“Shiralee”
Tras un disco autoeditado y giras mochileras en Inglaterra, Grecia e Italia, empezamos a hacer ruido en el underground español y la crítica. En un garito de Salamanca coincidimos con Chema Rey (ex-Radio 3) que flipó con nosotros, pasando de echarnos una mano, a convertirse en nuestro mánager. Fichamos con Subterfuge y llegó nuestro gran momento: “Second To None” (09) con “Shiralee”, nuestro primer single oficial y trampolín al estrellato. Todo el mundo hablaba de nosotros. Vendimos un montón de discos e hicimos ciento cincuenta bolos. El videoclip de la canción afianzó esa imagen western que, para bien o para mal, nos persigue quince años después. Nos convertimos en pioneros del rollo hipsters barbudos, el rock acústico y la americana en España. ¡Habíamos llegado!
Mark Knopfler y México
Comenzamos 2010 como uno de los grupos revelación. Volvimos a la mítica Plaza del Trigo de Aranda de Duero y nos llaman para telonear a Mark Knopfler. Complicado. Knopfler no quiere teloneros, pero el festival de Gredos lo solucionó a lo grande. Nos montaron otro escenario tan grande como el de Knopfler. Y con su último acorde, empezamos a tocar para más de 10.000 personas. Ni sabían quienes éramos. Dio igual. Lo petamos. Para colmo, como estábamos de moda, nos seleccionan para representar a Castilla y León en la Feria del Libro de Guadalajara. Otro bolazo con más de 5.000 personas aullando como locos. Increíble. México marca. En D.F. hicimos un par de bolos y otro en el legendario Alicia con Lost Acapulco. Sueños hechos realidad.
Chris Isaak y Corizonas
En plena ebullición, abrimos la gira española de Chris Isaak (nos eligió él personalmente). El bolo del Palacio de Congresos de Madrid coincidió con el mundial de fútbol del 2010, y en el descanso salíamos todos a ver la pantalla gigante del Bernabéu. Hicimos amistad con Chris y su banda. No se puede pedir más. Poco tiempo después, nos juntamos con Los Coronas y montamos la gira "Dos bandas y un destino", cuyo triple disco se cotiza hoy a 200 euros. Fue un concepto insólito que tuvo enorme éxito. Lo petamos por todas partes y decidimos fusionarnos en Corizonas, que siguen activos hasta hoy. ¡Irrepetible!
Europa y el mundo
“Primero tomamos Berlín…” y luego llevamos el rock a una Albania en plena apertura a Europa, en un caótico Rock The Block, seleccionados por la embajada para representar a España en Tirana. Todo auspiciado por la Unión Europea. Aun no estaban preparados y hubo mil problemas técnicos. A los suecos que iban delante ni se les oía, así que nos plantamos. No tocaríamos hasta que se arreglara. Se montó un cirio descomunal. Y a punto estuvo la cosa de convertirse en un incidente diplomático, que nuestro embajador solventó como pudo. ¡Toma anécdota! Ya con Guille Aragón (la formación clásica del grupo) nos vamos al SXSW de Austin y a Chicago. El año siguiente, nos montamos una gira por garitos de Estados Unidos que nos llevó por una docena de ciudades, de New York a Omaha. ¡De medalla!
La gira interminable a lo Dylan
Nos llaman de la embajada española en Budapest para tocar en el mítico A38 (barco de guerra de la Segunda Guerra Mundial), atracado en el Danubio. Guille se lo perdió por un accidente y fuimos con Lete y Alex de bajista (Stanich Band). Seguimos sacando discos mientras pateamos España y volvemos a México. Y tras casi dos décadas en activo, aquí estamos gracias a un público incondicional que nos permite seguir ajenos a modas pasajeras. Y lo que nos echen.
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