Entrevistamos a Los Javis con motivo del imparable éxito de "La Mesias"
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Entrevistamos a Los Javis con motivo del imparable éxito de "La Mesias"

Pablo Tocino — 28-11-2023
Fotografía — Archivo

Aunque una entrevista con Los Javis sea ahora un caramelito para cualquier medio, recuerdo que mi jefe fue reticente cuando le fui con la propuesta en el verano de 2017, fascinado por esa primera temporada de 'Paquita Salas' (¡en Flooxer por aquel entonces!).

Finalmente recibí el ok y acabamos charlando en un bar de Malasaña... y, seis años después, lo hacemos en un despacho de las amplias oficinas de (su) Suma Content. Sí, en este tiempo han cambiado muchas cosas.

Algo que no ha cambiado, sin embargo, es lo que se ve en sus ojos cuando desgranan sus proyectos (pasión), cuando hablan de sus actrices (admiración) o cuando miran hacia el futuro (ambición). Y sí, tampoco ha cambiado lo 'difícil' que resulta entrevistarles si tienes muchas preguntas y poco tiempo. Ambrossi y Calvo son lo contrario a un entrevistado de promo que te suelta dos frases aprendidas y ya, y tampoco quieres interrumpirles (ni meterles tijera al editar la entrevista) porque nada de lo que te están contando parece relleno. Por suerte, tanto ellos como Custodio Pastor, su jefe de prensa, me dejan un tiempo extra.

Salgo, aún así, con algunas preguntas autocensuradas sobre la marcha por el tiempo, pero habiendo charlado largo y tendido sobre el cambio de estatus de estos años, lo que significa 'La Mesías' profesional y personalmente, la idea de dirigir videoclips, o el rumor de que iban a dirigir el biopic de Madonna. Rumor ya-no-tan-rumor, pues acaban admitiendo que sí. Y, por supuesto, también les pregunto por un posible proyecto con la lunera Nora Navas. Los Javis están enterados del revuelo con su personaje, porque están atentos a todo lo que se comenta de sus obras; el amor que sienten por ellas queda patente desde que, haciendo un tour por las oficinas,veo que hay paredes pintadas con las primeras páginas del guión de 'Paquita Salas', 'La Llamada' y 'Veneno'. Como ese Saul Goodman que tenía la Constitución pintada en la pared de su despacho, pero con diálogos de Magüi, Cristina, Susana Romero y compañía. Pronto, me dicen, se unirá la primera página de 'La Mesías'. De momento, int. día, empezamos la entrevista.

He estado leyendo la entrevista que os hice para otro medio en 2017, y vi que puse en la entradilla “Los Javis han vivido este último año un crecimiento profesional de órdago”. ¡Y esto fue antes de 'OT' incluso! ¿Sentíais en ese momento que ese iba a ser vuestro “peak”? ¿Os imaginabais que podíais llegar donde os encontráis actualmente? ¿Cómo lo habéis vivido?
Javier Calvo: Lo hemos proyectado siempre, la verdad. Por un lado, todo lo que hemos hecho nos ha parecido en ese momento lo más importante del mundo, el paso más importante de nuestra carrera, etc. Cuando estábamos en el microteatro, nos poníamos detrás a escuchar si se reía la gente, y eso era un triunfo. Cuando nos prorrogaron la obra, ¡la única obra prorrogada en microteatro, imagínate!, para nosotros era el orgullo del mundo. Cuando la obra de 'La Llamada', salió una crítica de El País, y ya lo habíamos conseguido todo en la vida. Siempre hemos tenido esa ilusión de cada paso del camino, siempre nos ha parecido lo máximo lo que estábamos viviendo... pero siempre hemos querido más.
Javier Ambrossi: Y yo creo que siempre veíamos que éramos capaces. No sé si sabíamos que lo íbamos a conseguir, pero sí que capaces éramos, que lo que teníamos entre manos podía funcionar.
J.C.: De hecho, lo que emociona a mí ahora es el futuro. Me emociona lo que está pasando con 'La Mesías', pero sobre todo recoger todo lo que hemos aprendido y seguir haciendo cosas cada vez mejores.

Hay una frase que dijiste en esa entrevista, “nos inspira la gente del día a día, en el metro, en el súper, etc, dicen que cuando te haces muy famoso pierdes el contacto con la realidad y te ríe todo el mundo las gracias”. No sé si el contacto lo habéis perdido, pero sí imagino que esas actividades cotidianas son más complicadas ahora.
J.A.: No te creas, ayer mismo fuimos a hacer la compra, venimos andando a la oficina...
J.C.: No salimos de discotecas, eso es verdad. Pero bueno, es bien sabido que hacemos las fiestas en casa.
J.A.: Pero yo noto que seguimos teniendo contacto con la realidad. Es verdad que si eres el jefe de una empresa, igual vas a un grupo y la gente se calla, o te cuentan menos cosas. No sé si te ríen las gracias, pero sí que te dicen menos las verdades. Yo noto que hacemos lo mismo y tenemos la misma actitud, solo que hemos crecido y tenemos más posibilidades, pero inevitablemente la gente te coloca en otro sitio. Que es lo normal supongo, ¿no?, pero me da un poco de pena.
J.C.: Eso sí que te despega un poco. Que no te digan ciertas cosas.

"Es lo más LGBT que existe: sentir que es tu culpa ser así, que eres un deshecho, que eres un pecador, casi que pedir perdón cada vez que tengas relaciones sexuales, etc"

¿Sois capaces de diferenciar cuándo algo positivo que os dicen es de verdad, y cuándo es para calentaros la oreja, para llevarse bien con vosotros, etc?
J.A.: Ya, es que a ver... una cosa es respetar los espacios de los equipos técnicos para que hablen, se quejen si quieren quejarse, no hablen contigo de ese tema porque al final eres el jefe, etc, y otra cosa, que no hemos permitido que pase, y no va a pasar, es que la gente me diga cosas del contenido artístico que realmente no piensa. O sea, tú no sabes la presión que hago en eso, hago ochocientos cincuenta mil visionados si hace falta, les pregunto, les saco cervezas, luego vuelvo a preguntarles... porque eso es lo más peligroso que te puede pasar como creador. No es tanto las relaciones de amistad y tal, porque uno ya se encarga de ellas, pero con el contenido no. No, porque te cargas tu carrera de verdad.
J.C.: También es verdad que tenemos gente cerca como Claudia Costafreda, Ana Rujas, Macarena, Brays, Claudia Traisac, Custodio, gente que siempre traemos a los visionados, y que lo que quieren es que no nos demos una hostia. Nos dicen la verdad porque saben que queremos la verdad. Por ejemplo, el capítulo 3 de 'La Mesías'. Eso duraba una hora y cuarenta minutos, y nos dijeron que muy bonito, pero que se hacía largo, así que lo sintetizamos. Pero era una hora y cuarenta minutos...

Me los hubiese tragado.
J.C.: (ríe) Ya, es que con eso también hay que tener cuidado, que a la gente se le puede hacer largo algo, y luego a ti te gusta... mira Pablo, aquí tenemos un debate Javi y yo, yo siempre me arrepentiré de haber quitado de 'Paquita Salas' la escena de la puta del maquillaje de Noemí.
J.A.: Ay...
J.C.: Es un extra que se hizo viral, pero no está dentro de la serie, porque en uno de nuestros grupos de opinión se dijo “es que lo de esta señora no lo entendemos, está loca, ¿por qué cuenta eso ahí?, no tiene sentido”, y lo quitamos.
J.A.: Pero sí, yo quiero defender siempre eso, que la gente sepa lo importante que es para nosotros la verdad si te pedimos opinión, y que si vienen a un visionado, lo mejor que te pueden regalar es su sinceridad. Hay directores que piden eso y luego no lo saben recibir, y al final la gente acaba entendiendo que no te puede decir la verdad. Pero creo que nosotros trabajamos bien con la verdad, podemos hacer autocrítica eternamente de un proyecto.

Antes de entrar en 'La Mesías', un inciso. Dentro de las cosas que habéis hecho estos años no está un videoclip. Imagino que os habrán llegado muchas ofertas, no sé si hay algo que se pueda contar...
J.C.: Bueno, hicimos el de Leiva de 'La Llamada', que es el clip con más visualizaciones de Leiva en Youtube.
J.A.: Pero Javi, no es un videoclip como tal, cogimos imágenes de la peli y rodamos un día a Leiva por el campamento.
J.C.: Para mí currículum, es un videoclip.
J.A.: Pero hemos tenido ofertas de gente nacional e internacional, gente súper potente...

¿Algún nombre?
J.A.: No podemos decir nombres porque dirá la persona en cuestión “¿pero éste de qué va diciendo que no y ahora...?”.
J.C.: La última oferta que tuvimos fue de una cantante que admiro muchísimo, pero que justo era cuando estábamos montando 'La Mesías', era imposible. De todas formas, hacer un videoclip no es hacer una serie o una peli, son lenguajes muy diferentes, si nos pusiésemos a hacer un videoclip tendríamos que aprender un montón de cosas.
J.A.: La principal virtud que tiene que tener la ficción es la coherencia y la lógica, comprender por qué los personajes evolucionan en cada escena, su raccord emocional, y eso no es lo mismo en un videoclip... no necesita tener lógica, de hecho. Tiene que tener otro tipo de virtudes que nosotros no necesariamente tenemos. Entonces siempre que nos hemos sentado a meditarlo, ha sido que no. Y siempre nos ha dolido, porque eran o muy amigos, o muy famosos, oportunidades muy buenas... pero siento que tampoco es algo que vaya a estar en nuestro camino.

Hay como varias series dentro de 'La Mesías', y muchísimos temas que se tocan, pero quiero empezar por la relación de Enric e Irene, sobre todo de Enric, con su madre. Hace tiempo vi un meme en inglés que decía algo así como “los daddy issues pueden ser jodidos, pero los mommy issues alteran la química de tu cerebro”.
J.C.: Es que los mommy issues están muy contados desde el chico gay, Dolan, Almodóvar, etc, pero no están tan contados desde el hombre hetero.
J.A.: Bueno, Edipo.
J.C.: Bueno, desde entonces. Y nos parecía muy interesante esta mujer que encontraba tanto la validación en lo sexual, en el protagonismo, en ese narcisismo que tiene, que utilice esa herramienta con su hijo nos parecía super turbio y super interesante, y... y bueno, has visto el final, ¿no? Creo que ahí se entiende todo. Lo que quiere Enric es el amor de su madre de la manera que su madre le ha enseñado.
J.A.: Para nosotros era importante que Enric tuviese internamente una devoción por su madre enorme, porque así el conflicto era más grande. La odia, pero está enamorado de ella. Así, cuando en el capítulo seis vuelve a casa...
J.C.: ...en dos segundos, ella le coge.
J.A.: Quiere destruir todo el mundo de su madre, pero no puede. Y cuanto más la quiere, más difícil es su acción central como protagonista de salvar a sus hermanas.

Los “mi hombre, mi hombre” y los besos en la boca de Ana Rujas (Monserrat joven), el escaneo descaradísimo que le hace Lola Dueñas (Montserrat adulta) al paquete de Biel (Enric adolescente) y ciertas miradas a él en esa etapa, más por supuesto todas las visiones de los extraterrestres... pensaba que el mensaje era que Enric había sufrido abusos sexuales por parte de su madre. Pero en el último episodio me despistó esa aparición del ex novio de ella.
J.C.: Yo sé claramente lo que ha ocurrido, pero no me gusta explicarlo, prefiero que se interprete... pero creo que la clave es cuando la madre dice “es amor”.
J.A.: Es que claro, el abuso no es solo el que uno hace, también es el que permite.
J.C.: El que sus padres permitieron con ella...
J.A.: Es la cadena de permisividad hacia los abusos. De todo tipo, en la serie constantemente se están permitiendo abusos de distinto tipo, y en la realidad es lo que ocurre todo el rato, como sociedad estamos todo el rato permitiendo abusos, en las redes sociales lo consentimos y lo expandimos, retuitear cosas “graciosas” de gente de la que no sabemos su contexto, en prensa y en todo tipo de medios se habla de las vidas de gente sin saber... hay una permisividad del abuso bestial en el mundo en que vivimos. Y en esta serie se toca de manera específica la permisividad del abuso físico, sexual y emocional a los menores. Incluso Enric, cuando coge y se lleva a una niña pequeña de una casa, eso también es muy impactante en la vida de un menor... nadie en la serie hace las cosas bien. Vivimos en una cultura de permisión del abuso.

"La generación Z ama 'La Mesías', porque están hasta el coño del algoritmo"

El final es un poco cierre de círculo, al final Enric está con otra “Mesías”...
J.A.: Es que si nos ponemos a explicar el final... yo sé lo que yo he querido contar, pero la gracia es que la gente hable al espectador individualmente.

No, no, pero sí que me parece un tema importante en la serie cómo al final Enric y su madre buscan el amor en cosas parecidas, ¿no?
J.A.: Sí, la repetición de patrones... fíjate, Irene se dedica a la costura. La idea de los patrones está ahí, sobrevuela la serie eso de que la repetición inconsciente de los patrones o la rompe por la mitad con tu terapia o lo que sea, o te vas a ver plantado adorando a otra Mesías.
J.C.: Habla de lo difícil que es salir del bucle, de bucles que se generan en la infancia.

Habéis dicho que hay una mezcla de géneros en la serie, y uno de esos géneros es el terror. Para mí, de hecho, dentro de 'La Mesías' hay varias series, y una es una serie de terror que acojona. Eso luego está aderezado con un “si quiero películas me las compro en el PRYCA” por aquí, un “aquí puedes ver dibujos animados y Ana Rosa” por allá... pero no sé si os habéis planteado para más adelante el hacer algo de terror 100%.
J.C.: Es que creo que lo más puro es lo más rico y heterogéneo. La pureza de la vida está en lo terrorífico, divertido, absurdo y a la vez lógico que es todo. Mira, el ejemplo es la camiseta que tú llevas (NdR: el poster de 'Titane') ¿Es 'Titane' una película de de terror? ¿Es una comedia, es algo kitsch, es una ida de olla, es un thriller, es fantasía? ¿Qué es? Es muchas cosas, y por eso gana Cannes esa película. Cuando las cosas son solo algo, solo comedia, solo thriller, solo una cosa, son mucho menos interesantes
J.A.: A mí es que no ya como creador sino incluso como espectador: con el género puro-puro ya no consigo conectar. Yo uso el género para añadir capas a lo que quiero contar, pero en la génesis de lo que escribimos no pensamos en el género. El género es solo un vehículo para dirigir, pero en el guión lo que intento es ir a la verdad de la historia, de los personajes y de los temas.
J.C.: ¡No hay que ser binaria!

Esta pregunta es más para ti, Javi (Ambrossi), aunque supongo que es un viaje compartido por los dos. Has hablado en otras entrevistas de que hay similitudes entre la historia de Enric y la tuya, y los protagonistas de esta serie son un hermano y su hermana... que está interpretada por tu hermana en la realidad. ¿Ha sido para ti terapéutico hacer esta serie? Hasta donde te sientas cómodo contando, que entiendo que es una pregunta muy personal.
J.A.: No, no, no te preocupes. A ver, no es una autobiografía ni tiene hechos exactos míos, pero sí que es verdad que he intentado volcar muchas sensaciones y muchas memorias. Yo soy hijo de padres adolescentes, he vivido que mi madre está estudiando, mi padre está de fiesta, ¿qué hago con cuatro años?, pues aprendí a leer. O sensaciones como la idea de sentirte muy solo en el colegio, sentirte muy encerrado, y tener que encontrar la salida en la tele o en las pelis. Y la relación con la hermana... pues es que cuando compartes traumas comunes con una persona, te puede unir mucho pero también te puede separar. Yo adoro a Maca, es mi persona favorita, pero me cuesta sentarme con ella a decirle que siento esto o lo otro, la experiencia común me hace estar más cerrado. Era importante para mí explicar esos vínculos de hermanos que han vivido historias en común fuertes, y que tienen que tener ese momento catártico de abrazarse y ponerse a llorar para poder empezar. Y no siempre estás preparado para eso. Yo siento que no ha llegado mi momento aún.

Ese diálogo final entre ambos...
J.A.: Yo ahí siento que mi hermana me habla. Directamente. Pienso que Maca estaba hablándome a mí, y diciéndome “cuando sea tu momento de volver a casa, pues vuelves”. Por eso estoy tan orgulloso de la serie. No sé si ha limpiado nuestra relación, pero sí siento que es un paso, que por lo menos nos lo hemos dicho a través de la ficción. Que, cuando sea el momento, nos diremos las verdades.

Qué guay, Javi.
J.A.: Ya, es que es fuerte, ¿eh?, no es fácil compartir traumas con un hermano. Porque lo sabes. Porque lo has visto. Ninguno quiere tocar algo que es... es como tener una bomba ahí, una bomba que ninguno quiere tocar, pero sabes que tienes que explotarla en algún momento..
J.C.: …o no.
J.A: O no. Pero está ahí, tic-tac, y en algún momento habrá que desactivarla, ¿no?

La banda sonora tiene un peso enorme en la serie, como en toda vuestra obra. Aparte de lo que ya habéis hablado sobre Refree, Hidrogenesse, la propia Amaia, etc, hablo de las canciones ya existentes que habéis usado, que vuelven a ser un acierto como en anteriores proyectos. He leído que ahí eres tú más el que se encarga, Javi (NdR: Calvo), que te inspiras escribiendo mientras escuchas música, y que las canciones las pones ya en el propio guión. ¡Te envidio un montón! No sé si acordaréis pero la anterior vez os comenté que quería hacer una serie, y que era un poco ida de olla sacarlo adelante, me animasteis a que lo intentase...
J.A.: Siii, me acuerdo, en la barra del bar (ríe) ¿Y la hiciste?

Fue super chungo pero sí, ahora la estamos montando. El caso es que yo también escribo muchas veces con una canción en mente que veo casi imprescindible para la escena, etc, y claro, muchas veces no se pueden usar. Por eso digo, por un lado qué envidia tener la tranquilidad de que puedes hacerlo... pero supongo que hay excepciones. ¿Os ha pasado alguna vez que no?
J.C.: (ríe) Sí, sí, sí. Pink Floyd, capítulo 1... eso casi no se puede. Teníamos que mandarle la escena al señor Roger Waters, escribirle una cartita, el tío estaba de gira, se le caducaba el link, etc, casi que no llegamos, pero al final dijo que sí, y la pudimos meter. Y luego, casi no conseguimos 'Cantando bajo la lluvia'...
J.A.: Es que, cuidado, sale 'Cantando bajo la lluvia', sale 'Titanic'...
J.C.: Si nos decían que no a 'Titanic', teníamos planteado 'Familia' de León de Aranoa, por las implicaciones de la familia fingida. Pero molaba mucho más 'Titanic', porque además queríamos que hubiera un poco de crush de Enric con el amigo, que creo que se entiende que está ahí. Peeero mira, en el capítulo 5 que suena 'Absolute beginners' de Bowie, esa iba a ser 'Common People' de Pulp, de hecho se llamaba 'Common People' el capítulo. Y nos dijo que no. Entonces tuvimos que reconstruir la escena para el cambio de canción. O cuando Albert Pla va a la iglesia, que suena “qué alegría cuando me dijeeeeron”, esa escena se grabó con “padre nuestro tú que estás, con los que aman la verdaaad”, que es una versión de 'The sound of silence', se grabó con Albert tarareándola, y les dijimos que, para curarnos en salud, hiciese algo ni siquiera tarareando, sino casi que humming, para luego nosotros poner la canción que toque.
J.A.: Pero Pilar de producción tenía claro que una parte grande del presupuesto iba a ir para esto. A ver, la primera peli que hicimos tenía canciones de Whitney Houston, te quiero decir, Movistar sabía que parte de nuestra manera de trabajar necesitaba eso. Por ejemplo, lo de 'Cantando bajo la lluvia' era imprescindible que lo consiguiésemos, no tenía sentido si no.

Habíais dicho en entrevistas que 'La Mesías' era “nuestra serie más LGBT” Yo, aunque veía simbolismos en los capítulos, no las tenía todas conmigo respecto a eso... pero el último capítulo me terminó de hacer clic con esa catarsis de Enric y la frase “si te dicen desde pequeño que eres malo, te acabas creyendo que eres malo”. Es una mierda decir esto, pero quizás sea una de las frases más representativas de nuestra experiencia que habéis escrito.
J.A.: Y con eso vivimos, ¿eh? Es que además, su espíritu habla del encierro, 'La Mesías' se posiciona en contra del encierro, del estigma, del dedo señalador que dice que lo que tú haces está mal, a Enric se le dice que tiene un demonio dentro y que lo tiene que vomitar, el desarraigo de irte de tu casa para poderte desarrollar como persona... ¿cuánta gente se va de su casa y luego se planta con una etapa adulta llena de soledad? Y se pregunta si tendría que haber vuelto con sus padres. ¿O cuántos padres se mueren sin saber la orientación sexual o la identidad de género de sus hijos? “No se lo voy a decir a mi abuela, que no sé qué”... pues tu abuela se ha muerto sin conocerte. Y ahora vive tú con ello. Eso no es algo con lo que uno pueda vivir tan tranquilamente. Que las personas que más quieres se mueran sin conocerte... ojo, que luego lo arrastras. Ojo, que lo que te estás diciendo a ti mismo es que no se lo has contado porque estás avergonzado. Y con eso viven Enric e Irene. Irene no cuenta a su marido nada de su vida porque está avergonzada, porque en el fondo siente que todo es culpa de ella. ¡Aunque sabe que no! O Enric, que no tiene relaciones con gente, no tiene amigos, porque sabe que no les va a poder explicar quién es, porque en el fondo siente que él es el culpable de que sus hermanas estén sufriendo. Es lo más LGBT que existe: sentir que es tu culpa ser así, que eres un deshecho, que eres un pecador, casi que pedir perdón cada vez que tengas relaciones sexuales, etc.
J.C.: Además, la manera en que esta serie está conectando con la generación Z, millennial, queer... hay algo en que las cosas que nos interesan le interesan también a la gente que es como nosotros, ¿no?, está todo el mundo diciendo “dilo tata” con Irene y con el fuck-ass Bob que lleva, ¡la serie tiene alma queer!, “no, Felipe ya está casado, está con Letizia Ortiz”...
J.A..: Cecilia Roth viendo alienígenas, Cristina Rueda de OT, Carmen Machi quitándose una peluca...
J.C.: Como diría Samantha Ballentines en el capítulo 2, “están los maricones living Las Vegas en los foros”

Ya os han preguntado en otras entrevistas sobre el casting de niñas, y el de Enric e Irene peques, que es bestial. Pero ojo con los Irene y Enric adolescentes: Irene Balmes y Biel Rossell son alucinantes, ¿dónde les descubristeis?
J.C.: Biel tenía que bailar en el casting, y le vimos bailar de una manera tan personal, tan extraña, tan bonita, tan desprejuiciada, que vimos que era él. Y con Irene, lo vimos por la tristeza que tenía en sus ojos.

Los dos se comen la pantalla con sus miradas, la verdad.
J.C.: Biel tiene una cosa además, que es lo que tienen las estrellas: le pones una cámara delante y es otra persona distinta, se vuelve cien veces más interesante de lo que ya es. Le pones una cámara delante y engancha.
J.A.: Es muy fuerte, ese carisma no lo tiene todo el mundo. Y la cámara no miente, como diría Noemí... los pezones no engañan.

Lola Dueñas ha hecho grandes papeles en su carrera, pero creo que no soy el único que piensa que Montserrat es EL papel de su carrera.
J.A.: Yo lo pienso.
J.C.: Yo creo que está ahí ahí con aquella Sole de 'Volver'...
J.A.: Y el de 'Mar Adentro'.
J.C.: Y el “no labio”, que es iconic. Mira, ¿sabes lo que pasa? Más allá de mejor o peor, creo que lo que nunca habíamos visto era la fuerza que tiene Lola. Se ha tirado a la piscina con algo que nunca había hecho, un personaje tan violento, siempre ha hecho papeles con emoción contenida, de miradas y tal, y de repente esto tan bestia... admiro cómo se tira a la piscina ella.

¿Le disteis alguna referencia? Se me vino a la cabeza la madre de Carrie, claro...
J.A.: Sí, y Toni Collette en 'Hereditary'...
J.C.: También Bernarda Alba, y 'Mamá cumple cien años' de Saura, y... y bueno, que ella sabía perfectamente lo que tenía que hacer. ¡Vamos...! Ella sabe.
J.A.. Lola es majísima, pero tiene tiene una cosa que la gente no ha visto, y es su fuerza y lo que impone: es una persona que va a una lectura de guión e impone mucho a los actores. Aquí lo ha utilizado a su favor muchísimo.

Ana Rujas ya estaba genial en 'Cardo', pero para mí aquí está aún mejor. Y, aunque haya ciertas similitudes, es un papel muy distinto.
J.C.: Sí, yo lo veo super distinto, en 'Cardo' es una persona que está bloqueada, allí no está nada despendolada, está todo el rato como constreñida, con una culpa.. y aquí está abierta completamente. Son dos chicas que podrían compartir el mismo after, pero que cada una está en un momento distinto de su vida.
J.A.: Y luego el look, lo dio todo, ese pelo, los lunares que le pusimos, el maquillaje, todo pensado para que parezca diferente. Queríamos que nos diera una Erin Brokovich, o la madre de 'Mommy', esta madre arrebatadora y bella que no quieres tener.
J.C: Nuestros referentes eran 'Mommy', Erin Brokovich, Brittany Murphy, y Penélope en 'Jamón jamón'.

Ahora que lo dices, ese paseo por el pueblo...
J.A.: Es que es la Penélope de 'Jamón jamón' llevada a hoy. Además hay una cosa que me encanta de Ana, y es que gusta muchísimo a la gente más joven. Hay algo de ella, de su manera de hablar, de existir, incluso de compartir en redes, que es muy de hoy. Es clásica y a la vez tiene algo muy moderna, muy zeta, sin serlo.

Habéis comentado que una diferencia fundamental de 'La Mesías' con 'Veneno' y con el resto de vuestros proyectos es que aquí los personajes no hablan de lo que sienten y, aún así, eso está presente. Y es cierto: Irene no habla de lo ocurrido hasta que está con la policía, y podemos imaginar lo perdido que está Enric, pero no es hasta que en el último capítulo le preguntan “¿quién eres?” que dice “no lo sé”.
J.A.: Era el reto cuando revisamos todos los proyectos anteriores. Están muy bien, responden a una época de nuestra vida como creadores, pero hay como un subrayado, un intentar gustar. 'Veneno' está más “quiéreme, entiéndeme, acéptame”, y con 'La Mesías' no buscamos gustar. ¿Lo entiendes? Genial. ¿No lo entiendes? Genial.

Los personajes resultan mucho más antipáticos, de hecho.
J.A.: Sí, sí, la serie pretende no pedir perdón, ser un relato sobre una historia de una familia a lo largo del tiempo en el que tú puedes extraer tus propias conclusiones, y te resonará a ti según tu infancia y tus movidas. Nuestra búsqueda como autores era ahora esa, el decir “de verdad, que no necesito que me quieran. Que no, que ya no”. Hemos hecho un piloto complicado, un final que a ver qué se interpreta, personajes que cuando te enamoras de ellos no vuelven a salir... hemos hecho un poco la anti-serie. Pero creo que eso es lo que más conecta de la gente de hoy, y por eso la generación Z ama 'La Mesías', porque están hasta el coño del algoritmo.

Lola Dueñas se robó el piloto de 'Veneno', yo en ese momento me quedé con ganas de volver a ver algo de ella dirigido por vosotros... y Montserrat me lo ha dado todo. ¿Os quedasteis también vosotros en 'Veneno' con la espinita de hacer algo más grande con ella? Y, la gran pregunta, ¿os habéis quedado con las ganas de hacer algo más grande con Nora Navas? Porque tenéis a los maricones locos con el “soy muy lunera”.
J.A.. (ríe) Es que somos muy luneras todas.
J.C.: Que Nora vino un dia, ¡un día! Ella está flipando con el impacto, que le han mandado setecientas veces la foto de ella diciendo la frase, “no me había pasado esto ni en 'Pa Negre'”, dice (ríe)
J.A.: Pero es que cuando vino a la prueba de vestuario yo ya sabia que iba a ir a por todas. Nos dijo, “ponedme un chándal, ¿eh?”. Ella ya tenía muy claro dónde iba, y las dos o tres preguntas que nos hizo ya pilló el punto: “a ver, ésta es la típica del pueblo que se coge al marido rico porque sabe que si no, no va a tener cómo alimentar a su hija, porque ha sido madre soltera joven, ¿no?”. Es como una Montse en otro contexto. Y sí, ojalá Nora protagonizando la siguiente peli.

La siguiente peli... ya habéis dicho que tenéis un proyecto en Hollywood y otro aquí, pero que el de aquí seguramente salga antes.
J.A.: Claro, lo de EEUU, es que tú firmas y luego es un proceso muy lento, hay estudios grandes, muchísimo dinero, estrellas que tienen que dar sus okeys, etc, entonces llevamos un par de años ahí, trabajando con un guión... igual es mañana, igual es dentro de dos años.
J.C.: Mientras tanto, vamos a descansar, vamos a presentar los Goya, vamos a ir Cannes a ver pelis, y luego nos pondremos a escribir, yo quiero estar en verano escribiendo.
J.A.: Tenemos cuatro o cinco ideas chulas.

El proyecto de Hollywood... ¿tiene algo que ver con el biopic de Madonna?
J.C.: No, si al final no le ha salido a la pobre. Menos mal que no nos metimos ahí, porque al final no se hizo. Tú imagínate, ¿no? Haber estado ahí dándole, meses y meses... y luego.... que no salga... (se hace un silencio) ¿Por qué me miras así? (NdR: a Ambrossi)
J.A.: Porque nunca habíamos dicho nada de que... de la... de esto. Jamás.

Ya, yo me he quedado un poco pillado, “¿están admitiendo que...?”.
J.C.: Ya...

¿Queréis que lo deje off the record?
J.A.: (ríe) Nah, ahí queda... como aperitivo.

A ver, yo imaginaba que algo habría salido de ese encuentro, que alguna propuesta os habría hecho... y me pegaba más esto que un videoclip.
J.C.: Hombre, algún día me gustaría...
J.A.: Quién sabe, igual de repente nos ofrece otra cosa...
J.C.: La historia es jugosa, y más como yo la contaba, como dice Magüi.

¿Fuisteis a a alguno de sus conciertos la semana pasada?
J.A.: Qué va, es que no estábamos. Estábamos fuera de España, rodando otra cosa...

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