Los Hermanos Podcast

Hola, Internet. He decidido que de mayor quiero ser hermano podcast. Se lo haré saber a mis progenitores y me formaré en lo que haga falta para conseguirlo. Piénsalo bien, ¿quién no querría ser un hermano podcast? Son divertidos, saben de todo, se quieren un montón, y son capaces de sacarle punta infinita a los temas más inesperados y peregrinos de la cultura popular de nuestro tiempo.

De verdad que sí. Un choteo entrañable, el suyo, como no hay otro. Desde 2012 hasta 2023, y a lo largo de más de 200 programas, sus voces nos hicieron sentir parte fundamental de una afectuosa y cachonda unidad, regalándonos sin pedir nada a cambio un enorme puñado de disertaciones pormenorizados sobre los contenidos más disparatados que podamos imaginar (desde relatos cortos sobre samuráis escritos por toreros hasta capítulos de “Médico de Familia”, pasando por la estatura de los famosos, la psicología de la seducción, las películas de los Hombres G o los artículos de la extinta revista Primacía).

En efecto, un cacao miscelánico y enfermizo que logró instalar en sus seguidores un lenguaje y lore propios de inexplicable fundamento pero irresistible hilaridad. Y es que solo un verdadero hermano podcast es capaz de entender qué significan expresiones como “hacer un Chechu”, “que te federen”, la “guitarra del SIDA” o el “tabaco del culo”. Solo un verdadero hermano podcast conoce a la “muy otra Marisol”, los secretos de la inmortalidad según DalasReview o las claves para ser “un hombre sigma”. Solo un verdadero hermano podcast, en definitiva, es capaz de sentir que pertenece a una comunidad invisible que durante una década logró que hasta la chuminada más rocambolesca de la Internet (en femenino, claro) fuera susceptible de obsesión y bufa.

Aunque tildarles de pioneros se antoje arriesgado, Miguel López (El Hematocrítico) y Noel Ceballos (con la posterior y revitalizante incursión de Nus Cuevas a la familia) comenzaron en este negociado cuando el podcast todavía era en blanco y negro y se le consideraba un medio para minorías. Supieron ver, con el ojo avizor que les caracterizaba, un nicho conversacional que años después se saturaría de abuso y ruido, inspirados principalmente por lo que se hacía ya al otro lado del charco y por referentes patrios de la cháchara sin filtro, como sus admirados “Cowboys de medianoche”.

Sin más pretensión que pasarlo bien y extender a las ondas podcasteras lo que buenamente se originaba en sus particulares quedadas, “Los Hermanos Podcast” fueron poco a poco y sin una periodicidad definida ampliando su desvariado imaginario con personajes nuevos, directos con público (ahora, definitivamente no sonaría Kanye en sus triunfales entradas) y posteriormente, secciones que terminaron siendo fijas y favoritas (como Los Hermanos Misterio, los Show and Tell, o su ambicioso y celebrado Nacho Martín Project).

El 27 de noviembre de 2023, Miguel se marchó sin avisar y antes de tiempo, dejando un enorme vacío no solo en el corazón de sus allegados más cercanos y hermanos oficiales, Noel y Nus, sino en toda una comunidad de fieles parroquianos que admirábamos su figura a través de ese polifacético e ilimitado hacer suyo. Su legado, como nota positiva dentro de esta realidad difícil de aceptar, vivirá sin embargo para siempre en estos archivos sonoros como vestigio de una preciosa amistad que, desinteresadamente, estuvo al alcance de todos. ¿Quién no querría ser un hermano podcast?