea alguna curiosidad.

En una primera escucha, “Crema” parece un trabajo más accesible sin perder un ápice de potencia y personalidad ¿Habéis notado algún cambio en el recibimiento?
Lo que sí ha cambiado con respecto a los anteriores es que suena más fresco y con muchas más y mejores melodías. La gente canta desde el primer segundo hasta el último y eso crea un vínculo y una participación muy chula en el concierto. No hay partes de voz rasgada, por eso parece más accesible. Pero es solo un matiz: el veneno sigue estando entre esas melodías.

También aparecen letras más personales ¿Qué pasó para que os atrevierais a hablar de vuestros abismos?
Aunque en este disco hay varias canciones que hablan de cosas personales, son cosas que pueden llegar a vivir muchas personas diferentes, por eso que no se hacen tan personales, aunque lo sean. Estás contando tu experiencia, que puede ser igual a otra gente que haya pasado por eso. Tener hijos o ser muy tímido hace grande el abanico.

"El veneno sigue estando entre esas melodías"

“Caracol en cuesta” es uno de esos abismos en donde habláis de algo tan antagónico de los escenarios como es la timidez.
La extrema timidez, como yo he tenido, es una carga enorme en ciertas edades, básicamente porque nunca encuentras el momento perfecto para tomar una decisión y cuando te vas a lanzar después de pensarlo mil veces siempre llegas tarde. Es jodido, pero bueno… todo se supera a base de hostias que te da la vida. Camina o revienta.

Y esos abismos personales también transcurren por el acantilado social que estamos viviendo. La polarización de la sociedad, la precariedad de nuestro sistema capitalista y todo alrededor de una música combativa ¿Es este el sello de identidad de Aphonnic?
Siempre lo ha sido. Posiblemente escribo de una manera diferente u oculto en alguna metáfora, pero el rock debería ser siempre contestatario y no conformista. Para eso ya está otro tipo de música que suena día sí y día también en radio formulas.

Precisamente, la canción que abre el disco, “Azúcar de algodón”, parece atacar directamente a esa industria musical que abusa de la radiofórmula.
Son demasiadas serpientes las que van detrás de Dios (el dinero). Realmente, la estupidez musical en las radiofórmulas está instaurada más que nunca; y también eso rancio que hay en las pocas emisoras que hay del rock: se sigue con mensajes carcas y ya vacíos dentro del rock y eso es contraproducente. Se está adoctrinando al gran público hacia macro festivales y no hacía salas de cada ciudad. Es el dinero por el dinero y que se haga en el mundo de la radiofórmula puede entenderse, pero no en el mundo del rock.

"Hay grupos nuevos que están del carallo y que tienen mejores canciones que muchos ídolos de los ochenta"

Hablando de la industria musical ¿Cómo estáis viviendo los cambios de rumbo que está tomando cultura hoy en día?
Realmente, cuesta abajo y sin frenos. Lo ves en la sociedad, cada vez más sumisa, más atontada, más dormida. La música es un síntoma de cómo está la sociedad. Menos mal que entre tanta mierda y lo que tratan de venderte siempre hay cosas que se salvan. Dios bendiga al verdadero underground. Sin embargo, lo que peor llevo de este gremio es esa gente que quiere que sigas viviendo en el pasado como si todo lo que se haya hecho antes haya sido lo mejor de la historia. Hay grupos nuevos que están del carallo y que tienen mejores canciones que muchos ídolos de los ochenta, pero sabes que ellos están por encima del bien y del mal. Palabra de Dios en el mundo de los Satanases.

La gira de “Crema” ya está en marcha y nos gustaría saber cómo han sido esos primeros conciertos.
Pues la verdad que están resultando satisfactorios. Nos hemos planteado girar solos y ver qué pasa, tanto para lo bueno como para lo malo, haciéndonos cargo de todo. Es una locura ir solos, pero queríamos saber qué pasaría y por ahora estamos saliendo vivos, que ya es bastante. La gente se ha aprendido las canciones en pocos días y eso es cojonudo a la hora de ser participe en un concierto, todo el mundo está conectado y lo agradecemos muchísimo. No hay mejor recompensa que ver a la gente gritando y cantando tus temas.

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