Decir que Siwel se hace mayor sería, además de un tópico demasiado trillado para un segundo álbum, faltar a la verdad, y no sólo porque el valenciano cuente con poco más de veinte años, sino porque precisamente la inspiración, los sentimientos y las vivencias que nos susurra al oído junto a su inseparable acústica vuelven a tener su origen (y una validez absoluta) en la más tierna adolescencia.
En “Unforgettable...” encontramos de nuevo la misma línea que trazó en su debut, es decir, historias vitales y evocadoras reconvertidas a baladas cargadas de dramatismo y sensibilidad, aunque a diferencia de aquel trabajo aquí hayamos ya un mundo sonoro más profundo y elaborado, sobre todo gracias a una mayor complejidad melódica y una composición algo más profunda y depurada. Temas como “Mayuri” o “Now Or Never” son leves suspiros que transportan ese aire de melancolía y nostalgia tan propio del folk, de tono crepuscular y con sentencias estremecedoras apoyándose en una voz tan delicada que sobrecoge verdaderamente. Siwel no se hace mayor pero sí crece musicalmente, una virtud que le permite a la par que mantener su inocencia, probar incursiones más enérgicas que enriquecen su paisaje musical, como la inclusión de guitarras eléctricas en “Do You Still Think That There’s Nothing I Can Lose?” o la armónica y los juegos vocales junto a una voz femenina en “Lullaby”.
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