Escuchando Niño Futuro
Cine - Series / Rafael Berrio

Escuchando Niño Futuro

7 / 10
Luis M Mainez — 27-02-2021
Fotografía — Archivo

“Escuchando Niño Futuro” es una obra difícilmente clasificable de un artista como Rafael Berrio, que vivió toda su vida ligado a la música y haciendo de los márgenes un lugar habitable, . El donostiarra fue una figura misteriosa que lleva desde los años ochenta componiendo canciones para cantarlas en un escenario, uno de esos personajes que parecen encontrarse a sí mismos en su propia creación.

Por eso, esta película que la Cineteca, la sección cinematográfica de Matadero acoge este final de febrero, es un ejercicio artístico (no sé si cinematográfico) interesante y que entraña un cierto riesgo para un artista que ha encontrado en la madurez el periodo más exitoso de su carrera. Esta película en realidad es un álbum en directo, una oportunidad de escuchar el último trabajo de Berrio con él, como si estuviéramos delante del propio cantante alrededor de la mesa de mezclas del estudio. Ahí, en ese lugar sagrado para el músico, somos testigos de algo sencillo, pero a la vez tan poco habitual como un músico reaccionando (ahora que está tan de moda) a su creación.

“Niño Futuro” es un álbum complicado, lleno de figuras retóricas y juegos de palabras, densísimo. Nada que ver (permitidme, para bien y para mal) con mucha de la música que se hace hoy día en nuestro país, y en él se percibe esa vocación de diferenciación, en las letras y en la vivencia que el director Andrés Daniel Sainz ha capturado de Rafael Berrio escuchando su trabajo, desnudo ante la cámara y los espectadores, que rompen la barrera íntima de un artista que mira a su obra entre la distancia y el apego.

El disco vio la luz en 2019 y cuenta con algunas composiciones realmente notables, cargadas de lirismo y que casi recuerdan a poemas. Sin embargo, el ejercicio que interesará (y agradará o no al público) es la suerte de performance que Rafael Berrio ideó y ejecuta, haciéndose omnipresente sobre el álbum y, por lo tanto, inseparable de su persona desde el momento en el que uno termina el visionado. Una última jugada de un Berrio que falleció hace casi un año y que con esto se asegura ese último giro de efecto con el que sueñan todos los ilusionistas.

;

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.