Chicas y dinero
Entrevistas / Los Guajes

Chicas y dinero

José Luis Quirós — 21-10-2011
Fotografía — Archivo

Los asturianos confirman su condición de primeras espadas del garage patrio con “La vida es como un carrusel” su larga duración más inspirado y lleno de rompepistas.

Los asturianos vuelven con su tercer larga duración, “La vida es como un carrusel”, en el que vuelven a hacer gala de su alegría y buen humor con un puñado de canciones empapadas de ritmos sesenteros y lírica mordaz. El grupo continua fiel, desde su primera grabación, a los estudios analógicos de Circo Perrotti en la ciudad que les ha visto nacer como grupo: Gijón. La producción ha corrido de nuevo a cargo del polifacético Jorge Explosión quien les ha registrado sin poner más ketchup del necesario. “Pues como debe de ser, recapacite y piense usted en ese restaurante en el que le ofrecen una merluza en salsa tal... regada con no sé qué... salpicada con lo de más allá... al final se descubre que todos esos ornamentos no son más que una urdidumbre para disimular la putrefacción del animal. Comparaciones y metáforas al margen, una vez que entramos en el estudio solemos acatar sin rechistar las indicaciones y reprimendas del gran Jorge Explosión que es de los pocos tipos capaces de meternos en vereda, y de este modo los resultados siempre han sido de lo más satisfactorio”. Después de un primer disco de versiones con alguna incursión en la composición y un segundo elepé -siempre con el vinilo como soporte-, ya plagado de composiciones propias en las que ya se reafirman en su credo musical, el grupo vuelve a la carga en poco tiempo con otra entrega que “nos ha vuelto a dejar en la más absoluta bancarrota, pero estamos muy orgullosos de su contenido, letras atrevidas, ritmos galopantes, alguna que otra baladita para esos momentos íntimos, un diseño que sigue los gustos de la juventud, y todo esto a un precio popular. ¡Qué más se puede pedir!”. Ahora falta saber qué es lo que el grupo trata de sacar en claro de todo esto. “En primer lugar que no nos echen de nuestros respectivos trabajos. Tenemos por desgracia unos jefes bigotudos y beatos que ven con malos ojos nuestra relación con el twist y el rock and roll, y después, suponemos que, como la gran mayoría, buscamos chicas y dinero para poder presumir delante de aquellos triunfadores del instituto que otrora tanto se rieron de nosotros, abocados hoy, en su mayoría, a la obesidad y la alopecia, y al deterioro psicológico que suponen los hijos y la familia”.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.